El colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco rechazó el informe presentado por el titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero, en el que se descartó que el rancho Izaguirre, presuntamente operado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), haya sido un centro de exterminio.

Gertz Manero aseguró el 29 de abril que los indicios hallados —fuego en zanjas y fragmentos óseos— se debían a fogatas, y negó la existencia de crematorios clandestinos en el predio. Sin embargo, los integrantes del colectivo aseguran lo contrario: en un video grabado en marzo durante un ingreso al rancho, señalaron la presencia de estructuras subterráneas con restos calcinados.

“Si para él no es un campo de exterminio, ¿qué podría ser cuando quemas a las personas ahí?”, cuestionó Raúl Servín, integrante del colectivo, quien afirmó estar dispuesto a señalar los puntos exactos donde encontraron los restos.

Además, criticaron que la ropa hallada en septiembre de 2024 fue recogida por la Fiscalía de Jalisco sin ser analizada, y que en marzo de 2025 aún encontraron prendas esparcidas pese a que el sitio había sido “limpiado”.

En una carta firmada por su vocera, Indira Navarro, los Guerreros Buscadores pidieron a la presidenta Claudia Sheinbaum no permitir que “también les quiten la verdad”.

El colectivo también advirtió en redes sociales que posee nuevas pruebas, entre ellas imágenes satelitales de la Agencia Espacial Europea que muestran altas concentraciones de ceniza y humo negro saliendo del rancho, lo que, aseguran, “no se produce con fogatas ni reuniones con carne asada”.