Un juez federal en Estados Unidos ha desestimado el caso de corrupción contra el alcalde de Nueva York, Eric Adams, alegando que el proceso "apesta a un trato" influenciado por presiones políticas de la administración Trump.
El caso involucraba acusaciones de soborno y contribuciones ilegales a la campaña de Adams. La decisión del juez de desestimar el caso con prejuicio impide futuras acusaciones por los mismos cargos, contrastando con la solicitud del Departamento de Justicia de desestimarlo sin prejuicio.
Esta controversia ha generado críticas sobre la independencia del sistema judicial y ha llevado a dimisiones dentro del Departamento de Justicia.
Adams, que ha enfrentado múltiples escándalos y críticas, se postula para la reelección en noviembre. Su abogado había solicitado la desestimación permanente del caso para garantizar un juicio justo.
El caso se percibía como una herramienta de influencia política, suscitando preocupaciones sobre la integridad del sistema judicial bajo influencias políticas.
El Departamento de Justicia, bajo la dirección del fiscal general adjunto interino Emil Bove, había ordenado la desestimación del caso, argumentando que la acusación obstaculizaba la capacidad de Adams para abordar temas como la inmigración ilegal y el crimen violento.
Esta decisión provocó objeciones y renuncias dentro del Departamento, reflejando tensiones sobre la dirección del organismo bajo la administración Trump.
Con información de El Diario*
