En su primer día de sesiones, las bancadas rompieron sus primeros acuerdos parlamentarios y exhibieron las fricciones de esta inédita legislatura, donde ya no existe una mayoría hegemónica.


Al asumir funciones en sesión solemne, la LVIII Legislatura, los diputados de Convergencia y el PAN se confrontaron, en los primeros visos públicos de diferencia entre los parlamentarios morenovallistas.


Al responder el último informe del gobernador Mario Marín, el presidente de la Mesa Directiva, Rafael von Raesfeld Porras, criticó la ausencia del mandatario saliente: "resulta lamentable la ausencia del gobernador Marín en esta sesión inaugural de la quincuagésimo octava legislatura del Congreso del estado".


Al respecto, el coordinador de la bancada tricolor, José Luis Márquez Martínez, denunció el incumplimiento de los acuerdos legislativos, lo que demuestra la fragilidad de "Compromiso por Puebla". "Hay descoordinación al no cumplir con lo que se había pactado previo a esta sesión solemne", aseguró.


Al responder el último informe del gobernador Mario Marín Torres, el presidente de la Mesa Directiva, Rafael von Raesfeld Porras, criticó la ausencia del mandatario saliente:
"Resulta lamentable la ausencia del gobernador Marín en esta sesión inaugural de la quincuagésimo octava legislatura del Congreso del estado."


Von Raesfeld ofreció una nueva forma de comportamiento del Congreso ante el Ejecutivo y la modernización del aparato legislativo.
Pero las críticas de Von Raesfeld ante la ausencia de Marín fueron nada ante la vehemencia de los diputados Héctor Alonso Granados (Panal) y José Juan Espinosa Torres (Convergencia), quienes pidieron que no se protegiera a Marín Torres ni ser cómplices del marinismo.


Aunque los grupos parlamentarios decidieron con antelación que el petista Zeferino Martínez fijaría la posición de los diputados de todos los grupos sobre el informe de Mario Marín Torres, con un documento neutral y respetuoso del Ejecutivo saliente. Martínez, aprovechó su presencia en tribuna para criticar al saliente gobernador y al pasado Congreso, originando la furia priista.


La fracción priista acusó a diputados morenovallistas de romper los acuerdos parlamentarios cuando el diputado del PT, Zeferino Martínez, criticó la ausencia de Mario Marín Torres en su sexto informe, a nombre de todas las fuerzas políticas.


Los diputados morenovallistas, Héctor Alonso Granados y José Juan Espinosa Torres se salieron del script, con severas críticas al gobernador Mario Marín Torres.


Los acuerdos se rompieron y la primera sesión se salió del rígido control y mostró el comportamiento de un Congreso con igualdad de fuerzas y de pronóstico reservado.


Alonso Granados pidió la palabra. El diputado aliancista dijo que de ahora en adelante el Congreso ya no será "rehén del Ejecutivo" y que simplemente, Mario Marín Torres les "aventó el informe".


El priista Lauro Sánchez le reviró a Alonso. Dijo que primero se le criticó al gobernador que leyera una larga lista de cifras en ceremonias fastuosas y que ahora que lo envía por escrito es víctima de las críticas. El parlamentario del tricolor defendió a Marín.
La réplica provino del apasionado José Juan Espinosa Torres, quien acusó al PRI y al PAN de un acuerdo cupular para indultar a Marín.
Además, el PRI desconoció el documento leído por Martínez y acusó al diputado petista de alterar el acuerdo original signado por todos los grupos parlamentarios.


La conducción de la sesión por el presidente de la Mesa Directiva, Rafael von Raesfeld, fue duramente cuestionada por el diputados del PRI, José Luis Márquez y por el de Convergencia, José Juan Espinosa Torres.


El PRI y Convergencia solicitaron anular la respuesta al Sexto Informe de Gobierno, debido a que el documento había sido entregado en la misma sesión y a que los diputados Zeferino y el panista Juan Carlos Espina von Roerich ya había fijado una postura.
"Es una aberración jurídica", dijo Espinosa Torres.


José Luis Márquez también pidió eliminar el punto.
Las desavenencias en las bancadas de los partidos de la coalición "Compromiso por Puebla" y el colmillo retorcido de los diputados del PRI, marcaron la sesión solemne.


La legislatura entrante inició con una sesión polémica.
Los acuerdos parlamentarios entre el PRI y las bancadas de los partidos que conforman la coalición "Compromiso por Puebla" se rompieron.


Y entre los partidos de la coalición se dieron visos públicos de inconformidad cuando el diputado convergente, José Juan Espinosa Torres fustigó los pactos cupulares entre el PRI y el PAN; a la vez que el diputado del Panal, Héctor Alonso Granados, acusó de corrupto al gobierno marinista.


Los protagonismos de los diputados afines al morenovallismo rebasaron el liderazgo de los líderes de los grupos parlamentarios del PAN, PRD, Convergencia y Panal, partidos que formaron la coalición electoral "Compromiso por Puebla", la cual quieren hacerse del control del Congreso en la nueva legislatura.


La inercia de la unanimidad se rompió y sorprendió a más de un diputado acostumbrado a las mayorías mecánicas. La bancada del PRI sorprendió a propios y extraños. Con el colmillo más que retorcido, los priistas pusieron en jaque a los novatos legisladores del Partido Acción Nacional, Mario Riestra y Rafael von Raesfeld.


Lauro Sánchez, Enrique Doger, Víctor Hugo Islas y José Luis Márquez exhibieron la novatez de sus opositores, sumados al convergente José Juan Espinosa.


Con la Declaratoria de Apertura del Primer Periodo Ordinario de Sesiones, la LVIII Legislatura del Congreso del estado, en sesión solemne, inició los trabajos correspondientes al primer año de ejercicio legal.


El diputado del Partido Nueva Alianza (Panal), Héctor Alonso Granados, criticó duramente a la administración Marín. Al subir a la tribuna señaló al secretario de Gobernación como uno de los ejemplos de los políticos de nueva generación.
"Como miembro del Panal y de ‚ÄòCompromiso por Puebla‚Äô decidí hacer uso de la tribuna porque no somos más rehenes del Ejecutivo. No permitiremos el sometimiento de Marín" y pidió una revisión exhaustiva a las cuentas de Marín, para no ser cómplices ni darle impunidad al marinismo.


El sarcasmo de Alonso descompuso el rostro del secretario marinista. Meneses, quien había arribado a la sede legislativa muy saludador, se volvió un témpano del iceberg marinista.


Además, evidenció la molestia en el presidente de la Mesa Directiva, Rafael von Raesfeld.
El blindaje a Marín se había acabado.



Los diputados del PRI aprovecharon la inexperiencia de los diputados de "Compromiso por Puebla".
En especial, amplificaron los titubeos del diputado Von Raesfeld, presidente de la Mesa Directiva, y del coordinador de la bancada parlamentaria del PAN, Mario Riestra Piña, quienes fueron rebasados por los viejos lobos de mar priista. La sombra de Othón Bailleres ronda en la actual legislatura. Otro yerro fue la prohibición de que los comunicadores ingresaran al Salón de Plenos. Pero "el corralito" no funcionó, reporteros y fotógrafos pudieron ingresar al salón de sesiones gracias a la intervención de los diputados Alonso y Espinosa Torres. Ante la negativa de la Mesa Directiva.



Al responder el informe, Rafael von Rasfeld presumió, a pesar de las evidentes diferencias entre los grupos parlamentarios: "la responsabilidad histórica de esta legislatura es dejar atrás las diatribas electorales, y conformar una gran agenda legislativa, que permita transformar las instituciones y materializar la reforma del estado, cuya necesidad es reconocida por todas las fuerzas políticas."


El presidente de la Mesa Directiva criticó la ausencia del gobernador Mario Marín Torres: "si bien es cierto que el titular del Ejecutivo del estado ha otorgado el mínimo cumplimiento indispensable al mandato legal, de presentar el informe del estado que guarda la administración pública del estado, resulta lamentable la ausencia del gobernador Marín en esta sesión inaugural de la quincuagésimo octava legislatura del Congreso del estado."


Von Raesfeld se refirió, al contestar el informe, a lo que será la próxima legislatura: "dotaremos al Congreso del estado de un nuevo marco jurídico interno, habremos de fortalecer los órganos de gobierno, de estudios y administración, el trabajo de las comisiones, la calidad de los debates y el contacto con la sociedad, en un compromiso común de hacer del Poder Legislativo una institución plenamente democrática al servicio de los más elevados intereses de Puebla."


La defensa


Rafael von Raesfeld, en entrevista, defendió su papel: "la labor de la presidencia que presido tiene la responsabilidad de darle facilidad a los diputados. La sesión solemne del día de hoy se presentó conforme a derecho.