El gobernador del estado, Rafael Moreno Valle Rosas, literalmente tuvo que salir por la puerta trasera de la Casa de la Cultura, para no encontrarse con los manifestantes mototaxistas.

El cuerpo de seguridad del mandatario estatal tuvo que implementar una estrategia de último minuto para resguardar la integridad física del Ejecutivo.

En primera instancia cerraron las viejas puertas del recinto ubicado en la 5 oriente a un costado de la Catedral de Puebla, por lo que no dejaban pasar a nadie sino eran identificados por el mismo personal de seguridad.

Posteriormente, mientras Moreno Valle daba su discurso en la entrega de apoyos a madres solteras estudiantes, se pusieron de acuerdo los escoltas para sacarlo seguro.

"Ya llegaron los cabrones, hay que sacarlo por allá" dijo un guarura al señalar la parte trasera del edificio, mientras se escuchaban las bocinas de mototaxis circulando en sentido contrario sobre la 5 oriente.

Una vez que concluyó el discurso, el gobernador se dirigió hacia la entrada principal, pero inmediatamente fue advertido del peligro, por lo que dio media vuelta.

Así, acompañado del secretario de Educación, Luis Maldonado Venegas, se dirigió a la puerta trasera a paso veloz, escoltado en todo momento por sus guardias.

Al salir por la 7 Oriente, agentes viales detuvieron el tránsito normal para que Moreno Valle subiera a su camioneta sano y salvo y emprendiera la huida.