En un maratónico discurso el fundador de Antorcha Campesina, Aquiles Córdova, reprobó el alza en los impuestos, la cruzada contra el hambre que se combate con alimentos “chatarra”, la entrega de “computadoras de tercera” a los mejores promedios y la “mano dura” como manera de resolver los problemas del país.

En su discurso impregnado de ideología, Córdova se dejó llevar por su priismo y explicó así el retorno del PRI: “¿Y por qué está de vuelta el PRI en el poder?, ¿por qué regresó el PRI al poder? No ha de ser por lo bien que trabajó el PAN, ¿o sí? La gente no está tan idiota para quitar a un gobernante bueno y poner a uno corrupto y autoritario, como dicen que son los priistas”.

Sin embargo, el discurso de Córdova Morán también criticó medidas priistas: como el posible aumento al IVA, propuesta que podría ser impulsada por el PRI, y la cruzada contra el hambre.

En el 39 aniversario de la central filopriista, Antorcha Campesina, Córdova cimbró a sus huestes con su encendida oratoria revolucionaria.

El ánimo de Córdova Morán pasó por su llamado a la organización y la toma de conciencia de los pobres de México para responder a los desafíos estructurales: “Si los pobres cobran conciencia de su situación, si se dan cuenta de que el remedio a esta injusticia social está en sus manos y sólo ellos pueden y deben exigir una respuesta eficaz”.

Con un discurso ideológico bosquejó el programa de trabajo de Antorcha Campesina señalando que el problema de pobreza en el país no se resuelve simplemente cambiando a las autoridades o a los partidos políticos.

Córdova subrayó que en su combate político, Antorcha no tiene enemigos personales. “Los males del pueblo no pueden atribuirse a una persona, porque si éste fuera el caso, la solución sería muy sencilla: cambiaríamos una persona mala por una buena, pero ésa no es la solución”.

La otra crítica que realizó el jerarca del antorchismo fue en contra del IVA:

“Lo peor que le puede ocurrir al país es que se implemente el Impuesto al Valor Agregado (IVA) a productos tan necesarios como los medicamentes y los alimentos”.

El dirigente del movimiento antorchista rechazó la medida: “Antorcha, como parte del pueblo pobre, considera que cargarle más impuestos a los pobres sólo agravara la situación económica, lejos de solucionarla”.

Frente al aumento de los impuestos como solución a los problemas del país el ideólogo nacido en Tecomatlán pidió una nueva política redistributiva de la renta nacional, “el gobierno tiene esa facultad porque la constitución se la brinda. Repartir de maneja justa y equitativa la riqueza nacional que todos producimos y que sólo unos cuantos disfrutan es lo que México necesita”.

La otra crítica que realizó Córdova fue a los “golpes de autoridad” como medidas para encarar los problemas del país. Córdova Morán pidió mejorar la justicia social y olvidar las medidas para espantar al pueblo:

“Este país no necesita terror, no necesita golpes de autoridad para espantar al pueblo, este país no requiere mano dura, y esto no es lo que el país necesita, este país lo que necesita es justicia social, que se reparta mejor la renta nacional, la producimos entre todos pero no la disfrutamos entre todos. De lo que se trata es de aliviar la situación de las mayorías, atacar estructuralmente los problemas. No vamos a acabar con la pobreza con cruzadas contra el hambre que van a regalar alimentos chatarra, no vamos a curar la pobreza regalando útiles escolares, o regalando computadoras de tercera clase a los más distinguidos. Así no vamos a combatir la pobreza. La pobreza sólo la vamos a combatir con una política de estado que sea redistributiva. El Estado mexicano tiene las herramientas en las manos porque se las da la Constitución para repartir, crear muchos empleos, elevar los salarios considerablemente, mejor la educación, llevarle la medicina de alta calidad al pueblo para que sea un pueblo sano y productivo, llevarle servicios, para que tenga vivienda, pavimento, agua entubada, luz eléctrica”.

Aquiles Córdova pidió reorientación del gasto: “Eso implica una reorientación del gasto social. Que no se carguen más impuestos sobre el pueblo y que el gasto social se reoriente, que haya una mejor distribución de la riqueza que producimos todos los mexicanos”.

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El dirigente de Antorcha Campesina, Aquiles Córdova Morán, convocó a los “pobres” de México a la organización para cambiar el modelo económico del país: “No se va a lograr ni con gritos, ni con discursos, ni con porras, ni agitando banderitas, ni llenando estadios. Necesitamos que el pueblo cobre conciencia de su situación”.

Córdova Morán dedicó un largo discurso a explicar el sentido de la lucha de Antorcha Campesina. En su extensa alocución el fundador de Antorcha Campesina acusó que las condiciones de desigualdad social se han agravado y las comparó con los años del gobierno de Porfirio Díaz donde existía una grave desigualdad social.

La devoción de los antorchistas a su líder Córdova Morán encendió los ánimos.

Córdova Morán les pidió a los antorchistas que no abandonaran el estadio. Algunos antorchistas que desde las nueve de la mañana habían arribado al mismo dejaban el estadio de los Lobos BUAP. Pero la mayoría de los agremiados permanecían en sus asientos.

La circulación sobre avenida San Claudio quedó cerrada, prácticamente se volvió estacionamiento para los camiones en los que llegaron los antorchistas.

Los accesos a la universidad se volvieron una vendimia. Cientos de vendedores ambulantes se atrincheraron a la entrada de la institución educativa sobre la calzada interna que conduce al estadio de los Lobos BUAP.

En su discurso ideológico, Córdova quiso explicar la lucha antorchista:

“Contra quiénes ha sido la lucha, contra ningún enemigo personal. Antorcha no tiene enemigos personales. Son enemigos ellos de nosotros, no nosotros de ellos. Sabemos bien que los males que padece el pueblo no pueden ser atribuidos a una persona, ni siquiera al presidente de la República que tiene mucho poder, mucho dinero y el monopolio de la fuerza armada, pero ni siquiera él debe ser responsabilizado de los males del país. El problema sería muy sencillo, cambiar a una persona mala por una buena, y asunto arreglado, pero todos sabemos que hemos cambiado, cambiado y cambiado. Pero México sigue con los mismos problemas de siempre. El problema no es de carácter personal sino de carácter estructural, es la concepción que se tiene de la economía, de la función que debe jugar el aparato productivo de la nación, de los resultados que se tienen que dar en su correcta distribución entre la población”.

Córdova pidió cambiar el modelo económico: “Es este modelo económico injusto y obsoleto el verdadero culpable de los males del país. No se trata de cambiar a una persona por otra. Ni siquiera de un partido por otro, ya cambiamos a un partido por otro. Y qué pasó, con el PAN nos fue peor. Mucho peor.

”Ahora preguntemos porqué está de vuelta el PRI, no ha de ser por lo bien que trabajó el PAN, la gente no es idiota para quitar a un gobernante bueno y poner a uno corrupto y autoritario, como dicen que son los priistas, porque la vida le demostró que se había equivocado. El pueblo mexicano, que es sabio, rectifica y vuelve a elegir al PRI. El problema tampoco es cambiar de partido. El problema es cambiar la concepción de país. Qué modo de producción y sobre todo, el modo de distribuir esa riqueza social.”
El fundador de Antorcha Campesina planteó que la pobreza en México se maquilla:

“Contra quién es la lucha de Antorcha, no es contra hombres, no es contra partidos, es contra el modelo económico. Nuestra lucha es contra la pobreza. Y puesto que la pobreza tiene orígenes estructurales. La estructura injusta de la economía nacional y esto es que lo que plantea Antorcha hay que cambiar el modelo económico. Este modelo económico ha fracasado. En México hay cuando menos 80 millones de pobres. El gobierno con su arte refinado, con un verdadero arte de mentir, a lo que más se atreve a decir es que son 53 millones. Aceptemos por el momento que son 52 millones, ¿cuánto es 52 millones? Nos daremos cuenta de la magnitud del problema. Son 80 o 85 millones de pobres. El gobierno tienen sus propios métodos para medir la pobreza”.

Se placean los aspirantes
En acto antorchista se “placearon” los tres aspirantes a la candidatura a la alcaldía por el PRI, Enrique Agüera Ibáñez, rector de la UAP; el exalcalde y exrector de la UAP, Enrique Doger Guerrero y el empresario Pepe Chedraui.

Sentados en el presídium, junto a la cúpula de la dirigencia de la agrupación Antorcha Campesina, los aspirantes siguieron las palabras de la jerarquía antorchista.

En su presentación, el dirigente y fundador de Antorcha Campesina, Aquiles Córdova Morán, fue proverbial con el rector de la Universidad Autónoma de Puebla.

Lo presentó con deferencia.

Sentados bajo el sol, los aspirantes a la alcaldía y la cúpula antorchista siguieron el discurso de Aquiles Córdova.

La filípica de Córdova inició pidiéndoles a los antorchistas que se quedaran en el estadio, realizó un recorrido histórico e ideológico y culminó pidiendo que no se aumenten los impuestos ni se combata el hambre con alimentos “chatarra”.

El líder antorchista exigió un nuevo mecanismo redistributivo señalando que el problema del país no está en el cambio de partidos o de presidentes, sino en la transformación del modelo económico.

“Alguien tiene que explicarle al pueblo la causa de su pobreza y los mostrarle que el remedio no es otro más que la organización para que luche por lo que es suyo”, subrayó el líder Córdova Morán en un discurso que pareció condensar todas las lecturas y bravatas del ingeniero de Chapingo.

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El festejo por los 39 años de Antorcha inició a las 11 y terminó a las 14 horas. Además de los mensajes políticos, la Compañía Nacional de Música, Baile y Teatro de Antorcha presentó “Carnaval de Brasil” y “Carnaval de Sinaloa”.

Durante su turno al micrófono, el líder de Antorcha en Puebla, Juan Manuel Celis Aguirre, afirmó que ciudad de Puebla es —citó datos de Conejal— la que más pobres agrupa a nivel nacional.

Encarrerado, Celis afirmó que “es una vergüenza para quienes han gobernado la capital y la clase empresarial que la dirige”. En los primeros asientos se hallaba un exalcalde de Puebla, el diputado, Enrique Doger Guerrero.

Al final, el evento político-cultural estuvo amenizado por la Consentida Banda Margarita de Tecomatlán y el grupo K-Paz de la Sierra.