El analista de medios y periodista Jenaro Villamil diseccionó el estado de la mediósfera. Con la reforma constitucional, que incluye el concepto de publicidad integrada, “se va a cerrar ese mercado, por eso están tan molestas las televisoras”.

Además, a la pregunta sobre el modelo de promoción de Rafael Moreno Valle, Jenaro Villamil señaló que copia el esquema de Enrique Peña Nieto: “Más bien es una adaptación del modelo Peña Nieto al esquema estatal de Puebla. Yo publiqué un reportaje, lo más fuerte no fueron los gastos con Televisa, sino también con TV Azteca, (con) las dos televisoras, pues aprendió el caminito”.

Villamil añadió que los políticos se endeudan con las televisoras, adquiriendo una serie de compromisos al buscar dicho modelo de promoción: “Como necesitas pagar más, te vas a endeudar conmigo. Es lo que le pasa a la mayoría de los políticos.

”Esas deudas hacen que ellos tengan compromisos.”

Además, Villamil señaló que los gobiernos estatales se endeudan varios años con el pretexto de la filantropía de Teletón: “Es un mecanismo de posición en cadena nacional bajo el pretexto de la filantropía. Pero el caso de los teletones es mucho más grave porque no hay transparencia ni rendición de cuentas. Lo que destinan los gobiernos de los estados en la construcción de los CRIT, de repente uno vale 400 millones de pesos y otros 200 millones de pesos. Luego se van prorrogando anualmente a 10 años. Hay administraciones que endeudan a los estados con el esquema Teletón”.

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Villamil consideró que el modelo Televisa con el que se experimentó para crear la imagen de Enrique Peña Nieto y con el que posteriormente ganara la Presidencia de la República se replica en los estados del país.

Para el caso de Puebla, Jenaro Villamil afirmó que la experiencia de las televisoras se quiere repetir en políticos como Rafael Moreno Valle.

Al haber demostrado sus resultados, las televisoras lo aplican en los estados.

El analista de medios auguró que las televisoras se han constituido en productoras de imágenes de los políticos, en aras de sus beneficios electorales.

Villamil afirmó que la televisora se ocupa en volver adictos a la imagen a los políticos, generando la impresión de que vuelve a hacerlos ganadores de procesos electorales.

Los estudiantes de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales siguieron las explicaciones de Villamil sobre el poder de las televisoras en la esfera política. Hasta en los pasillos del auditorio José María Morelos y Pavón se sentaron los estudiantes. En diversos momentos de su exposición, cuando ironizaba sobre los medios de comunicación, los estudiantes soltaron carcajadas.

El moderador de la mesa, al dirigirse al analista de medios lo llamaba “maestro”, con cierta solemnidad, de la que Villamil intentó despojarse cuando a pregunta expresa dijo que sin la participación de los ciudadanos interviniendo la discusión de los mismos, la reforma a las telecomunicaciones “vale madre”. Villamil demandó que las audiencias deben exigir contenidos más críticos.

El periodista respondió a los cuestionamientos sobre el papel de las televisoras para crear percepción.

Además, Villamil afirmó que otro mecanismo con que la cadena de televisión presiona a los políticos de los estados es a través de instituciones como el Teletón, porque no hay transparencia.

Los consumidores tiene derecho a mejores servicios de televisión: "El derecho de los consumidores a tener un triple play decente; y un acceso mucho mejor a la programación de televisión por cable.”

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Villamil exigió que las televisoras presenten mejores contenidos porque su programación es deficiente: “Si no defiendes la diversidad de contenidos, no estás defendiendo la opinión pública plural en beneficio de la audiencia”.

El analista de medios afirmó que debería existir un defensor de audiencia.

A una pregunta sobre la situación que vivió la periodista Carmen Aristegui con la cadena de comunicación MVS, el analista afirmó que hay otros elementos más allá del contrato tradicional medios y audiencias. Eso es lo que va incorporar la reforma constitucional, si van a incorporar esos cambios al Senado.

Para Jenaro Villamil, luego de las elecciones del 2006, cuando se presentó a uno de los candidatos a la Presidencia de la República como un “peligro para México”, el periodista externó que la reforma a la ley electoral incluye una “trampa” que los mismos legisladores incluyeron.

El analista de medios consideró positivo que el Senado, en una nueva reforma, tal y como lo está haciendo, prohíba la publicidad integrada, es decir, no sólo en épocas de campaña y no sólo en términos electorales, sino en términos de comunicación política: “Más que estar de más, es el complemento que a la reforma del 2007 le hizo falta”.

En las circunstancias que vive el país, apremió a que el IFE recupere su papel de defensor del voto ciudadano, porque el IFE no puede ser un regulador de medios.

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Durante el momento de las preguntas y respuestas, Jenaro Villamil planteó que el principal valor de un periodista y de un medio de comunicación es la credibilidad y no el rating.

Lo más importante de cualquier medio y trabajador de los medios de comunicación no es un rating, es importante que tenga mucha audiencia.

Joaquín López Dóriga tiene el rating más alto, pero el valor de la credibilidad no está asociado a la visibilidad.

El valor más importante es la credibilidad. Y se puede acabar así de rápido. Y tu audiencia no te cree.

Otro punto que abordó el analista de los medios de comunicación es que los ciudadanos se conviertan en audiencias críticas que exijan tanto mejores contenidos y revisen de manera crítica los noticiarios de la televisión y la radio: “El que ve a Chabelo los domingos está cabrón. Hay que estar monitoreando.”

Para el analista de los medios de comunicación, el zapping es la principal actividad de relación con las audiencias con los medios.

Al finalizar su exposición, los grouppies del analista de medios Villamil se acercaron para pedirle autógrafos.

“Peña Nieto fue el experimento de Televisa”, sentenció el analista de la esfera mediática.

Ante un auditorio repleto, el periodista afirmó que las televisoras se han vuelto “un sistema de extorsión” que lo mismo acuden con “el gobernador de puebla o con el alcalde”, al que se le otorgan diversos recursos públicos, entre otros, la construcción de instalaciones de Teletón, sin un tabulador de costos, entregando estos recursos por varios años a esta fundación.

El analista afirmó que las televisoras aprovechan la ambición de los políticos por salir en los medios: “La entrevista con Adela Micha cuesta 10 millones de pesos”.

Jenaro Villamil habló sobre la información de los cobros que las televisoras hacen a los políticos. “La principal dificultad fue cómo uno siendo reportero y trabajando en medios hizo pública esta información, porque se dice que 'perro no come carne de perro'. ¡Cómo te atreves a estar mordiendo el negocio de los medios!, me dijeron. Quizás no de todos, pero sí de una buena parte de ellos”.

Pero Villamil acotó que los cobros discrecionales que realizan las televisoras para posicionar a los políticos “no es un problema de los medios, sino de una buena parte del presupuesto, del dinero público que se dedica a los medios”.

Las preguntas le llovieron a Villamil. “Desconozco el contexto poblano, no sé cuántos candidatos jóvenes haya en Puebla”.

La juventud no es sólo un asunto cronológico para que queremos jóvenes políticos, si van a pensar como Tiranosaurios rex, como bebesaurios, es una nueva generación de dinosaurios, son jóvenes con prácticas anacrónicas.

A destacar
“Los políticos no saben interactuar de manera real, y de manera simulada difícilmente van a poder incidir. Por eso es el contraste entre la cobertura que le dan las televisoras a Peña Nieto y las palizas que le dan en Twitter. Esas cosas tan sarcásticas y burlas son las cosas que te dejan las redes sociales. Lo importante es crear audiencias y redes de identificación, de intereses comunes, de agendas mediáticas, de causas y de información que, si nos van a trollear o si nos van a ofender, es parte del show en las redes sociales. Tampoco hay que idealizarlas”, dijo Jenaro Villamil.

“Las redes sociales no cambian sistemas políticos. De nada sirve que estemos todo el día tuiteando, si no participamos. Hay mucho del tono adolescente en las redes sociales, hay mucho de desplante: las redes son una mediatización de la opinión y de la participación. Lo ideal es incidir en las dos cosas”, refirió el periodista y analista de medios.