Ante cerca de 300 representantes de las iglesias y organizaciones cristianas, el líder del movimiento afirmó que Agüera Ibáñez es un hombre que ha decidido usar a favor de la sociedad los dones que Dios le dio y que usó en la universidad para transformarla, y ahora los necesitará para lograr que Puebla sea una mejor ciudad: “Eso nos gustó, que sea un hombre que viene a una lucha contra los poderes fácticos, contra los grandes intereses que han dominado a Puebla (…) aquí hay líderes que son bujías potenciales para poder mover a una ciudad a mejores destinos sublimes”.
Al hacer uso de la palabra e indicar que es creyente y mantiene el respeto a las distintas manera de pensamiento del ser humano, el candidato del PRI-PVEM enfatizó que el próximo gobierno municipal debe velar por buscar el equilibrio social y modernizar a Puebla, sin ignorar que hay muchas personas que lo que piden es comer.
Agüera Ibáñez señaló: “Hay que apostar por el equilibrio, implica, sí, construir una Puebla moderna, apostar por el turismo, la educación, el clúster de la salud, porque el Centro Histórico sea un espacio más digno y seguro, por infraestructura vial que resuelva y no dé más problemas, y por proyectos que transformen la vida de las personas.”
”No son tiempos de inventar, son tiempos de servir al ser humano y de que el dinero público sirva para que esos 700 mil pobres contabilizados por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) salgan de la pobreza, para que se dé prioridad a la inversión de los empresarios poblanos.”
El candidato llamó a ser congruentes con la manera de pensar y actuar para apoyar a quienes menos tienen: “Si es cierto que tenemos corazón, que hacemos caso a la palabra de Dios y amamos al prójimo, entonces el próximo gobierno municipal debe ser entregado justamente a amar al prójimo, a velar por el equilibrio, porque un gobierno que no es capaz de sentir, de llenarse los zapatos de tierra, ni de acercarse sin duda, no va a poder cambias las cosas ni mejorarlas para todos”.
Enrique Agüera insistió: “¿Cómo resolver la inseguridad cuando hay más de 700 mil pobres, y de ellos hay casi 105 mil personas viviendo en pobreza extrema, esa pobreza donde no hay calles, alumbrado, agua, alcantarillado, no hay seguridad, trabajo, ni oportunidades, lo que deriva en descomposición social?”
Dijo que en su recorrido ha visto cómo las personas que viven en la extrema pobreza han adaptado su organismo para comer un día sí y otro no, lo cual es una vergüenza para la sociedad, es algo que espanta y lastima a todos los que aman a Puebla.
Advirtió que a esta gente en condiciones de extrema pobreza no se vale que les hablen siempre de lo mismo, cuando lo que quieren es comer.
“Yo creo en una ciudad diferente, porque en lo primero que hay que pensar es en sus habitantes, tenemos que construir pensando en el ser humano, por eso con profunda vocación estoy recorriendo la ciudad”, abundó.
El candidato de la coalición 5 de Mayo expresó que hay situaciones que requieren de una atención urgente por parte de las autoridades, ya que las cifras oficiales revelan que uno de los mayores índices de inseguridad que hay en la capital se ubica en el Centro Histórico, que es patrimonio histórico de la humanidad.
Señaló que este sitio lleno de riqueza cultural y arquitectónica necesita no sólo atención en sus inmuebles, sino que quienes lo visiten se sientan seguros de transitar por sus calles, e indicó que ninguna obra o proyecto vale la pena si no va encaminado a que el principal beneficiado sea el ser humano.
Manifestó que para el Centro Histórico se habrá de atender lo referente a la infraestructura que se necesita, con estacionamientos suficientes y adecuados para que la gente pueda llegar.
Enrique Agüera expresó que la infraestructura que se construya debe ser para que se resuelvan los problemas, no para que los complique, que haya el verdadero beneficio para la sociedad.
El exrector de la máxima casa de estudios del estado precisó ante los asistentes al desayuno que no son los tiempos de inventar, sino de servir a los ciudadanos, de hacer las cosas para que haya una ciudad diferente.
Dijo que en su propuesta de gobierno van tres ejes para trabajar con el respeto que se necesita al ser humano, con solidaridad, generosidad y calidez, que la persona se sienta tratada de una manera digna cuando pasa por una calle o acude a una oficina de gobierno.
Reiteró que hay que cambiarle el rostro a Puebla, que esté llena de parques y jardines, que se caracterice por la seguridad y ese desarrollo integral donde se podrán atender a quienes menos tienen.
Sostuvo que cuenta con la experiencia y capacidad para cambiar, y esto ha quedado demostrado durante el tiempo en el que fue rector de la universidad, y entre sus logros está el cambio del Hospital Universitario, que estaba en el abandono, con colchones a los que se les salían los resortes y representaban un riesgo para los pacientes.
Advirtió que gracias a ese hospital muchos pobres se han salvado de morir por falta de atención médica, pues de no ser por la institución, nadie los atendería.