El exdelegado del Centro INAH Puebla, José Miguel Rivas García, investigado por el mismo organismo federal por haber entregado permisos para la construcción del teleférico sin estar debidamente sustentados, ahora trabaja para el gobierno de Puebla.

Desde hace poco más de un mes, Rivas García fue nombrado como director general de Tenencia de la Tierra, como se comprueba en la página de Transparencia de la administración estatal.

Este lunes, Intolerancia Diario reveló que el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) inició un proceso judicial contra su exdelegado en Puebla, José Francisco Miguel Rivas García, por haber entregado permisos para la construcción del teleférico sin estar debidamente sustentados.

Así lo revela el acta de la reunión de la cuarta sesión ordinaria del Consejo de Monumentos Históricos Inmuebles 2013, en poder de Intolerancia Diario.

El acta fue entregada a este medio mediante un resolutivo del Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI), debido a que el INAH se negó al haber reservado cualquier dato del teleférico durante dos años.

De este modo, por primera vez la institución encargada de resguardar monumentos históricos reconoció la existencia de dos permisos para realizar el teleférico, aunque con diversas irregularidades.

El premio
El ahora director de Tenencia de la Tierra, José Miguel Rivas García, estuvo al frente de la delegación del INAH en Puebla ocho meses, gestión calificada por diversos medios de comunicación como de una actuación polémica, sobre todo por la entrega de permisos y acercamiento al gobierno de Rafael Moreno Valle.

Inclusive, al delegado se le veía constantemente en eventos del gobierno estatal, situación que ahora no se repite con el actual encargado del Centro INAH Puebla, Francisco Ortiz Pedraza.

En febrero de 2013 se informó de la salida de Rivas García; semanas antes el Comité de Defensa del Patrimonio Histórico, Cultural y Ambiental de Puebla dio a conocer que el INAH admitió oficialmente que no contaba con un estudio sobre la ruta del teleférico.

Anteriormente, el ahora exdelegado aseguró a medios de comunicación que existía un documento sobre el derrotero que justificaba su construcción en la antigua Casa del Torno.

El comité solicitó el 3 de enero al INAH una copia digitalizada del estudio dictaminado que determinó que el recorrido del teleférico en Puebla no perjudica monumentos históricos ni causa impacto en el paisaje.

La titular de la Unidad de Enlace del INAH, María del Perpetuo Socorro Villarreal Escárrega, respondió: “Sobre el particular me permito informarle que mediante oficios números 401A311(7247) 03238 y 40.E(24)137.2013/0019, la Delegación Estatal del INAH en Puebla y la Coordinación Nacional de Monumentos Históricos manifestaron que una vez realizada una búsqueda exhaustiva en sus archivos no existe la documentación requerida, toda vez que no se ha emitido ‘estudio’ alguno que determine que el recorrido del teleférico en Puebla no perjudica monumentos históricos ni causa impacto en el paisaje”.

Por lo mismo, la actuación de José Miguel Rivas no sólo fue criticada por especialistas, académicos y asociaciones civiles, sino también por los propios sindicalizados de la delegación.

Todos lo acusaron en más de una ocasión de no defender el patrimonio histórico del estado, como fue en la restauración del Fuerte de Guadalupe y la destrucción de la Casa del Torno, por lo que emprendieron una lucha para buscar su sustitución, la que lograrían finalmente. 

Rivas García fue considerado un gran aliado del gobierno estatal para la recuperación de diversas imágenes urbanas de municipios en el segundo año de gestión de Rafael Moreno Valle.

El último evento al que acudió Rivas García como delegado del INAH fue el 14 de febrero, cuando acompañó al gobernador y al secretario Antonio Gali Fayad a la puesta en marcha de la recuperación de la imagen urbana del municipio de Atlixco.

En entrevista en dicho acto protocolario, insistió que el caso del teleférico estaba en manos del INAH nacional y que sería a finales de febrero cuando se definiría el futuro de dicha obra.

En enero de este año se le cuestionó a José Miguel Rivas si temía ser sancionado por la administración de Enrique Peña Nieto al haber autorizado los trabajos para la edificación del teleférico, a lo que respondió que no, pues aseguró que las obras siempre fueron estudiadas.

“Todas las obras fueron estudiadas y ahora es el Comité Defensor del Patrimonio Histórico, Cultural y Ambiental de Puebla quien estudia el caso. Lo único que te puedo decir es que nunca se hizo nada erróneo”, fue una de sus últimas declaraciones como delegado.

Los permisos
El acta de la reunión de la cuarta sesión ordinaria del Consejo de Monumentos Históricos Inmuebles 2013, reveló que durante la reunión del 13 de marzo de 2013 del Consejo Nacional de Monumentos e Inmuebles Históricos, el entonces director general del INAH, Raúl Sergio Arroyo, informó de la situación del teleférico.

Comentó específicamente la existencia de un documento que autorizaba el proyecto del teleférico, con fecha 7 de noviembre del 2012, fecha en que ya habían iniciado los trabajos semanas antes y hasta comenzado la demolición del inmueble histórico la Casa del Torno.

En el acta, el entonces dirigente nacional del INAH informó a los integrantes del consejo que se han iniciado procesos jurídicos, uno en contra del exdelegado del Centro INAH Puebla, y otro para revertir los permisos:

“Enseguida el director general del Instituto comentó a los integrantes del Consejo la situación legal del teleférico de la ciudad de Puebla y para ello señaló que el anterior delegado del Centro INAH Puebla expidió al gobierno del estado de Puebla dos documentos, particularmente el de fecha 07 de noviembre de 2012 en donde otorgó una autorización para la realización del proyecto.

”Ante esta situación el Instituto actuará legalmente para demandar por la vía judicial la nulidad del autorización, también ejercitará acción legal en contra del ex delegado del Centro INAH Puebla y solicitó al gobierno del estado de Puebla la restitución del inmueble histórico que fue demolido en el cual están impedidos para realizar obra alguna.

”En resumen el director general del Instituto expuso que, ante esta situación agotarán los recursos dentro de una controversia legal para dejar sin efectos la autorización otorgada por el ex delegado del Centro INAH Puebla”, señala textualmente el documento.