El tercer informe de gobierno de Rafael Moreno Valle —emanado de una coalición multipartidista— se configuró como su plataforma de proselitismo personal ante los 21 gobernadores del país, dirigentes nacionales de partidos políticos y líderes del Senado y del Congreso federal.

Si en los días previos en medios electrónicos nacionales se había promovido la imagen de Moreno Valle, el día del informe —primero en el Congreso local y luego en un mensaje ante gobernadores en el Auditorio de la Reforma— los reflectores fueron para el gobernante y continúo el despliegue publicitario en medios nacionales. 

En el acto de rendición de cuentas no se profundizó en los temas locales ni se dieron explicaciones sobre temas polémicos como la cuestionada autonomía de los órganos electorales y de transparencia; ni el crecimiento de la pobreza en Puebla de acuerdo con las cifras del Coneval. Tampoco se abordó la elección local de 2010, proceso electoral que fue impugnado por la coalición 5 de Mayo (PRI-PVEM).

Moreno Valle destinó su informe a exaltar las cifras y los indicadores favorables en su administración. Pero mientras en el Congreso local la “tibieza” de los diputados evitó una postura analítica sobre las acciones de gobierno y su impacto en la sociedad, en el Auditorio de la Reforma Moreno Valle desglosó con gráficas publicitarias sus cifras.

El informe se dirigió a los gobernadores de los estados. En tanto, en San Pedro Cholula, en la autopista a Atlixco y en San Martín Texmelucan, diversos grupos realizaron —por separado— actos de protesta en contra de la administración estatal.

Por primera vez en varios sexenios, la logística de la administración estatal vetó la presencia de fotógrafos y camarógrafos de medios locales en el Auditorio de la Reforma, donde se desarrolló el informe.

La medida impidió que los fotógrafos ingresaran al inmueble donde se desarrollaba el informe de gobierno, a pesar de tratarse de un acto pagado con recursos públicos y de que se les había informado a los fotoreporteros que el acceso al auditorio sería por “goteo”.

En el zócalo de la ciudad, grupos sociales como la Asamblea Social del Agua, el Comité Democrático Magisterial Poblano, Tetela Hacia el Futuro, el Congreso Progresista, Consejo Democrático Magisterial Poblano y Unión Nacional de Organizaciones Regionales Campesina, entre otras, realizaron un “contrainforme” de gobierno.

Lo que se quedó fuera del informe
Ni en el acto republicano realizado en el Congreso local ni el mensaje del Auditorio de la Reforma se abordaron los temas polémicos para la administración estatal. No hubo una explicación sobre los cambios en el gabinete estatal o del por qué únicamente permanecen en sus cargos cuatro titulares de las dependencias mientras que en 11 secretarías estatales se han dado 23 cambios de los titulares.

Cuando Moreno Valle abordó el tema de la pobreza en Puebla lo hizo de manera indirecta. El gobernador, que al inicio de su campaña electoral rumbo a la gubernatura en 2010, desde el municipio de Eloxochitlán, uno de los más pobres del país, prometió revertir la pobreza, achacó a la dispersión poblacional la dificultad para abatir este rezago.

La postura morenovallista fue más clara en el Congreso del estado, donde las fracciones parlamentarias aliadas al morenovallismo —PAN, PSI, PRD y Compromiso por Puebla— acusaron al PRI de haber generado la pobreza y el rezago en el estado de Puebla. 

En su informe, Moreno Valle tampoco explicó la opacidad que priva en los sujetos obligados estatales. El gobernador, a pesar de los 40 minutos de discurso en el Auditorio de la Reforma, tampoco abordó el problema de la autonomía de los organismos electorales y de transparencia.

A pesar de que el año pasado se realizó una elección que renovó al Congreso y a 217 presidencias municipales, no hubo ninguna mención al cuestionado proceso electoral ni a los órganos jurisdiccionales cuyas resoluciones fueron revertidas en varias ocasiones por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.

El más notable “revés” a las decisiones de los órganos estatales fue la distribución de las curules plurinominales. En su informe tampoco informó sobre los gastos del Poder Ejecutivo en materia de promoción del gobernador. Promoción que ha recibido cuestionamientos de organismos de transparencia como Artículo 19, por destinar recursos públicos millonarios a promover su imagen personal.

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En el Auditorio de la Reforma, Moreno Valle, en lugar de mencionar a los diputados de Puebla, se concentró en las figuras nacionales: diputados, senadores, dirigentes partidistas y gobernadores de todo el país que acudieron a su informe, a quienes trató con deferencia

Y al inicio de su informe resaltó su nombramiento como presidente de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), cargo que ocupará hasta agosto de este año, cuando se designe a un nuevo presidente del organismo de gobernadores.

El gobernador de Puebla recordó de manera especial a su abuelo, el exgobernador Rafael Moreno Valle: “El 1 de febrero de 1969, en este mismo recinto rindió protesta como gobernador de Puebla mi abuelo, el general Rafael Moreno Valle, que nos honra con su presencia. Por ello, inspirado en el legado de las generaciones que nos antecedieron, he trabajado por el bienestar de los poblanos y el desarrollo del estado”.

Informe de trienio
Moreno Valle aprovechó su tercer informe de gobierno para realizar lo que llamó un recuento de las acciones de los primeros tres años de su gobierno.

Del último año de gobierno, destacó algunas acciones como la construcción de 20 Centros Integradores de Servicios, y en el tema de salud resaltó la construcción del Hospital de la Mujer en Tehuacán y los hospitales generales de Teziutlán, Cholula y Acatlán,así como la realización del Tianguis Turístico 2013.

Mientras en el Congreso los halagos de las fracciones parlamentarias estremecieron la sede legislativa, la legisladora del PRI Silvia Tanús Osorio intentó una crítica a la administración estatal, la más clara durante el acto: “Lo decimos en voz alta: ninguna obra, por grande que sea su tamaño, será sinónimo de progreso, si no se traduce en el mejoramiento del nivel de vida de la gente. Aun así, en esta mitad de trayecto, el río puede reencauzarse. El desarrollo puede ser integral en todos los rincones del estado, si se erradica la idea de que la pobreza, se combate con dádivas y subsidios”.

Al contrario de los partidos políticos que enviaron sus dirigentes nacionales, Gustavo Madero, del PAN; Jesús Zambrano, del PRD; el “profe” Alberto Anaya, del Partido del Trabajo, y Jaime Obregón, del Panal, el PRI envió como representante al presidente del Icadep, Guillermo Deloya Cobián. Apenas había iniciado su informe el gobernante, cuando el presidente del Icadep a nivel nacional abandonó el recinto. 

En el acto de rendición de cuentas, Moreno Valle reconoció a sus aliados políticos saludando al líder del SNTE, Juan Díaz de la Torre.