En ese contexto, el representante del magisterio disidente del estado de Puebla reveló que después de tres años pueden llegar a la conclusión y la evaluación de que no ha cumplido: “Por eso podemos pedirle que se vaya, ya se tardó en tomar esa decisión”. Lo anterior, durante las ponencias que presentaron en el zócalo capitalino.
Guerra Castillo reveló que el sentido del evento para evaluar el tercer informe del gobernador del estado de Puebla fue presentar la postura crítica de la clase trabajadora y de las organizaciones sociales ante un gobierno ineficiente que se presenta como triunfalista: “El punto más crítico que encontramos en el rubro educativo es que Puebla se ubica en el sexto lugar en rezago educativo, según cifras nacionales”.
En el sector educativo, apuntó Miguel Guerra Castillo, prevalece un gran retraso, incluso existen cifras “maquilladas” que no dicen la realidad; por ejemplo, aseguró que el porcentaje de computadoras del que tanto se hace alarde es un mínimo para los miles de estudiantes de todos los niveles.
“Presenta cifras engañosas, 48 mil computadoras en un universo de un millón 800 mil estudiantes es mínimo, es casi insignificante, por lo que el gobernador cubre y tergiversa la realidad, por eso el juicio es reprobatorio”.
En términos generales, reveló que todas las organizaciones sociales que critican al mandatario poblano tienen en la percepción de que es un individuo prepotente con una actitud oportunista y que habla de obras de gobierno faraónicas, hasta la estrella de Puebla: “También es cerrado e intransigente, permanentemente le cierra las puertas a los profesores”. Por lo que se respaldan en las innumerables marchas de reclamo.
El líder del movimiento disidente del magisterio poblano aseguró que seguirán en la lucha a pesar de la represión, por eso aclaró que el pasado 15 de enero, día del tercer informe del mandatario poblano, no se movilizaron rumbo al Auditorio de la Reforma por el clima de represión y de amenazas con que trata a los trabajadores, quienes se sienten inhibidos ante esas actitudes.
Ante la pregunta de qué esperan para el futuro, el vocero del CDMP dijo: “Si fuéramos un tanto idealistas, esperamos que se vaya, pero como eso no va a ser posible esperamos una reacción de la clase trabajadora y obligarle a corregir las grandes fallas y grandes problemas sociales que se denuncian permanentemente. Esperamos un cambio en la administración, pero confiamos más en nuestra propia lucha”.
Cabe mencionar que en el congreso progresista del pasado miércoles en el zócalo capitalino estuvieron presentes las dos secciones de trabajadores de la educación, además de los integrantes de la asociación en defensa del agua, los abogados, el movimiento por la alternativa social, la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, los telefonistas, los movimientos independientes de obreros y campesinos, además de las asociaciones de colonos de Puebla.