A pesar de la catarata de cifras, de las preguntas de a pechito, sin la vehemencia de la sesión del jueves, la bancada priista cuestionó las obras faraónicas y la falta de transparencia en el ejercicio presupuestal dado a conocer por la Auditoría Superior de la federación (ASF).

Los secretarios defendieron sus cifras. Hicieron el elogio de los números, respondieron algunos cuestionamientos y otros los dejaron en el aire.

De nada sirvió el blindaje aprobado por las fracciones y representaciones parlamentarias los cuestionamientos continuaron.

En el segundo día de comparecencias en el pleno legislativo, acudieron los secretarios de Infraestructura, Transportes, Salud y el director del Comité Administrador Poblano para la Construcción de Espacios Educativos, José Cabalán Macari Álvaro, Bernardo Huerta Couttolenc, Roberto Rivero Trewartha y Daniel Corona.

Dos PRI se mostraron en el Congreso.

El diputado cetemista Leobardo Soto Martínez pasó de la crítica al apapacho de los funcionarios.

Soto Martínez se sumó al optimismo gubernamental: “Por eso digo que debemos felicitarnos todos: gobierno del estado ayuntamientos, legisladores locales, legisladores federales”.

La cercanía de la CTM con la administración estatal —que el mismo Soto ha presumido— le evitaron hacer algún cuestionamiento al subir a tribuna. Los trabajadores de la central que dirige Soto trabajan en las obras de infraestructura de la automotriz alemana Audi.

Pero mientras Soto Martínez se sintió partícipe de las inversiones de Audi, el diputado del tricolor Sergio Céspedes acusó al gobierno estatal de olvidar a los indígenas y a los pobres despilfarrando recursos en obras faraónicas:

“El número de pobres ha aumentado de manera considerable. Nuestros indígenas han sido olvidados. Esta administración se ha olvidado de este sector vulnerable, para focalizar esfuerzos en un cúmulo de obras faraónicas”.


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El diputado priista Sergio Salomón Céspedes insistió en la línea crítica manejada por el PRI.

“Tenemos que reconocer que la información compartida el día de ayer sobre el gasto de la administración estatal de estos últimos tres años es aún mayor. La cifra oficial reconocida por el titular del ramo es ligeramente superior a los 200 mil millones de pesos.

”Es entonces de llamar la atención primero que, ante ese cuantioso volumen, la secretaría a su cargo sólo haya invertido 9 mil 191 millones en obras de infraestructura y más aún, que el .30 por ciento se haya aplicado a infraestructura social básica, donde los indicadores de marginación indican que en agua potable y drenaje estamos lejos de la cobertura total en el estado”.

El diputado tricolor planteó: “Nos preocupa que persista la lógica presupuestal de gasto, en donde la constante es el enfoque de destinar menos recursos a zonas de mayor pobreza. Los sectores más desprotegidos continúan desatendidos y se perpetúan las condiciones de marginación y pobreza en la entidad”.

Céspedes señaló que en tres años de gobierno estatal se han destinado 377 millones para 94 obras en materia de agua potable, lo que representan una cobertura de 83.84 por ciento en el servicio de agua potable entubada.

Sin embargo, Céspedes cuestionó que uno de cada cinco poblanos carece de acceso al líquido vital, y 15 por ciento de la población tampoco dispone de alcantarillado.

“Quizá ustedes están convencidos que modernizar a Puebla es destinar 8 mil millones de pesos para obras suntuarias o faraónicas. Modernizar también significa invertir en banquetas y guarniciones, en pavimentación para las colonias, agua potable y drenaje.

”Esta reflexión, nos obliga a preguntarles, ¿bajo qué criterios se asignan los recursos presupuestales señores secretarios? ¿Son esos los criterios que favorecen la reducción de la marginación y la desigualdad? Nosotros pensamos que no.

”¿Acaso no son suficientes más de 200 mil millones de pesos para lograr la igualdad en condiciones de vida de los poblanos?”

En su segunda participación Céspedes conservó los cuestionamientos:

“La Secretaría de Infraestructura es la segunda dependencia estatal con mayor presupuesto. Por ello el uso de los recursos públicos debería ejecutarse bajo los preceptos fundamentales de la transparencia y la rendición de cuentas. El presupuesto histórico con el que ha contado esta administración no se ha visto reflejado en la disminución de la pobreza. Al contrario, el número de pobres ha aumentado de manera considerable”.

El representante popular del distrito de Tepeaca evidenció a la administración estatal con sus cuestionamientos: “Nuestros indígenas han sido olvidados. Esta administración se ha olvidado de este sector vulnerable, para focalizar esfuerzos en un cúmulo de obras faraónicas, con una gran inversión, dejando a un lado la obra prioritaria, y abandonando a los que menos tienen.

”En el informe que rinde a esta soberanía la Secretaría de Infraestructura se resaltan ciertos reconocimientos y avances en materia de transparencia, sin embargo, la ciudadanía no lo percibe de esa manera. El presupuesto se debe administrar de manera eficiente y eficaz, transparentando en todo momento su manejo y la rendición de cuentas”.

El diputado Céspedes le recordó al secretario de Infraestructura Cabalán Macari los costos onerosos en las mega obras estatales:
“La opinión pública ha cuestionado a la Secretaría de Infraestructura sobre los costos de las obras realizadas, así como de los procesos de licitación de las mismas. Por otra parte, la Auditoría Superior de la Federación ha concluido que obras como la construcción del lago de la Concordia, la construcción del viaducto bulevar Capitán Carlos Camacho y la construcción de vialidades del CIS se han adjudicado directamente sin un dictamen de excepción a licitación, es decir, sin llevar a cabo los procedimientos que la ley marca”.

El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso puso el dedo en la llaga: “De igual forma, la Auditoría Superior de la Federación señala que en 2012, en lo que respecta a la construcción del metrobús, se realizaron pagos excesivos a trabajos de supervisión que además resultaron ser de mala calidad”.

El legislador priista cuestionó la carencia de sensibilidad social en la construcción de mega obras:

“Señores secretarios, tienen un compromiso directo con la ciudadanía, que los obliga a hacer un uso transparente de los recursos públicos. Es su deber aclarar las conclusiones realizadas por la Auditoría Superior de la Federación con respecto a las obras y procedimientos antes señalados pero, sobre todo, es su deber ejercer el presupuesto para cubrir las necesidades básicas de la población más desprotegida, y no sólo para beneficio de un sector social.

”Ya lo mencionó el día de ayer el secretario de Finanzas y Administración: deben corregir el camino o ¿seguirán equivocadamente invirtiendo los recursos sin atender las necesidades fundamentales de Puebla? ¿Seguirán ejerciendo el presupuesto público con la falta de un ejercicio transparente del presupuesto, como lo refiere la Auditoría Superior de la Federación?”.

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Por su parte, el diputado priista Leobardo Soto Martínez, con circunloquios quiso mostrase conciliador.

De la crítica frontal del jueves, Soto pasó al trato conciliador para los funcionarios estatales.

A diferencia de las críticas frontales a las políticas económicas realizadas el jueves por los diputados Maritza Marín y José Chedraui Budib, Soto Martínez optó por el llamado a la unidad.

El político poblano y dirigente de la CTM convocó a todas las fuerzas políticas a la unión de esfuerzos.

Para Soto Martínez, el trabajo unido de priistas y morenovallistas ha dado resultado.

Al subir a la tribuna, en plano conciliador, el dirigente cetemista sentenció: “En equipo hemos logrado los más altos presupuestos de este estado. En los últimos tres años me tocó ser legislador federal; en un ejercicio que hicimos el gobierno del estado, legisladores priistas y legisladores de todos los partidos acordamos un presupuesto que es el más alto en la historia de Puebla”.

La intervención de Soto Martínez pareció la de un secretario más de gobierno:

“Por eso digo que debemos felicitarnos todos: gobierno del estado ayuntamientos, legisladores locales, legisladores federales. Los presupuestos ahí están a la mano, las obras ahí están a la vista”.

Soto Martínez ejemplificó con las obras de Audi.

Pero quien se enorgulleció con la referencia de Soto Martínez a la inversión alemana no fue precisamente Cabalán Macari, sino su compañero diputado, el panista Pablo Rodríguez Regordosa.

Soto Martínez estuvo lejos de la revisión crítica priista del jueves.

En su lugar, el diputado cetemista le dijo al secretario Cabalán Macari, ante la presencia de los legisladores locales:

“Un claro ejemplo de este trabajo en equipo es la obra de Audi: una obra que, bien lo dice usted, señor secretario, traerá beneficio a miles de poblanos, está trayendo beneficio, ya, en este momento, a miles de trabajadores de la región de San José Chiapa”.

Los VIP que estaban en el salón de Plenos: asesores y acompañantes de los secretarios y los diputados le aplaudieron al legislador priista.

“Debemos unirnos más, para socializar estos recursos y hacerlos llegar a esos más de 2 millones de poblanos que hoy nos demandan agua potable y programas sociales”.

Y ya en tono de love and peace, el diputado local no escatimó loas a los diputados federales:

“Y que, en el Programa de Egresos de la Federación, en acuerdo con mi fracción priista, habremos de sumarnos para que nuestro diputados federales y nuestro presidente de la República Enrique Peña Nieto, estemos trabajando en equipo para traer más beneficios a Puebla”.