Oceanografía financió la campaña del gobernador

La relación del gobierno de Puebla con la empresa Oceanografía sigue siendo brumosa, sobre todo cuando a nivel nacional fue revelado que la empresa financió la campaña del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas.

El gobierno estatal hizo caso omiso a señalamientos internacionales como el de Standard and Poor’s, que alertaron que la empresa no era confiable; aún así, se le entregaron tres obras.

En Puebla se le entregaron obras y concesiones a Oceanografía, a pesar de que no contaba con antecedente alguno en construcción de obras carreteras.

De las más de 160 licitaciones públicas nacionales e internacionales que se documentaron que ganó para proveer servicios y obra pública, fueron principalmente para Pemex y su subsidiaria Exploración y Producción.

Todas estaban relacionadas con labores de inspección, monitoreo, reforzamiento, mantenimiento, flete, transportación, hospedaje, alimentación, rehabilitación de pozos y construcciones, por un monto que superaría los 31 mil millones de pesos, 

El analista político reconocido a nivel nacional Raymundo Riva Palacio, en su columna publicada en distintos medios del país, señaló que la relación del gobernador de Puebla con el principal accionista de Oceanografía, Amado Yáñez Osuna, es mucho más profunda. Toda esta situación ha derivado en deslindes de autoridades estatales, como el secretario general de Gobierno, Luis Maldonado Venegas, quien, durante su comparecencia del viernes, justificó la entrega de obras a la empresa investigada por fraude.

Luego del escándalo a nivel nacional de la empresa Oceanografía, acusada de diversos fraudes, entre ellos a Petróleos Mexicanos (Pemex), el gobierno de Puebla determinó quitarle la concesión de construcción y explotación de la carretera que comunicará a la empresa armadora Audi.

La empresa recibió tres contratos en la administración del gobernador panista Rafael Moreno Valle, entre ellos la construcción la plataforma para instalar la planta automotriz Audi, la cual ya fue terminada. Los bienes de Oceanografía fueron asegurados por la Procuraduría General de la República (PGR) el viernes pasado, como parte de una investigación por un presunto fraude a Pemex y a Citigroup, por 235 millones de dólares.

Además, en Puebla Oceanografía realizó su primera obra fuera de su ramo, con la construcción del proyecto integral de imagen urbana del corredor turístico cultural de la zona de Los Fuertes, obra que se quedó asentada en el contrato OP/LPN/SI-20110336 y que tuvo un costo de 70 millones 994 mil 352.74 pesos.

El analista político Raymundo Rivapalacio afirmó, en su columna publicada en distintos medios nacionales, que fue notoria la preocupación del mandatario sobre el tema, al tapizar a México de su deslinde de la empresa.

“Tapizó el jueves los medios de comunicación en la ciudad de México con el anuncio del ‘rescate’ de la concesión de una autopista que otorgó su gobierno a la mortalmente herida empresa”.

En un comunicado, informó que se la retiraba porque no había cumplido con la garantía de crédito establecida, que venció el 20 de febrero.

“Moreno Valle quedó expuesto cuando la prensa poblana recordó el lunes el nexo entre su gobierno y Oceanografía, a través de la concesión a una filial de la empresa, OSA Edificadora y Constructora”, dijo el especialista.

“Moreno Valle, que aspira a la candidatura presidencial del PAN en 2018, se había mantenido agazapado. El no haberse blindado al comenzar el escándalo hace casi un mes, sugiere que esperaba no verse involucrado”.

Y calificó al “rescate” como una medida “cosmética” y limitada, todo debido a los nexos con el principal accionista, Amado Yáñez Osuna, quien, señala, fue uno de sus principales financieros de campaña.

“La relación de Moreno Valle con el principal accionista de Oceanografía, Amado Yáñez Osuna, es mucho más profunda de lo que trata de aparentar.

”De acuerdo con personas que estuvieron en su campaña para la gubernatura, Yáñez Osuna fue uno de sus principales financieros, que se tradujo en su inclusión en la lista de empresas privilegiadas por su administración desde 2011”.

Y explicó: “OSA es una empresa que tiene seis socios, entre los que se encuentra el Grupo Aknuuk —no hay referencia de ello en internet—, y las investigaciones sobre Oceanografía encontraron que tiene entre sus dueños a los empresarios Oliver Fernández y Jaime Camil.

”Camil ha tenido problemas con Pemex desde el inicio del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto por el abuso de su representada Siemens, en un proyecto de remodelación de la refinería de Cadereyta. Fernández, ex tenista internacional, tiene una vieja relación con Moreno Valle al haber arreglado en Puebla, en alianza con la entonces líder del magisterio, Elba Esther Gordillo, un mecanismo de créditos a 70 mil maestros, que eran descontados por la vía de nóminas, igual al que otra empresa asociada a Oceanografía, Caja Libertad –investigada también por la PGR por presunto lavado de dinero–, hizo en Pemex. Fernández es miembro del Consejo de Administración de OSA, en donde están Yañez Osuna, y Martín Díaz Álvarez, socio minoritario en el holding intervenido. 

”La decisión de deslindarse de Oceanografía en la carretera, es una fuga hacia adelante. El gobernador Moreno Valle tiene una intensa y profunda relación con Yáñez Osuna y Oceanografía, cuyo escándalo lo halló desprotegido, vulnerable, y con obstáculos considerables para su carrera política, en franco ascenso”, terminó el especialista.

Además, la empresa ha sido ligada con los hermanos Jorge Alberto y Manuel Bribiesca Sahagún, hijos de Marta Sahagún de Fox, así como a César Nava, quien era dirigente nacional del PAN cuando Moreno Valle fue electo gobernador. Así mismo, con Gustavo Madero, exlíder nacional del mismo partido y quien es apoyado abiertamente para su reelección por el mandatario poblano.

Durante su comparecencia ante el Congreso local, el secretario general de Gobierno, Luis Maldonado Venegas, señaló que la concesión fue entregada a una filial llamada Osa Constructora y Edificadora. Detalló que el contrato se entregó de manera directa el 23 de diciembre de 2011, luego de que la licitación para esta obra se declaró desierta, como fue informado previamente en un comunicado de prensa.

Todo a pesar que empresas como IDEAL, de Carlos Slim; Omega, de Jorge Melgarejo; La Peninsular, de Carlos Hank Rhon; ICA, de Alonso Quintana, y OHL adquirieron las bases para participar en el concurso. Fue el diputado del PRI Víctor Giorgana Jiménez el que preguntó al funcionario estatal por qué se decidió entregar el contrato a la filial de Oceanografía, pese a que carecía de experiencia en construcción de carreteras.

En respuesta, Maldonado Venegas afirmó la concesión se sometió a un proceso legal y que, en ese entonces —añadió—, la empresa cumplió con los requisitos. Refirió la licitación se declaró desierta porque ninguna otra empresa se interesó en ese proyecto, que requería una inversión inicial de mil 660 millones de pesos, más otros 800 millones para trabajos complementarios.

Además, añadió que a los problemas que actualmente enfrenta Oceanografía se suma el atraso en la construcción de esta carretera, también llamada Audi porque pasará por la planta que la automotriz construye en esta entidad.

Desde 2010, Standard and Poor’s publicó las calificaciones crediticias de Oceanografía, que advertían los altos riesgos que representaba la empresa, reveló el director general y líder analítico para América Latina, Eduardo Uribe-Caraza. Sin embargo, el gobierno de Puebla entregó las tres obras señaladas, a pesar de esta alerta internacional.

Oceanografía tuvo una calificación de B+ y, de acuerdo con los registros de la firma, una de cada tres empresas con grado B cae en incumplimiento después de cinco años. Por lo tanto, el directivo de Standard and Poor’s indicó que ese es un claro indicador de que “estás metiéndote en un riesgo significativo al invertir en esa compañía”.

Asimismo, explicó que dos o tres años después de que fue calificada de esta manera, la compañía dejó de dar información al mercado, por lo que fue ya no fue tomada en cuenta desde 2010 para este tipo de evaluaciones.

Eduardo Uribe-Caraza consideró que los inversionistas deben fijarse en que las empresas sean institucionales, tengan buenas prácticas de gobierno corporativo, de transparencia y revelación de información.

Dicha calificación es una alarma muy clara al mercado, al inversionista, de que tiene que buscar que las compañías sean más institucionales y que tengan buenos gobiernos corporativos y, por ende, que esto se traduzca en buenas prácticas financieras y en su manejo de negocios, explicó.

Añadió finalmente que cuando la calificadora saca un reporte espera que los inversionistas tomen en cuenta estos precedentes y, por lo tanto, asuman el riesgo al momento de tomar un bono.

Por medio de un comunicado, se informó que el organismo descentralizado Carreteras de Cuota Puebla llevó a cabo la recuperación de la concesión para la construcción, operación, explotación, conservación y mantenimiento de la carretera tipo A2.

El proyecto de esta arteria vial denominada Cuapiaxtla-Cuacnopalan abarca de 63.66 kilómetros de longitud, con origen en el entronque Cuapiaxtla II, ubicado en el kilómetro 39+340 de la autopista de cuota Amozoc-Perote.

Todo con terminación en el km 203+500 de la autopista Puebla-Orizaba en los estados de Puebla y Tlaxcala, en la República mexicana.

Se detalla que, previa emisión de una licitación pública abierta, el 23 de diciembre de 2011 se otorgó un título de concesión a la empresa Osa Constructora y Edificadora SA de CV, filial de Oceanográfia SA de CV.

Con el objetivo de garantizar la terminación adecuada de la obra, se fijó como fecha límite para la empresa el día 20 de febrero de 2014 para exhibir una carta irrevocable expedida a favor del gobierno del estado por parte de una institución de crédito debidamente autorizada para operar en el país, por el equivalente al 100 por ciento del monto de la obra.

Pero, al no cumplirse dicha obligación, el gobierno del estado inició los procedimientos que culminaron el día de hoy con la declaratoria de rescate de la concesión, emitida por el organismo público descentralizado Carreteras de Cuota Puebla.

Y afirma que todo fue con fundamento en los artículos 1, fracción I; 2, fracción I; 9 fracciones V, VII y último párrafo, 12, 14, 16, fracción I, 51, 64 fracción III, 65, 66, 67, 68, fracción VI, 69 y 70 de la Ley General de Bienes del Estado.

“En virtud de la relevancia que este proyecto representa para el desarrollo regional, el gobierno estatal tomará las medidas necesarias para garantizar la conclusión de la carretera Cuapiaxtla-Cuacnopalan”, aseguran, sin más detalle.

La autopista Cuapiaxtla-Coacnopalan pasa por el lugar donde operará la empresa Audi, al oriente de la ciudad. La empresa investigada obtuvo por asignación directa la construcción y operación por 30 años de la autopista Cuapiaxtla-Coacnopalan, llamada autopista Audi, precisamente por conducir al lugar donde operará la automotriz, que requeriría una inversión de mil 662.