Este domingo continuarán las protestas por el distribuidor vial de Cholula, con una marcha de varias organizaciones unidas contra el proyecto morenovallista al que acusan afecta la zona prehispánica.
Profesores de investigación científica y docencia del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) emitieron de una carta al gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, en la que piden reconsidere la obra, no necesariamente suspenderla, pero si cambiarla para engrandecer la pirámide de Cholula.
La misiva fue realizada con copia a la directora del INAH María Teresa Franco, en la que piden la suspensión de la obra.
En dicha misiva en poder de Intolerancia Diario, fechada el 26 de marzo de 2014, bajo el oficio SI/057/2014, aclaran al mandatario estatal que nunca se han opuesto a las obras del gobierno por capricho.
“(…) en respuesta a sus declaraciones de prensa, que en ningún momento nos hemos opuesto a las obras de gobierno por capricho, mucho menos como un ejercicio irracional de poder o por otra razón que no sea la defensa integral del patrimonio cultural de la Nación, apegándonos a la legislación vigente y los tratados internacionales que México ha firmado, propósito que, con toda seguridad, compartimos con Usted”, señala textualmente parte de la carta.
Afirman los especialistas que no se oponen al desarrollo de Puebla ni de ningún otro estado de la República, sino que están convencidos de que el desarrollo debe ser compatible con el respeto hacia los elementos que constituyen el patrimonio histórico y cultural de la nación.
“(…) representa el esfuerzo de muchas generaciones de mexicanos para construir este gran país. No desconocemos el aporte al desarrollo de la sociedad moderna pero es imprescindible que éste se sustente en los valores de identidad que nos dan sentido a través de la historia”.
Por lo mismo, mencionaron que en el caso del distribuidor vial de Cholula, se oponen a la licencia dada sin bases técnicas por la delegación del INAH Puebla.
“(…) consideramos que se debe reconsiderar el proyecto, no necesariamente suspenderlo, dignificando aún más esta obra con el valor añadido de respetar y engrandecer, la gloriosa pirámide de Cholula, orgullo local, estatal y nacional”.
Pidieron al ejecutivo del estado reconocer su derecho a expresarse en relación a éste y otros aspectos de su competencia, por lo que solicitaron exponerle de manera personal los argumentos.
“(…) en un dialogo respetuoso y en la búsqueda de coincidencia de intereses que nos son comunes: el desarrollo social y la protección de nuestra riqueza cultural e histórica”, añadieron al finalizar en el escrito.
La carta está firmada por María de la Luz Aguilar, secretaría general; Enrique Hugo García, secretario de organización; John Joseph Temple, secretario de trabajo y conflictos; Hamlet Antonio García, secretario de Finanzas; María Magdalena Ordoñez, secretaria de previsión y asistencia social y María Teresa Olivera, secretaria de escalafón y Promoción.
Mientras tanto la obra continúa de manera normal en la entrada a San Pedro y San Andrés Cholula por la avenida La Recta, como se comprobó tras un recorrido de este medio de comunicación por la zona.
Se pudo ver a trascabos trabajando al sacar tierra que era depositada en tráileres, mientras que al menos 15 obreros hacían trabajos en distintos puntos.
La obra y su controversia
El viaducto que se está construyendo en La Recta, ha generado una gran controversia, debido a su cercanía de la pirámide de Cholula - a 400 metros-, lo cual afirman, daña su visibilidad, además de afectar zona protegida por el gobierno federal.
El 12 de marzo pasado, en entrevista para Intolerancia Diario el delegado en Puebla del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), José Francisco Ortiz Pedraza, reveló que no se había otorgado un permiso definitivo, sino uno previo al estudio.
Y es que el gobierno de Puebla, explicó, tendría que esperar a un estudio arqueológico más a fondo del INAH, en una parte la zona donde se construye el viaducto.
Entrevistado en su oficina ubicada en las instalaciones del INAH en Puebla en la zona de los fuertes de Loreto y Guadalupe, explicó que se dio una especie de pre-permiso, pero aún están pendientes estudios.
Detalló que la solicitud del permiso se hizo desde octubre del 2013 por la constructora y el ayuntamiento de San Pedro Cholula, la cual se empezó a revisar desde entonces para otorgarla.
Dijo que en primera instancia hubo una revisión de las poligonales que abarca la zona arqueológica de la pirámide de Cholula, que es un área federal, la cual si es invadida en una parte por la obra morenovallista.
Por lo tanto, explicó que en esta zona que abarca desde la Recta a Cholula hasta parte de la calle 12 Oriente, tendrán que hacerse excavaciones para ver si no hay vestigios históricos que sean afectados.
La otra mutad del proyecto, dijo, quedó totalmente fuera de los monumentos histórico de San Pedro Cholula, así como del área de zona típica de la zona por la que se le cataloga como Pueblo Mágico.
“De repente pareciera que está cerca de la pirámide, pero no la afecta ni visualmente” dijo al explicar que lo que si tendrán que cambiarse por una orden del INAH son los tirantes que sostendrán el viaducto.
“Las poblaciones actuales están sobre vestigios de poblaciones prehispánicas, en Cholula donde se excave algo sale”, dijo
“Se analizó la parte de la recta a Cholula, la que era un lago, por lo tanto no debería haber evidencias, en la calle 12 Oriente, se realizaron entre 2005 y 2009 trabajos de drenaje pluvial, donde salieron varias cosas”
explicó que dependiendo de lo que se encuentre en la zona, es como se podría suspender definitivamente, pero tendría que ser algo muy grande como una ciudadela, grandes salones o hasta palacios.
“Es algo que se aplica en todo el país, una vez orientado el proyectos se hace la excavación, el salvamento y rescate, salvó que salga algo grande se suspendería, de lo contrario, se libera”.
Asimismo explicó que una de las preocupaciones es si afecta la obra lo visual del entorno, por lo que especialistas del INAH hicieron levantamientos fotográficos y considerando el proyecto de la altura del puente, es la misma de los edificios que ya están ahí, “no hay afectación”, dijo.
Y detalló que esa zona de la Recta a Cholula, según datos históricos, era una zona de un lago, donde ya ha habido excavaciones para colocar los pilotes más grandes, encontrándose pavimento, tepetate, 50 centímetros de basura, y rellenos de cerámica del siglo 20 y al final arena, lo que comprueba que era un espejo de agua.
Afirmó que en la zona se encuentran supervisando los trabajos dos arqueólogos del INAH,
Pero que posteriormente se contratan entre seis y 12, para la parte que se tendrá que excavar.
“Si hay vestigios no hay duda, pero sobre la 12 Oriente”, dijo al señalar que lo único que prohibió fue la colocación de tensores en el puente, los que deberá de suprimirse su construcción ya que no son necesarios y si afectaría la zona.
Por lo tanto, comentó que pidieron ese cambio a las autoridades estatales, quienes se comprometieron a hacerlos.
-¿El INAH ya cuentan con el proyecto?
-Tenemos un proyecto general, pero nos e aceptó, se di un permiso –provisional- para avisar al área de arqueología, no se trata de extralimitarnos.
Así explicó que el permiso definitivo no se ha entregado, ya que primero debe ser aprobado por el Consejo de Arqueología del INAH, organismo colegiado de especialistas quienes tienen la última palabra.
Y señaló que esperan que antes de que arranqué la segunda parte de la construcción, deben entregar el nuevo proyecto ya sin los “tirantes” de los puentes.
Señaló que en el mes de noviembre entregó el permiso de prefactibilidad, en el cual se les dice que es viable, pero aún con pendientes.
“Es el equivalente a un permiso, de prefactibilidad, damos este tipo de permisos, para que les den los recursos”, explicó al tiempo de mostrar los documentos a la prensa.
La marcha
Por medio de volantes y hasta redes sociales como Twitter y Facebook, se está convocando para este domingo a la ciudadanía a incorporarse a la “Marcha- Clausura contra el distribuidor vial”, llamado también “el monumento al automóvil”-
“Protejamos Cholula de los megaproyectos mega absurdos”, señala la publicidad en la que se convoca acudir a las 10 de la mañana en el Centro Comercial Villas del Puente, justo antes de llegar a la Universidad de las Américas (UDLA) por La Recta en dirección a la ciudad cholulteca.
Esta convocatoria la realiza el comité defensor del patrimonio histórico cultural y ambiental de Puebla –mismo que logró detener la construcción del teleférico por medio de amparos-, así como la Fundación Manuel Toussaint y el colectuvo Cholula en Bici.
Este último organismo desde hace unos meses inició una estrategia para exigir al gobierno de Rafael Moreno Valle que frene los trabajos, luego de entregar una carta firmada por más de mil 200 vecinos.
Representantes de esta ONG se presentaron el 11 de marzo de 2014 este lunes en las oficinas de la Secretaría de Infraestructura en el CIS para entregar la carta con las firmas.
Giovany Zayas, representante de Cholula en Bici, explicó la exigencia porque se frenen los trabajos, al afirmar que en el mundo los viaductos están siendo obsoletos, por lo que hizo otras propuestas viales en la zona.
Ese mismo día a pesar de las protestas, el mandatario estatal Moreno Valle en entrevista al término de un evento en San Pedro Cholula, de manera tajante, aseguró que la obra se realizará, al minimizar al grupo
Sentenció que cuentan con los permisos necesarios, ya que la construcción está fuera del área de influencia del INAH,
“Es el mismo grupo que se oponía al distribuidor vial de Zaragoza y ahí está, ha traído beneficios muy importantes para la ciudadanía, ustedes lo observan y en ese sentido es exactamente igual.
Aseguró que la obra no impacta con las zonas arqueológicas, al estar sobre la Recta a Cholula.
“Nosotros tenemos los permisos, pero además lo vamos a construir, tendrán su derecho a dar su opinión, sin embargo la decisión está tomada, está apegada a derecho y así como lo hicimos con el viaducto a Zaragoza, vamos a concluir este proyecto en beneficio de los ciudadanos.
Contrariamente Giovany Zayas, indicó que sería grave si realmente no le corresponde al INAH determinar si en zona arqueológica no se daña, además de revelar que el delegado en Puebla les aseguró que no ha dado permisos.
Por lo tanto dijo que al organismo federal le corresponde determinar si un puente atirantado de gran tamaño no va a afectar tanto la riqueza arqueológica en el subsuelo como los visuales desde y hacia la pirámide.
“Estamos hablando que es una ciudad de tres mil años de edad, por lo que a quien le corresponde decir si le afecta o no es al INAH”.