A partir del viernes 25 de abril, la fachada del Congreso del estado será iluminada de color naranja como una muestra de combatir la violencia doméstica en Puebla. Así lo anunció la diputada federal Rocío García Olmedo al señalar que esto se llevará a cabo cada mes y se buscará que se difunda esta acción.

Recordó que el Congreso de Puebla se sumó a la solicitud de la Cámara Diputados para que las entidades federativas iluminen de color naranja las sedes del Poder Legislativo los días 25 de cada mes, para conmemorar el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer.

Recordó que en América Latina y el Caribe casi 100 por ciento de los países reconoce la violencia doméstica como un delito.

Comentó que por unanimidad los diputados locales de las diferentes fracciones parlamentarias aprobaron luminar los edificios gubernamentales que tengan relación con la actividad legislativa, debido a que esto forma parte de la campaña del secretario general ÚNETE para poner fin a la violencia contra las mujeres, por lo que proclamó el 25 de cada mes Día Naranja. En donde también se invita a llevar alguna prenda de ese color para resaltar el llamamiento a erradicar la violencia contra la mujer, sin reservas, equívocos o demora.

Explicó que la fecha del 25 de noviembre se eligió para conmemorar a las hermanas Mirabal, tres activistas políticas que fueron brutalmente asesinadas en 1960 por orden del gobernante dominicano Rafael Trujillo (1930-1961).

Roció García Olmedo recordó que la violencia contra la mujer afecta e impide el avance en muchas áreas, incluidas la erradicación de la pobreza, la lucha contra el VIH/Sida y la paz y la seguridad.

La violencia contra la mujer es una violación de los derechos humanos, la violencia contra la mujer es consecuencia de la discriminación que sufre, tanto en leyes como en la práctica, y la persistencia de desigualdades por razón de género; y la violencia contra la mujer sigue siendo una pandemia global. Hasta 70 por ciento de las mujeres sufre violencia en su vida.

“Hoy, en el año 2014, mujeres de todo el mundo siguen sufriendo maltrato, se les utiliza como objetos y se les impide hablar. Sin embargo, las mujeres representan la mitad del potencial del mundo y cada una de ellas tiene derecho a vivir sin discriminación, por lo que hay que trabajar para erradicar la violencia contra las mujeres y niñas”, enfatizó.

Con base en estadísticas de ONU-Mujeres —del 2011— en materia de legislación en América Latina y el Caribe, casi 100 por ciento de los países reconoce la violencia doméstica como un delito, sin embargo, solo 65 por ciento de los países considera el acoso sexual como delito y menos de la mitad de los países tiene la figura de violación conyugal contemplada específicamente como un delito.

Dijo que entre 500 mil y 2 millones de personas se calcula que son víctimas de trata cada año, lo que las lleva a la prostitución, a realizar trabajos forzados, a la esclavitud o a la servidumbre, por lo que las mujeres y las niñas representan alrededor de 80 por ciento de esas víctimas.

Además, se calcula que más de 130 millones de mujeres y niñas que viven hoy en día han sido sometidas a la mutilación/ablación genital femenina, sobre todo en África y en algunos países de Oriente Medio; el costo de la violencia doméstica en los Estados Unidos supera los 5 mil 800 millones de dólares anuales, de los que 4 mil 100 millones corresponden a servicios médicos.