El morenovallismo le ha dado su sello propio a las obras de infraestructura que representan el pasado de Puebla.

La ornamentación que la administración estatal ha impregnado a las obras ha distinguido a las obras del presente sexenio.

Desde el 2012 a la fecha en el proyecto de obras del gobierno estatal se ha caracterizado por un conjunto de rasgos ornamentales en las construcciones estatales.

A diferencia de administraciones anteriores que simplemente colocaban alguna placa para dejar constancia del sexenio en el que se construyó la obra los puentes, plazas, remodelaciones, de la actual administración dejan su propia marca. 

Entre las constantes ornamentales en el espacio que reconstruye el morenovallismo se encuentra los espejos de agua, las fuentes, el uso de mosaicos de color azul y blanco en fachadas, el uso de la iluminación, enrejados entreabiertos con formas boscosas y espacios amplios en plazas y edificios públicos.

Además, en algunos de ellos, la desaparición de los espacios populares y muchas veces informales de comida que son reemplazados por restaurantes de franquicias que ha comprado el gobierno estatal.

También en los puentes se han colocado luces que iluminan los puentes lo que resulta atractivo para los turistas.

Sin embargo, en la mayoría de los puentes y viaductos elevados se han cancelado accesos o espacios para los peatones privilegiando únicamente el uso de los vehículos.

De acuerdo a evaluaciones como las del ITDP en Puebla los recursos públicos federales invertidos privilegian el desarrollo del transporte particular. Por ejemplo, en el 2012, en Puebla el estado destinó el 76% de sus recursos federales a la movilidad del automóvil y sólo un 23% a la infraestructura de movilidad en el espacio público.

El ITDP advirtió que con esta tendencia se generan costos sumamente elevados para las zonas metropolitanas del país, sobre todo por la congestión vehicular y la expansión urbana inducidas por la ampliación de la infraestructura vial.

Reportes como el de Ciclociudades 2014 advierten que la inversión en infraestructura vial en otro tipo de movilidad que no sea la movilidad en auto particular ha sido prácticamente nula en la ciudad de Puebla.

Puentes atirantados
Para la construcción del viaducto elevado de la avenida 31 Poniente se gastaron 235 millones de pesos. 

El viaducto elevado se caracteriza porque los tirantes del puente muestran o sugieren las iniciales de las letras M y V.

Además, en las obras morenovallistas se han privilegiado en los diseños el color azul que coincide tanto con la imagen institucional del gobierno como con los logotipos de las coaliciones que conforma el PAN con otras fuerzas políticas en las elecciones locales en Puebla. 

El 13 de septiembre del 2012 se inauguró el puente de Santa Ana, un puente atirantado con un costo de 777 millones.

En los puentes se colocan atirantados como objetos ornamentales. Lo mismo en puentes construidos en la ciudad de Puebla como en el interior del estado.

Con una inversión de 10 millones 956 mil pesos, en septiembre del 2014, el gobierno del estado inauguró el puente Zaragoza, en la carretera Amozoc-Teziutlán. Dicho puente reconstruido tiene una longitud de 35 metros de largo por 12 de ancho, cuenta con dos carriles.

El puente luce un atirantado.  

Para la construcción del puente del viaducto Zaragoza se invirtieron mil millones de pesos lo que incluyó la pavimentación con concreto hidráulico. Se trata de otro puente atirantado.
 
Los Fuertes
Para los festejos del 150 aniversario de la batalla de Puebla de 1862, se remodeló la zona de los fuertes.

Se gastaron 700 millones de pesos en las obras del Parque Cívico 5 de Mayo incluyendo el lago y el Fuerte de Guadalupe.

En la zona se construye un teleférico que podría estar listo este año y que formaba parte del proyecto de remodelación.
 
El auditorio Siglo XXI
La remodelación del auditorio Siglo XXI, donde Rafael Moreno Valle, rendirá su informe también recurre a los espejos de agua y fuentes en la explanada del mismo. Se eliminaron las rejas que anteriormente rodeaban el acceso al mismo. Y se conectó el acceso al auditorio a través de una ciclopista que une un complejo de puentes peatonales que desde el CIS o desde lo que será el museo internacional barroco permitirán la llegada al auditorio.

El arquitecto Javier Ramírez Campuzano, hijo del extinto arquitecto Pedro Ramírez Vázquez criticó la obra en julio del año pasado, señalando que la remodelación se hacía sin respetar el proyecto original y las piezas de talavera monumentales de la fachada del Siglo XXI.

“Nunca en la historia de la talavera se habían fabricado piezas de estas dimensiones”, explicó Ramírez Campuzano.

“Esta fachada representaba una constante cultural con una solución contemporánea que identificaba y distinguía la cultura poblana”.
 
La estela de luz
En el Nodo Juárez-Serdán, inaugurado este domingo, se construyó una estela en la zona de la llamada Glorieta del Amor.

La obra ornamental, visible por su altura, estructura de varios metros de alto, hecha con aluminio perforado, con lo que se simula talavera, muestra el mismo diseño que las fachadas de hospitales, centros de salud y otros edificios públicos que se han construido en esta administración. 
 
El patrón de enrejados
En la remodelación Parque Ecológico “Revolución Mexicana” de la ciudad de Puebla, en el Parque de la Niñez, entregado la semana pasada y en la zona de los fuertes se repite el mismo patrón de enrejado. Un enrejado que simula zonas boscosas.  
 
Fuentes del CIS y de la Estrella de Puebla
Cercana a la vía Atlixcayotl, se ubica una fuente a nivel de piso compuesta por 250 salidas de agua con una altura de 2.5 metros distribuidas de manera matricial 10 por 25. La fuente interactiva tuvo un costo de 31 millones.

En otros municipios como Huauchinango también cuentan con este tipo de fuentes en el zócalo de esta ciudad serrana.

También la fuente instalada en el Parque Lineal frente a la rueda de observación.