Los rostros encontrados del combate a la pobreza: en la Universidad Iberoamericana, el desglose de los daños a los ciudadanos por la creciente desigualdad social; y en el Congreso, la catarata de cifras para justificar la política de desarrollo social.

Mientras en el Congreso de Puebla, el secretario de la administración estatal, Luis Banck, defendió la política de desarrollo social en el estado de Puebla, investigadores, religiosos, periodistas, escritores y activistas denunciaron la falta de justicia social en Puebla, estado donde la pobreza pasó de 3.6 a 3.8 millones de pobres.

Si en el Congreso estatal, en la comodidad de su comparecencia, convencía a los legisladores sobre las cifras de las actividades de su secretaría, en la Ibero, estudiantes y académicos desglosaron el diagnóstico sobre la falta de movilidad social, la desigualdad en el estado, brechas que se profundizan con una criminalización de la protesta de los disidentes.

Durante el foro “Justicia social en México”, en la UIA-Puebla, los ponentes revelaron la inequidad en Puebla, así como un “gobierno autoritario” que criminaliza la protesta social y encarcela a los opositores volviéndolos presos políticos.

El foro transitó de las definiciones sobre lo que es justicia social a la dificultad de alcanzarla en lugares como Puebla, donde se ahondan las diferencias de ingreso entre sus habitantes.

Al dar inicio el encuentro, el maestro Juan Luis Hernández Avendaño, director de Ciencias Sociales de la Ibero, señaló que actualmente México vive su peor crisis moral tras contar con más de 50 millones de pobres.
El académico de la universidad jesuita resaltó que el problema de esta crisis es la corrupción que impera en todo el país.

Avendaño citó al mártir religioso Ignacio Ellacuría: “En tiempos peligrosos no hay mayor error que la pasividad, para ello se crean estos espacios, puesto que no se trata solo de quedarnos con lo que se dice en las aulas”.

En un primer momento se presentaron denuncias sobre las situaciones de injusticia que prevalecen en el estado de Puebla bajo el gobierno estatal.

En la parte final del foro, los participantes discutieron sobre los límites de la participación política, la posibilidad de transformar la realidad social en el contexto nacional con el rescate de las instituciones y frente a esto la desconfianza de los ciudadanos sobre los partidos políticos y los procesos electorales, como ha sucedido en otras partes del mundo, como España, con el surgimiento del movimiento partido Podemos, integrado por ciudadanos y cuadros ajenos a la tradicional política partidista y que en este momento, de acuerdo a las encuestas, alcanza el 40 por ciento de la simpatía de los electores españoles.

Los ponentes coincidieron en la falta de justicia social en el estado de Puebla, que se profundiza con la desigualdad y la persecución política.
En especial, los participantes subrayaron la criminalización de la protesta social y los presos políticos resultados de la persecución del gobierno estatal en contra de los opositores.

La legisladora del PRD Roxana Luna Porquillo recordó que en el estado de Puebla hay más de un centenar de presos políticos, quienes se han opuesto a políticas públicas estatales, obteniendo como respuesta del gobierno su encarcelamiento.

La legisladora señaló que en el estado de Puebla, con la existencia de 4 millones de pobres, se restringe la justicia social.

Roxana Luna expuso que la justicia social en el país no existe, y destacó que eso es tangible cuando existen más de 21.4 de niños sin alimentos, cuando el estado de Puebla ocupa el primer lugar en desigualdad, o bien, cuando de 2010 a la fecha la tasa de pobres en la entidad pasó de 3.6 a 3.8 millones de personas. “La justicia en México y Puebla pareciera ser inadmisible, pues cuando ésta se exige, la respuesta del Estado es incriminar a los defensores sociales en delitos como el secuestro, el despojo o motín, ese es el castigo para quienes exigen justicia”.

Luna Porquillo resaltó que los más de 100 presos políticos en el estado de Puebla fueron detenidos sin que existiera una orden judicial y sufrieron un daño en su patrimonio cercano a los 6.2 millones de pesos.
Roxana Luna recordó la lucha de las juntas auxiliares para que sean reconocidos los Registros Civiles en sus demarcaciones y cómo esto derivó en la represión por parte del estado.

La legisladora señaló que mientras los activistas son encarcelados por razones políticas, los asesinos del niño José Luis Tehuatle Tamayo, víctima de la represión del 9 de julio del 2014 en San Bernardino Chalchihuapan, abandonaron la prisión en las vísperas del 24 de diciembre.

Juan Enrique Huerta Wong, especialista en el tema de la movilidad y la pobreza, señaló que existe una clase minoritaria que ostenta el poder económico de todo el país; en la medida en que ésta modifique su nivel socioeconómico, en esa misma media se desarrollará la justicia social. “Es triste ver que para los próximos años siete de cada 10 personas en el país heredarán la condición de pobreza”.

Desde una visión pastoral, el padre Juan José Esquivias explicó que la búsqueda de justicia social que realiza la Compañía de Jesús está orientada a trabajar siempre por y para los pobres.

En ese sentido, el periodista Rodolfo Ruiz señaló que en Puebla se presenta el fenómeno de la corrupción y el control político. Basta con revisar las licitaciones amañadas, los sobrecostos de las obras, las concesiones a los Hank González, el control del Ejecutivo sobre la Comisión de Acceso a la Información Pública (CAIP), la Comisión Estatal de Derecho Humanos (CEDH) y los medios de comunicación.

“La corrupción es el cáncer de nuestra sociedad, en Puebla las autoridades creen que las magnas obras cierran la brecha entre ricos y pobres, pero desgraciadamente esto no es así”. 

 

El tripack


El periodista Rodolfo Ruiz señaló que el gobierno del estado ha establecido un control sobre los medios de comunicación para construir una candidatura presidencial ocupando la estrategia conocida como “tripack”.

Rodolfo Ruiz planteó que la corrupción, la asignación de obras con licitaciones amañadas, los sobrecostos en las obras han caracterizado al gobierno estatal.

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El escritor Edson Lechuga leyó un poema en el foro sobre los estudiantes desaparecidos en Iguala, estudiantes de la Normal Isidro Burgos, de Ayotzinapa.

El novelista cuestionó a la clase política y a los partidos políticos como medios de transformar el país, y señaló que es indispensable empoderar a los ciudadanos para mejorar las condiciones de vida del país y lograr la justicia social.

Lechuga puso como ejemplo la convocatoria de la organización Podemos, que está disputando el poder en España a los partidos tradicionales. Esta organización, señaló Lechuga, está compuesta por ciudadanos que anteriormente no habían participado en los partidos políticos tradicionales como el PP y el Psoe.