México, a pesar de los esfuerzos gubernamentales, se encuentra rezagado en los indicadores de bienestar, subraya un informe de la OCDE.

El mayor rezago que resalta el informe es la caída en los ingresos del 2008 a la fecha.

“Asimismo, se ha observado una caída generalizada de los ingresos de los hogares, sobre todo desde el año 2008; y en los estados donde se ha registrado un incremento en el ingreso, también se ha observado un crecimiento de la desigualdad.”

Este efecto de la caída en los ingresos se observa en el estado de Puebla: “Puebla supera el promedio nacional en la dimensión de seguridad debido a una baja tasa de homicidios; no obstante, el estado queda rezagado en la mayoría de las otras dimensiones. Por ejemplo, dos tercios de los habitantes de Puebla se encuentran en situación de pobreza (cifra por encima del 46% observado a nivel nacional).

Además, el 72% de las personas empleadas se encuentran laborando en el sector informal, 14 puntos porcentuales arriba del promedio nacional. La tasa de mortalidad infantil es la más alta del país, y únicamente un cuarto de los habitantes del estado perciben a los jueces como no corruptos”.

Además el reporte elogia el incremento en accesibilidad a servicios públicos: “En el periodo de 2009 a 2014, en comparación con el promedio del país, Puebla mejoró en la dimensión de accesibilidad a servicios debido a que el porcentaje de viviendas con acceso a servicios básicos se ha incrementado de un 70% a un 83%, el avance más grande que se ha visto en este indicador en el país. También se han registrado avances en las dimensiones de vivienda, educación y salud (la esperanza de vida al nacer incrementó en dos años).”

Sin embargo, el reporte señala un deterioro en el nivel de ingresos para el estado de Puebla.

“Por otra parte, su desempeño en la dimensión de ingresos se ha deteriorado, en los últimos años, de forma más rápida que el promedio nacional”.

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El vecino estado de Tlaxcala presenta un desempeño similar al de Puebla aunque presenta como Puebla mejoras en los servicios públicos: “El desempeño de Tlaxcala en las dimensiones de seguridad, medio ambiente y salud está por arriba promedio nacional, sin embargo el estado se encuentra rezagado en las otras ocho dimensiones. Su buen desempeño se debe a tasas de homicidios y de incidencia delictiva relativamente bajas, a una adecuada disposición de residuos en áreas controladas y a una buena calidad de vivienda. Las tasas de mortalidad materna y obesidad en el estado se encuentran entre las diez más bajas del país”.

“Con respecto a la dimensión de empleo, la calidad de las condiciones de la población ocupada de Tlaxcala ha quedado rezagada del resto del país. La informalidad laboral afecta al 73% de los empleados, 15 puntos porcentuales arriba del promedio nacional, y el 17% de la población ocupada se encuentra en condiciones críticas, el segundo valor más alto en el país en este indicador. Los indicadores de la dimensión balance vida-trabajo son de los peores entre los estados de México, tanto en términos de horas de trabajo, como en la falta de satisfacción con el tiempo para ocio”.

“En los últimos años, las dimensiones de accesibilidad a servicios, salud y vivienda mejoraron en Tlaxcala a una velocidad mayor que la del promedio nacional. La esperanza de vida aumentó casi tres años y la tasa de mortalidad infantil se redujo de 26 muertes por cada 1 000 nacidos vivos a 15 muertes por cada 1 000 nacidos vivos, siendo el cuarto mayor avance en este indicador registrado en el país”.

 

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En los últimos 15 años México ha mejorado su desempeño en diferentes dimensiones que son esenciales para una buena vida, sobre todo en las áreas de salud, accesibilidad a servicios básicos y calidad de la vivienda. No obstante, actualmente se requieren de mayores esfuerzos para avanzar en áreas tales como la educación, la seguridad, la calidad de los empleos y la reducción de la pobreza, en las cuáles México todavía registra un desempeño limitado si se le compara con otros países de la OCDE. 

Asimismo, en términos de resultados de bienestar, existen grandes disparidades entre las entidades federativas del país.

Las siguientes cifras ejemplifican parte del trabajo que aún queda por realizarse: solamente el 44% de la fuerza laboral mexicana cuenta con estudios de bachillerato o más, 30 puntos porcentuales por debajo del promedio de la OCDE, mientras que la brecha educacional entre el Distrito Federal (58%) y el estado de Chiapas (27%) es la segunda mayor disparidad que hay en cualquier país miembro de la OCDE, después de Turquía.

En los últimos años se han reducido las disparidades entre los estados rezagados y el resto del país en las dimensiones de salud, accesibilidad a servicios y vivienda. Las diferencias regionales en términos de salud y acceso a servicios han venido disminuyendo desde el año 2000 debido principalmente a una reducción en las tasas de mortalidad materna e infantil, así como a un incremento en la accesibilidad a servicios básicos en los estados rezagados. Al mismo tiempo, en promedio, el país ha empeorado en las dimensiones de seguridad, ingresos y empleo. Las condiciones de pobreza extrema que se concentran en unos cuantos estados, como Guerrero o el Estado de México, explican el deterioro de la seguridad en los últimos cinco años; mientras que el  empeoramiento de la situación laboral, aunque menos grave que el de la seguridad, se ha extendido a la mayoría de los estados en los últimos diez años. Asimismo, se ha observado una caída generalizada de los ingresos de los hogares, sobre todo desde el año 2008; y en los estados donde se ha registrado un incremento en el ingreso, también se ha observado un crecimiento de la desigualdad.

Se vive mejor en Tlaxcala que en Puebla: OCDE

Quienes viven en el estado de Tlaxcala cuentan con una mejor calidad de vida que los poblanos, o al menos eso es lo que reveló el estudio “Midiendo el bienestar en los estados mexicanos” realizado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

El documento presentado denuncia que de los 12 rubros evaluados, Tlaxcala ofrece mejores condiciones para sus habitantes en 7, uno más de la mitad. 

Por ejemplo, aunque Puebla se encuentra tres lugares por arriba en cuanto a Educación sobre Tlaxcala, sobresale que en el tema de seguridad, el estado vecino esta situado ocho posiciones sobre la Angelópolis. 

Otro caso fueron los renglones de Salud y Vivienda. En ambos casos Tlaxcala supera en 13 posiciones a Puebla, siendo éstos rubros los más críticos en la comparativa entre entidades vecinas.