A partir de las cero horas del próximo sábado, el sistema de impartición de justicia cambiará. A nivel nacional entrará en vigor el Nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio, con él se reducirá el tiempo para que los jueces emitan una sentencia, se eliminará la libre interpretación de un juez y se amplían las garantías para víctimas y acusados.
Faltan sólo unas horas para que después de casi un siglo se dé la primera gran modificación en el sistema de justicia en México. En este marco, la catedrática de la Escuela Libre de Derecho, Estefanía Santillán Huerta, explicó algunos de los puntos básicos y aclaró que en las nuevas figuras no se establece la formación de jurados para determinar la culpabilidad o inocencia del indiciado.
Recordó que el 18 de junio de 2008 el Congreso de la Unión aprobó la modificación con la que se migrará del sistema inquisitorio, -imperantemente escrito-, a uno de carácter acusatorio, -predominantemente oral-.
Entre los defectos que arrastraba el sistema inquisitorio se encuentran los vicios y errores en la impartición de justicia como que los sentenciados no conocían al juez que les imponía la sanción de 10 o 15 años de prisión.
Sobre el lastre de la compra y corrupción de jueces, expresó que se combate con el nuevo sistema ya que será más difícil corromper a cinco jueces que a uno, además se confió en que se terminará con otros vicios como los apoyos que se otorgaban a los agentes ministeriales.
Ahora habrá 5 jueces
El primer punto del Nuevo Sistema de Justicia Penal Acusatorio es que ya no será un solo juez el que rija el procedimiento y la sentencia de cada acusado. Desde el próximo sábado habrá cinco, esto significa que será un juez de control quien va a seguir todo el procedimiento de investigación.
Asimismo se establece para cada caso un juez de juicio o un tribunal colegiado compuesto por tres jueces quienes van a ser los que hagan presencia física, además de un juez de ejecución.
Así serán cinco jueces los que atiendan cada caso y la resolución de la culpabilidad o inocencia de la persona no recaerá en un solo magistrado como actualmente, “que podía ser corrompido o sobornado”.
Estefanía Santillán explica que el primer juez va a vigilar toda la etapa de investigación para que todas las pruebas sean apegadas a derechos humanos, además otros tres jueces determinarán si efectivamente se cometió o no el delito.
De esta forma, ya no queda a la libre interpretación de un solo juez la culpabilidad o inocencia de la persona, hay una decisión colegiada, detalló la académica.
En estos momentos la constitución señala que la persona podrá ser juzgada por uno o varios jueces, y en el estado de Puebla, el Tribunal Superior de Justicia determinó que sean tres jueces.
Audiencias videograbadas
La constitución señala que una persona puede ser juzgada por uno o varios jueces y por cuestión de economía, la federación determinó que sea un solo juez, pero para salvar esa situación concede la grabación de las audiencias por ello, todo el procedimiento será videograbado.
A partir del 18 de junio, cada una de las etapas procesales tendrá que ser registradas en audio y video, así se busca evitar que los detalles que se ventilan ante un juez, reconstrucción de los hechos o documentos se omitan o se dejen de lado al momento de emitir la sentencia.
“Si el juez omite algún dato se puede impugnar el hecho ante el magistrado. Es un sistema completo, sistema que busca proteger al inocente”, asegura Santillán Huerta.
Plazo para sentencia
En lo referente al plazo de las sentencias, ahora se establecen tiempos para que sea sentenciada una persona.
En el caso de un delito que amerita una pena menor a dos años, el juicio debe durar máximo cuatro meses; cuando la pena carcelaria es mayor a dos años, el plazo límite para dictar la sentencia es un año.
Es preciso señalar que pueden ampliarse los tiempos a petición del imputado de acuerdo a los recursos que se interpongan.
La reparación del daño
Para las víctimas se cambia el trato ya que anteriormente eran utilizadas para lograr la sentencia del acusado, “eran el pretexto para enjuiciar a una persona, y no había la reparación del daño que era lo que importaba. En muchas ocasiones, si el delito era un daño material de poco importaba mantener a la gente en la cárcel”.
Uno de los objetivos del Nuevo Sistema de Justicia Penal es lograr la reparación del daño de tal suerte que si el imputado quiere tener un beneficio, el primer requisito es que repare el daño a la víctima.
Capacitación
Con el nuevo sistema los abogados deberán especializarse para llevar los casos conforme a las nuevas reglas; así mismo los agentes ministeriales deberán estar capacitados para llevar a cabo las investigaciones.