El gobernador, Miguel Barbosa, se pronunció por “instituciones sanas”, por ello es que exhortó al Senado de la República a que el nombramiento del magistrado del Tribunal Electoral del Estado de Puebla (TEEP) sea por su capacidad y profesionalismo, sin intereses políticos de por medio y que no sea una persona que represente un riesgo para el estado.
“Llamo a las dos senadoras y al senador poblano a que busquen eso, que el nuevo integrante o la nueva integrante del TEEP sea una persona de alto perfil, conocedora del derecho en materia electoral que no esté ligada a intereses políticos y que no esté ligada a intereses obscuros, sería muy riesgoso que se designará por el Senado por intereses personales y políticos a personas de riesgo, personas de riesgo”, dijo el mandatario local.
El jefe del Poder Ejecutivo Estatal confió en que la decisión del Senado de la República será favorable para el estado, pues dijo que se deben fortalecer las instituciones y deben ser sanas, por ello resaltó la importancia de que el próximo magistrado electoral sea una persona de alto perfil.
El gobernador, no se pronunció a favor de ningún perfil para ocupar este cargo que decidirá el Senado de la República; sin embargo, en la lista de los aspirantes esta Fredy Erazo Cortés, quien es defensor de Cristian N. alias “El Grillo”, quien desestabilizó el día de la jornada electoral en 2018, cercano al senador Alejandro Armenta Mier.
“Siempre el Senado ha tomado decisiones basadas en el análisis profesional de los perfiles que valora para sus nombramientos, el Senado tienen atribuciones para designar mediante voto a los integrantes de un gran número de órganos en el estado (…) Yo pido al Senado de la República que asuma esta función de designar este espacio como se le caracteriza al Senado, con reposo, madurez y alto profesionalismo”, dijo el mandatario local.
Barbosa Huerta, recordó que luego de las reformas electorales en 2013 y 2014 se quitó la facultad a los Congresos locales para el nombramiento de magistrados electorales, con ello garantizar que el gobernante en turno no pusiera a sus allegados en este cargo.