Al señalar, “nunca pensé regresar a Puebla y decirles, se los dije, teníamos razón”, la activista Olimpia Coral Melo, reclamó al Congreso de Puebla, no haber votado por la ley que lleva su nombre y bajar la mano por otras como la despenalización del aborto.

Olimpia Coral, una de las 100 mujeres más influyentes del mundo en 2021 por la Revista Time, asistió al Congreso de Puebla, recinto desde donde inició su labor para penalizar la exhibición de imágenes intimas en redes sociales sin consentimiento de lo que fue víctima.

Al recibir la Presea Alba, por la Asociación de Mujeres Periodistas y Escritoras de Puebla (AMPEP), recordó los años difíciles en que estuvo tocando puertas, luego de que fue tendencia en el municipio de Huauchinango, de donde es originaria, por un video íntimo publicado en redes sociales.

Por su parte, el presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política del Congreso del Estado, Sergio Salomón Céspedes, reconoció que se ha avanzado en materia de defensa de la mujer, pero falta mucho camino.

“Buscaré generar esa conciencia que nos permita entender que hoy no hay más ni menos, que caminamos a la par y somos exactamente iguales”, añadió.

“Que tribuna complicada me acaban de dejar, un escenario de muchas emociones (…) me compromete mucho más, me movió muchísimo”, dijo en referencia al mensaje de Olimpia Coral.

“Parte de nuestra visión desde la empresa, activismo y responsabilidad pública es ser felices, identificándonos con las causas y pueblos (…) creo en la política y México y que los responsable s de los derechos de las mujeres sea un ejercicio cotidiano, más que una lucha, que ya está”, dijo.

“Tenemos como varones hacerlo valer, para que su ejercicio sea natural y no una obligación”, sostuvo finalmente.

La lucha de Olimpia Coral

“Es difícil venir a Puebla es complicado hablar en este Congreso”, dijo al referir que ha hablado en los 32 que hay en todo el país, pero entrar y hablar en el edificio ubicado en la 5 Poniente, le generó una mezcla de sentimientos.

“No es lo mismo hablar en otros congresos y regresar y volver a hablar en este Congreso, en el que luchamos no sola, sino con mis compañeras feministas”, dijo.

“Nuestra idiosincrasia, el colonialismo se ve bonito en las paredes, pero no se ve bonito en la represión a las mujeres”, sostuvo.

Recordó que cuando luchaba por la Ley Olimpia, un legislador, sin decir su nombre, pero que tenía su oficina del lado izquierdo de la planta de arriba, le dijo, “entonces ya no voy a poder mandar mis packs” a lo que respondió enfurecida: “ya no diputado, ya no”.

“Después ese diputado votó a favor, pero en su cabeza era un agresor, un barbaján un machista”, aseveró.

Señaló que en la sociedad aún está cegada a visibilizar los problemas de las mujeres.

“Ahora políticos de todos los partidos se quieren tomar las fotos. No es para nosotras, es para la causa, la ley Olimpia no es una lucha, es una reforma constante (…) No aspiro a que no haya todos los hombres en la cárcel, sino a que ya no haya más agresiones”, sostuvo.

“Para mi esto es justicia, yo no pude denunciar la misma ley, pero antes mi nombre estaba relacionado con un video sexual, ‘la gordi buena’ de Huauchinango”, dijo.

De esta manera, invitó a dejar un lado a un sistema tan doloso de patriarcado en los partidos políticos, “dejen de encubrir a los agresores y se deje de pensar que la mujeres son las acompañantes, las segundas”.

Recordó que cuando difundieron su video sexual, era un domingo e iban a ver una película con su familia, cuando su hermano de 14 años entró y dijo “ahí está el video de mi hermana”, muy enojado.

“Le pedí a mi mamá que no lo viera, mi madre con escuela trunca y abuela con condiciones paupérrimas, se pusieron a llorar, por lo que les pedí perdón a toda la familia”.

Dijo que incluso les pidió una cirugía plástica para no ser reconocida y hasta salir del país, ya que se sentía muerta y quería desaparecer.

“Pensé que me iba a golpear y correr, porque sentía que lo merecía, pero mi mama Josefina Cruz, hasta con su educación machista me preguntó, ¿tu querías que se burlaran y todos lo vieran? Entonces tú no tienes la culpa. Fue la primera persona en todo el mundo que no era culpable”.

“Tú no hiciste nada malo, nada que otras personas lo hagan, todas y todos lo hacemos, solo que a mi no me ven y a ti sí, no es un crimen (…) ese día conocí la sororidad”, dijo al pedir a la nueva legislatura ser como su mamá.