La presidenta de la Comisión de Igualdad de Género en el Congreso del Estado, Xel Arianna Hernández, advirtió que las iniciativas a favor de las mujeres aprobadas por la anterior legislatura están quedando en letra muerta porque no se aplican, e indicó que un ejemplo en la llamada Ley Sabina, referente a los deudores alimentarios.

Expuso que asumió la responsabilidad de encabezar la Comisión de Igualdad con muchos altibajos, el encabezar una lucha histórica de muchas mujeres, y ser parte de un gobierno progresista que está enfocado en ayudar y mejorar las condiciones,

En su segundo período como legisladora local, advirtió que las reformas que se aprueban se quedan en letra muerta, se quedan en el texto, y aunque sea la mejor redacción no se aplica, y habido una falta de atención como legisladores en dar seguimiento a la aplicación  y resultados.

“Se criticó la legislatura pasada de que había una merma en el trabajo legislativo, el rezago, pero si ni siquiera se pudo dar seguimiento a las que sí se aprobaron hay un vacío importante”

Xel Hernández dijo que se debe tener esas áreas de oportunidad, y cumplir con las condiciones, no sólo es la investigación previa, la formulación de la ley, la socialización de esta, la viabilidad presupuestaria, la viabilidad sistémica y política, sino la ejecutiva, hacia dónde va caminando

“No sólo es el pedir que todas las mujeres tengamos ciertas condiciones, sino que circunstancias tienen que generarse desde la parte institucional para que realmente se cumpla la ley”

Recordó que en la primera sesión se presentó una iniciativa junto con colectivo por el tema de los deudores alimentarios, pero al platicar, con ellas se indicó que la Ley Sabina se aprobó hace más de un año, y habla del padrón nacional, que busca evitar que tengan ciertos privilegios.

La reforma determina que los deudores no pueden obtener licencias de conducir, adquirir inmuebles, ser candidatos, pero no hay el padrón, nadie ha tomado la responsabilidad de aplicarla

La presidenta de la comisión señaló que hay que impulsar las acciones afirmativas para que las fiscalías y la parte jurídica puedan actuar.

“A pesar de que en el texto se lee muy bien, son leyes conciliadoras, nunca va a llegar a buen puerto si no hay un seguimiento ejecutivo sobre quién lo va a hacer, cuándo se aplicará, el tiempo para aplicar”.

Advirtió que eso ha sido en general, no sólo de la anterior legislatura, sino de las pasadas donde se aprueban leyes, pero no se aplican.