A pocos días de la inédita elección del Poder Judicial en Puebla, los especialistas en opinión pública Melva Navarro y Elías Aguilar advirtieron sobre una baja participación ciudadana y un preocupante nivel de desinformación. Durante su intervención en la mesa de análisis del noticiario Informe 96 de Cadena IN, ambos coincidieron en que esta votación corre el riesgo de convertirse en una elección “a ciegas”.
“Mi intuición, respaldada por los datos, es que la participación rondará el 15%”, estimó Aguilar. De ese total, explicó, apenas un 5% correspondería a voto ciudadano auténticamente libre, mientras que el resto será movilizado por estructuras institucionales.
Navarro alertó que el desconocimiento generalizado sobre el proceso se agrava por la proliferación de noticias falsas y discursos simplistas. “Durante esta campaña circularon frases como ‘los diputados no sirven para nada’ o ‘un consejero es dueño de un hospital’, sin sustento alguno. Este tipo de narrativas propician un caldo de cultivo para la desinformación”, señaló.
Ambos encuestadores subrayaron que la ciudadanía no tiene claridad sobre qué se está eligiendo. “Esta será una elección a ciegas. No solo por el resultado, sino porque muchas personas votarán sin saber exactamente por qué o por quién”, sentenció Aguilar.
Uno de los pocos elementos que podría influir en una mayor participación es el esfuerzo individual de los candidatos por movilizar a sus entornos personales. Sin embargo, Navarro fue clara: “Eso puede mover un poco la aguja, pero no será significativo”.
También se destacó la desigualdad entre los aspirantes. “Muchos de ellos son funcionarios en activo del Poder Judicial, lo que les impide hacer campaña durante su jornada laboral. Son perfiles técnicos, sin exposición pública, lo que dificulta que conecten con el electorado”, explicó Aguilar. En contraste, perfiles mediáticos o con vínculos políticos —como el de Yasmín Esquivel— parten con ventaja.
Sobre la encuesta de Consulta Mitofsky que proyecta una participación del 27% al 28%, Aguilar fue tajante: “Me parece una locura. Tal vez en estados como Veracruz o Durango, por inercia, podría acercarse, pero no es un escenario probable en términos generales”.
Finalmente, Navarro advirtió que la multiplicación de encuestas contradictorias publicadas por distintos medios ha mermado la confianza de la gente en esta herramienta. “Hoy hay mucha incredulidad hacia los ejercicios de encuestadores”, concluyó.