Steve Jobs trabajó junto con el diseñador francés Philippe Starck en su yate personalizado. Un año después de su muerte, Venus ya navega los mares, reportó el blog One More Thing, dedicado a cubrir las últimas novedades sobre Apple.
Tal vez lo más singular de la nave es que está controlada por iMacs de 27" ubicadas en la sala de control. El barco tiene un largo de 80 metros y una gran terraza.
Todos los que trabajaron en el barco recibieron una carta de agradecimiento y un iPod Shuffle como regalo de la familia Jobs. Aún no se sabe cuál será el destino de la embarcación, pero el confundador de Oracle, Larry Ellison, uno de los mejores amigos de Jobs, podría sumar la nave a su colección de lujosos caprichos.
Walter Isaacson, autor de la biografía del Jobs, contó que en una de sus entrevistas con él , pudo ver modelos y dibujos de la arquitectura del barco. "Cómo esperaba, su diseño era elegante y minimalista. Como si fuera una tienda de Apple, las ventanas de la cabina eran gran paños de vidrio", contó Isaacson.