El punto de contacto es en la ciudad de Tehuacán, en la misma Plaza de Armas.
Un hombre desconocido llega respondiendo a una llamada de celular, lleva en la memoria el catalogo de armas de fuego, de cualquier tipo; desde pistolas Pietro Beretta hasta rifles de asalto, metralletas y cartuchos, y por si el cliente no se convence también lleva los precios de drogas, todas por kilo.
En esa misma reunión se aclara el costo de las armas y las drogas; como se trata de una operación de “mutua confianza”, una vez que acuerdan el pedido y presentan las cuentas, el dinero es entregado en otro lugar, donde el cliente va a recibir solo una contraseña.
El siguiente punto para recibir “el pedido” es en algún punto de la 46 Poniente, en la zona de autopartes.
El único requisito para recibir lo comprado es dar clave y todo está listo, en cuestión de minutos aparece el pedido y todos se retiran del lugar; fue una operación limpia.
Se me olvidaba comentarle que en ambas transacciones son policías deshonestos los que vigilan que todo transcurra con normalidad.
Son tiempos violentos.

Es oficial, El Rodeo fue clausurado
La tarde del miércoles el dueño del “antro” El Rodeo, ubicado en la 13 Oriente 212 —perdón por decir que era en la 9 Oriente—, se encontraba a bordo de su camioneta; estaba molesto y no daba crédito a los sellos que le imposibilitaban ingresar a su negocio y que indicaban que la clausura iba en serio.
Un día antes un grupo de inspectores llegó al lugar y tras un breve diálogo el “antro” no abrió sus puertas; ayer fue oficial: lo clausuraron.
Fue el segundo día de tranquilidad para los vecinos.
Una mujer que constató que los sellos eran oficiales, recordó cuando dos de sus hijas fueron perseguidas hasta su domicilio y golpeadas por clientes del “antro”, de la porra del Puebla, quienes salieron del Rodeo eufóricos y no sabían con quien desquitarse.
Nadie sabe cuánto tiempo permanecerá el “antro” con las puertas cerradas, los vecinos estarían gustosos de que el presidente municipal de Puebla llegara a visitarlos y les preguntara que les había parecido la clausura, la respuesta es que pedirían que esta fuera definitiva, que le pidan al dueño que traslade su negocio a otra parte.
La vecindad donde se ubica El Rodeo forma parte de muchas casas que por su antigüedad y por las recientes lluvias sería un riesgo que siguiera funcionando; Protección Civil lo puede comprobar.
De hecho, cuando inició El Rodeo, en esa vecindad había muchas familias que a base de intimidaciones fueron obligada a salir, luego el negocio de “giros negros” se extendió.
Lo demás ya lo sabe el lector.
La pregunta es ¿qué tiempo permanecerá cerrado el “antro”?

El correo de los muertos
Formal prisión a médico por negligencia
“Auto de formal prisión para el Dr. Alfonso Pedraza Aguilera.
”El proceso penal 149/2010 por lesiones y responsabilidad profesional contra el ortopedista Alfonso Pedraza Aguilera ha empezado a tomar un camino apegado a derecho, negado durante los cinco años desde que mi denuncia penal y/o querella fue presentada.
”Actualmente, luego de haberse librado la orden de aprensión contra el Ortopedista que me incapacitó de por vida, el Juez Primero de lo Penal en Puebla ha dictado auto de formal prisión contra el Dr. Alfonso Pedraza Aguilera, responsable de las secuelas que en mi humanidad dejó su falta de previsibilidad medica.
”El juicio se llevará a cabo en el Juzgado Penal Número uno de Puebla, la razón permitirá conocer la verdad historia de una negligencia médica protegida por la administración anterior mediante desaseos judiciales, tráfico de influencia y omisiones generalizadas.
”El Dr. Pedraza Aguilera, de lo único que puede enorgullecerse es de que gracias a su negligente actuar como médico, se formará la Asociación de víctimas de negligencia médica e impunidad judicial.
”Ya Cesamed Puebla dio su Dictamen Médico Pericial a petición de autoridad, ratificación y ampliación del mismo, se sometió a interrogatorio a los asesores de Cesamed por el presunto culpable y por el propio Ministerio Publico y el medico legista clasificó las lesiones, lo que originó, por segunda ocasión su consignación ante el Juzgado Primero de lo Penal, quien encontró bases para dictar el auto de formal prisión contra quien se alejó de la Lex Artis de la medicina en 2006, en prejuicio de mi salud.
“Gustavo Adolfo Vargas González.”

Hasta aquí la carta.
Nos vemos cuando nos veamos.

Twitter @PonchoPosa