El pasado jueves con el partido entre el Puebla de La Franja y los Lobos BUAP terminó con el ajetreo del césped del estadio mundialista por los próximos 15 días, ya que al terminar dicho encuentro un grupo de cinco ingenieros agrónomos tomaron por asalto la cancha para realizarle un trabajo profesional a fondo y tratar de tenerla en condiciones para el inicio del torneo, por eso esta no será utilizada ni para entrenamientos y mucho menos para partidos hasta el 30 de julio, ciando el equipo universitario reciba a su similar de Cruz Azul Hidalgo, y para que un día después La Franja le haga los honores al equipo de Pachuca en la jornada dos del próximo torneo.
Reparar la cancha del Cuauhtemoc no es cualquier cosa, el estadio tiene 45 años de construido y a la cancha en los últimos 18 años no se le invirtió un solo peso, con excepción de los clásicos remiendos con tierra que partido a partido le aplican. Es un hecho que los drenajes de la cancha ya no sirven, o están tapados o destruidos, y es lógico, imaginándose la tecnología de hace casi 50 años. Me comentaban que este grupo de agrónomos trabajará sobre el césped durante todo el año futbolero que se avecina, y la intención es que para el próximo receso largo esta sea levantada en su totalidad, se le instalen drenajes nuevos y, por supuesto, nueva tierra y nuevo pasto para tratar de volver a ver esta cancha como lo que algún día fue, una de las mejores de México. Ojalá el proyecto logre aterrizarse, sobre todo porque la inversión superaría los 4 millones de pesos.

Puebla, completo
Finalmente La Franja logró la incorporación del centro delantero colombiano Duvier Riascos y con su llegada a la Angelópolis el equipo está listo en su totalidad; ahora veremos si tanto este colombiano como el español Luis García son capaces de rendir de inmediato o tendremos que esperar algunas fechas para verlos en plenitud, ojalá sea para el próximo sábado cuando La Franja visite a los zorros del Atlas en el estadio Jalisco a las 20:45 de la noche, y qué importante será empezar con el pie derecho en un torneo que, como se recordará, no tendrá grupos y calificaran los ocho primeros de la tabla, sin olvidar que es de imperiosa necesidad sumar lo suficiente para alejarse de una vez por todas del fantasma del descenso donde por cierto el Puebla está a 11 puntos de distancia de los Tecos, que ostentan el farol rojo junto con los Xolos de Tijuana, los recién ascendidos. Suerte Puebla, el próximo sábado.

Lobos BUAP
Los que han sufrido una metamorfosis importante son los universitarios, quienes ahora tanto en lo futbolístico como en lo personal se comportan como un verdadero equipo profesional. La personalidad de Silvio Rudman y su cuerpo técnico se reflejan en los jugadores, quienes por cierto el sábado pasado le dieron un baile a Veracruz en el puerto; aunque el marcador terminó 1-1 quedó constancia que si los muchachos continúan por el mismo camino tendrán posibilidades de ser protagonistas en el próximo torneo, sobre todo ahora que podrán tener al central Méndez y con los delanteros Jair García y Diego Ceballos. Ojalá y ahora si los cuadros poblanos pongan en alto el nombre de nuestro estado.
Nosotros, como siempre, seguiremos en línea.
Hasta la próxima.