El lugar no podía ser más discreto: la casa del hijo del empresario José Chedraui que se ubica en el exclusivo club de golf Las Fuentes, residencia —por cierto— muy cerca de la que fue casa del exgobernador Melquiades Morales Flores.
El precandidato del PRI a la Presidencia de la República se sentó con los principales hombres de negocios de Puebla, para platicar sobre diversos temas y compartir el pan y la sal.
Sólo fueron 18 hombres los que estuvieron en la mesa, entre ellos José Cobián, José Cernicciaro hijo, Manuel Veana, Angélica Ramírez, Julián Ventosa Tanús, José Balderrama, José Huerta, Gilberto Marín Quintero, Manuel Espinosa Maurer, Arturo González Ayub —yerno de Carlos Slim, el hombre más rico del mundo—, Héctor Sulaimán Safi, Jorge Estefan Chidiac, Juan Carlos Lastiri Quiros y, por supuesto, los anfitriones José Chedraui, padre e hijo.
El menú consistió en risotto, sopa de tomate, filete mignon y de postre pastel de chocolate con helado de vainilla.
Los temas que se trataron en la reunión fueron seguridad pública, educación, reforma fiscal e infraestructura.
La reunión se llevó a cabo en muy buen ambiente y los asistentes quedaron más que satisfechos con la charla que tuvieron con el hombre que encabeza las preferencias en este momento rumbo a Los Pinos.
Peña causó una buena impresión, sobre todo porque se bajó de su nube, vino a Puebla muy sencillo, se dejo querer y apachar por su fans, lo que sin duda abonó en el ánimo de sus seguidores.
Además de haber tenido esta comida privada con parte de los empresarios más importantes de Puebla, Peña Nieto también tuvo un encuentro con los representantes de los medios de comunicación de Puebla, en donde también lo que más destacó fue su sencillez: saludó de mano uno por uno a todos los presente y se dejó ver tranquilo en su charla, la cual remató pidiendo el apoyo para cuando oficialmente inicie la contienda electoral.

Peña y Agüera
Muy pocos pudieron notar que Enrique Peña Nieto realizó el viaje de traslado del hotel Presidente Intercontinental hacia el Centro de Convenciones acompañado del rector de la UAP, Enrique Agüera Ibáñez, con quien platicó largo y tendido.
El PRI en Puebla ya entró a los tiempos de las definiciones, y sin duda que el encuentro y la charla privada que se registró entre ambos personajes tendrán sus repercusiones.
Se espera que el próximo lunes ya haya una definición en torno a la candidatura del PRI al Senado de la República, para que el próximo día 21 de este mes se registre el candidato de unidad por parte de este instituto político.
La charla entre Peña y Agüera dará luz en breve de cómo quedará finalmente la fórmula de este instituto político rumbo al Senado de la República.
En el encuentro que Enrique Peña Nieto tuvo con la estructura del PRI en el Centro de Convenciones, el más ovacionado por los cuadros del tricolor fue el excandidato a la gubernatura y operador peñista Javier López Zavala, a quien se le vio todo el tiempo con una sonrisa de oreja a oreja. Seguramente algo sabrá.

El negrito en el arroz
La mala nota de la visita de Peña Nieto a Puebla fue el trato que se le dio a los dirigentes estatales de los Partidos Verde y Nueva Alianza, quienes fueron marginados de las reuniones con el que también es su precandidato.
El líder estatal del Partido Verde, Juan Carlos Natale, intentó ingresar a la reunión con los cuadros representativos del tricolor y no fue admitido, por lo que se tuvo que retirar, luego de que el propio Juan Carlos Lastiri Quirós le dijo que no tenía lugar para él.
Se supone que Peña no sólo es candidato de los priistas, sino de una coalición conformada por tres fuerzas políticas. Queda la impresión de que los “aliados” no son tan cómodos para muchos priistas.