Sin duda que en la vida pueden más las ganas, el empeño, la dedicación, la humildad y el talento que el dinero, y si no analicemos la reciente historia de los Lobos BUAP, un equipo al que el rector Enrique Agüera siempre tuvo ganas de darle identidad por distintas razones. Durante su rectorado la escuadra tuvo altas, medianas y bajas, pero siempre con pocos recursos ha intentado hacer mucho; no es fácil competir en la Liga de Ascenso, una liga llena de intereses donde predomina el poder y el dinero, es prácticamente un hecho que si un equipo no tiene peso e influencias en la FMF difícilmente podrá ascender; qué le digo ascender, difícilmente podrá disputar una final, pues la UAP contra todo eso ha logrado instalarse en la final frente a un León que se mantiene invicto en la división y que es amplio favorito; y le decía que logró colarse a la final a pesar de la “mano negra” y el intento desesperado de la FMF de echarlos fuera al expulsarles injustamente al paraguayo Ramírez cuando jugaban los primeros minutos del partido, cuchillada que llamó a la indignación de inmediato en las redes sociales y que —por lo que aprecio— llegó a su destino pues poco a poco el arbitro fue bajando su intensidad de los universitarios, quienes a pesar de todo mostraron un valor y un corazón de león indomable que les permitió contra todo y contra todos meterse a la gran final de Ascenso.
Sin duda que la acertada contratación de Sergio Orduña cuando el barco se hundía fue más que acertada, las autoridades universitarias tenían una baraja de tres candidatos para sustituir a Poblete, quien acumulaba cuatro derrotas consecutivas; en esa baraja no estaba Orduña, sin embargo me platican que antes de tomar la decisión el entonces tesorero general de UAP, Alfonso Esparza, se dirigió a la oficina del rector Enrique Agüera, ahí platicaron y analizaron las tres opciones que tenían; dicen que en la plática Esparza le recordó al rector los buenos momentos que tuvieron con Orduña y él le cuestionó por qué no estaba entre los candidatos; “es caro”, le contestó Esparza, “búscalo y explícale la situación”. Para entonces Orduña no tenía equipo, pues los Indios de Juárez —equipo al que dirigía— había sido desafilado de la FMF; en ese momento, quizás sin saberlo, ambos estaban tomando una decisión histórica en el rumbo deportivo de la universidad, Esparza convenció a Orduña y ahí inició esta bonita historia que ahora tiene a los universitarios en la final, una final en la que insisto tienen todo que ganar y nada que perder, lo cual vuelve a los universitarios un cuadro peligrosísimo, y cuando le digo peligrosísimo es en serio.
Desde aquí un abrazo, en especial a todos los chavos del equipo que han logrado darle a toda Puebla esta gran alegría, desde los de experiencia como Adrián, Zea, Jair hasta los mas jóvenes como Zárate y Ruiz Esparza, pasando por absolutamente todos.

De oro molido para La Franja
Bien decíamos que La Franja es un equipo impredecible, cuando pensamos que debe ganar pierde y viceversa. El sábado se metieron al “Volcán” a enfrentar a unos Tigres que se mantenían invictos en su terruño durante 26 partidos; se dice fácil pero créame que es una cifra difícil de superar, todo marchaba digamos dentro de los parámetros normales; al medio tiempo Tigres se encontraba al frente 1-0, nadie en su sano juicio siquiera pensaba que Puebla pudiera rescatar por lo menos el empate, sin embargo conforme transcurrían los minutos poco a poco los Camoteros ganaban terreno y cuando el partido estaba a seis minutos de terminar vino un centro preciso desde la banda izquierda por parte de DaMarcus al que Luis García empalmó con la testa de manera brutal, para vencer al portero Palos y decretar el empate; con eso los aficionados poblanos nos dábamos por bien servidos, sin embargo cuatro minutos después un buen pase de Lucas Silva a Landín dentro del área le permite jalar la marca de la defensa y dejar solo al “talismán” Aarón Padilla, por lo que sólo tuvo que puntearle la pelota para que este concretara el 2-1 que a la postre le dio a La Franja tres puntos de oro que lo ponen en 19 al término de la temporada, y de alguna manera lo que parecía una temporada desastrosa bajo el mando de Osorio terminó siendo una regular donde gran mérito tuvo el DT uruguayo Daniel Bartolotta quien consiguió 11 de los 18 puntos que disputo, lo cual seguramente le dará la continuidad en el puesto para la próxima temporada y lo mejor que ante esta victoria de oro vino la derrota del Atlas y del Atlante, lo cual nos permite mantener una distancia de 10 puntos con los Rojinegros, de 5 con Querétaro y un empate en puntos con Atlante, para enfrentar el próximo torneo en cuestión porcentual, torneo donde por cierto La Franja tiene que armarse inteligentemente y solo contratar lo necesario —pero de nivel—; de eso estaremos dando cuenta en las próximas entregas.
Nosotros, como siempre, seguiremos en línea.
Hasta la próxima.