Hace unos días llamó mi atención el escándalo que generó la remodelación de la residencia oficial del gobernador de Zacatecas, quien gastó 20 millones para darse una serie de lujos verdaderamente absurdos.
Al leer esta nota, de inmediato vino a mi mente la remodelación de Casa Puebla, la cual costó nada más y nada menos que 66 millones de pesos. Sin duda, el gober zacatecano es un niño de pecho comparado con los excesos del Señor de los Cerros.
Si los 20 millones que gastó el priista norteño parecían excesivos, ¿qué pensarían que el Ejecutivo poblano hubiera gastado más del triple en su residencia?
Esta semana Reporte Índigo presentó un reportaje titulado “El Bellagio de Zacatecas”, en el cual detallan los gastos de remodelación de la residencia oficial del gobernador de ese estado, quien destinó 20 millones de pesos para este fin. La información de este medio describe los lujos con los que fue transformada la casa del gobernador Miguel Alonso Reyes, entre los que destaca una réplica exacta de la suite presidencial del hotel Bellagio de Las Vegas.
Para consuelo de los zacatecanos, debemos decirles que tienen un mandatario austero comparado con los millones que pusimos los poblanos para la casita de Los Fuertes. Digamos que la suite presidencial del Bellagio, de la residencia oficial de Zacatecas, nada tiene que ver con la habitación real del Palacio de Versalles que ahora tiene Casa Puebla.
Si querían presumirnos, créanme que los zacatecanos nos hicieron los mandados.

Los millones de Dégremont
Después de la revelación que hizo Intolerancia Diario respecto a los 2 mil millones de pesos que la empresa francesa Dégremont cobró durante una década por el tratamiento de las aguas negras de la ciudad, me parece que es necesario que el Congreso del estado abra una investigación a todos los funcionarios implicados en el mega-fraude ecológico.
Lamentablemente, los levanta dedos poblanos están más preocupados en seguir la línea oficial, que en levantar la voz respecto a este daño al patrimonio del estado.
Ojalá que alguien en el Congreso local tenga la dignidad para hacer valer su condición de representante ciudadano exigiendo que se abra el expediente negro de SOAPAP y Dégremont.

Agüera, entre líderes
A lo largo de su rectorado, Enrique Agüera logró convertirse en un referente nacional en materia de educación. Por cuarto año consecutivo, el rector de la Universidad Autónoma de Puebla se integró al selecto grupo de los 300 líderes mexicanos. El lunes pasado el rector asistió a la tradicional comida que se efectúo en el Museo Nacional de Antropología e Historia en la ciudad de México, donde el principal orador fue el presidente electo Enrique Peña Nieto.
No es casual que en cada proceso electoral el nombre de Enrique Agüera se baraje para ocupar un puesto de elección popular; sin embargo, el rector una y otra vez reitera su postura de trabajar en favor de la máxima casa de estudios. Esta labor le ha permitido que por cuarto año lo consideren en el grupo de los 300 líderes mexicanos por sus aportaciones al sector educativo, concretamente a la educación superior desde la universidad pública.
En la recta final de su rectorado, Agüera Ibáñez desecha cualquier especulación sobre su futuro, incluso ante la insistencia de los medios de comunicación de colocarlo como candidato para el proceso electoral de 2013, y reitera “a mí me gusta dormir bien y la mejor forma de dormir bien es no arrastrar el pasado y no complicarse con las especulaciones de futuro”.
Hoy por hoy, Enrique Agüera es una autoridad en materia educativa a nivel nacional, y esto le puede abrir nuevos horizontes a muy corto plazo.