En la sociedad actual, la naturaleza del trabajo sufre constantes cambios y alteraciones, por ello, uno de los principales y más acuciantes problemas que soportan las organizaciones empresariales es el relativo al bajo índice de productividad originado, entre otros muchos factores, por el estrés que afecta al capital humano de las mismas.
Se puede definir al estrés causado por el trabajo como las perjudiciales reacciones físicas y emocionales que se suceden cuando las exigencias del mismo no igualan las capacidades, los recursos o las necesidades del trabajador, situación que deriva en un deterioro de su salud.
Las organizaciones que gozan de éxito son aquellas que se consideran con capacidad suficiente para gestionar adecuadamente tanto los cambios internos como las modificaciones que se producen a nivel externo y, por supuesto, las que se anticipan, reaccionan y responden ante los nuevos problemas y retos que plantea la sociedad actual.
Para asumir dichos cambios y afrontarlos con total garantía es necesario preparar mentalmente al capital humano de las organizaciones, una de las tendencias y estrategias de éxito más recomendables consiste en introducir diferentes acciones de coaching especializado en los programas formativos de las empresas, bien de manera interna, dentro de las políticas de formación, o mediante un coach externo, especializado en dotar y proporcionar al grupo humano de la organización de herramientas de gestión completamente definidas y, sobre todo, de conducirlo hacia la búsqueda de soluciones específicas.
El coaching para el estrés se trata de una herramienta que capacita a las organizaciones para la gestión y el manejo adecuado del estrés.
El objetivo fundamental de esta variedad de coaching, se concentra, en el trabajador y en el ambiente de trabajo, estudiando la manera más favorable de afrontar las condiciones de trabajo y, consecuentemente, de mejorarlas. Inicialmente, identifica las causas estresantes y, posteriormente, diseña estrategias para reducir las causas identificadas, combinando un manejo global del estrés con un cambio menor o giro organizativo que intenta no afectar a la estructura corporativa de la organización.
El coaching incrementa la productividad, cohesionando la relación entre responsables y colaboradores, haciendo que se perciba más satisfactoria, reduce la rotación de los empleados, facilita la fidelización, el compromiso individual e identifica al trabajador con los valores corporativos, misión y estrategia de la compañía y, por supuesto, reduce el estrés en las organizaciones.
Hay muchos mitos que circulan sobre el terreno. En este artículo también quiero destapar tres de ellos para que pueda entender que tú necesitas para ayudarte a aprender las mejores estrategias de manejo del estrés y técnicas para tu situación particular.
Mito: Usted necesita ser psicoanalizado. El manejo del estrés es definitivamente la psicoterapia, psicoanálisis, o alrededor de tumbarse en un sofá de la discusión de sus más íntimos, profundos secretos. Son sólo simples aproximaciones directas a manejar los factores estresantes en su vida.
Mito: Usted tiene que hablar de su pasado y la niñez. En el coaching el manejo del estrés se enfoca en el ahora, no en su pasado. Un entrenador de manejo del estrés te lleva desde donde estás y te ayuda a avanzar en la que desea ir.
Mito: las Estrategias de Aprendizaje del estrés son complicadas. La mayoría de los métodos de control de estrés están diseñados para un aprendizaje rápido y no complicado. Usted puede aprender muchos de ellos en momentos, y salir por la puerta y utilizarlos en la vida real el mismo día.
Si usted necesita aprender a manejar el estrés mejor, ahora usted puede tomar una decisión informada acerca de a quién contactar para pedir ayuda, y cómo funciona el proceso. Buena suerte.