La Universidad Autónoma de Puebla vive horas definitivas para conocer cuál será su futuro, luego de que el rector de la máxima casa de estudios, Enrique Agüera Ibáñez, ha sido mencionado como posible funcionario dentro de alguna cartera de la próxima administración federal.
Al rector de la máxima casa de estudios en el estado aún le queda un año al frente de la UAP, entidad que ha administrado de forma eficiente durante casi nueve años, lo que lo convierte en el rector de la era moderna con mayor tiempo al frente de la universidad pública. Agüera supo consolidar el trabajo que sus antecesores abonaron en el tema no sólo académico, sino de gobernabilidad y también en el administrativo con finanzas sanas, salarios, prestaciones y pensiones aseguradas para sus trabajadores, lo que se dice fácil pero implica un trabajo de operación política perfecta.
El ciclo del rector al parecer llega a su fin y una nueva etapa se abrirá en la máxima casa de estudios en el estado. Este mes es sin duda definitivo para saber si el rector culmina su periodo o arriba un interino para cubrir el resto de su mandato. ¿Quién para suceder a Agüera? Todo apunta a que será Alfonso Esparza, el actual secretario general de la máxima casa de estudios, quien ante la eventual salida del rector se pudiera quedar al frente de la UAP y aprovechar toda su experiencia para posteriormente postularse para un mandato de cuatro años.
Obvio, todo esto supeditado a si el rector se incorpora el gobierno federal a través de una cartera en la Secretaría de Educación Pública o al frente de la Comisión Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt). En la UAP se respira un aroma de nostalgia, como todas las cosas en la vida: el ciclo del rector Agüera al frente de la UAP está por cerrarse, pero ahí quedará el legado del hombre que en un principio fue mirado con temor y hasta con cierta desconfianza por quienes creían que iba a ser imposible que pudiera superar lo hecho por Enrique Doger Guerrero.
Al paso de ocho años, la UAP es la segunda universidad pública en importancia en el país y ése es precisamente el patrimonio político que tiene en la bolsa Enrique Agüera y que lo hace hoy ser contemplado para estar dentro del gabinete de Enrique Peña Nieto. Noviembre es, pues, el mes de las definiciones para la UAP y para todos los universitarios.