Por primera vez en el proceso de selección del candidato panista a la presidencia municipal de Puebla aparece el nombre de Antonio Gali Fayad.
Antes del destape oficial, por parte de Gerardo Maldonado Balbanera, líder municipal del blanquiazul, Gali Fayad era visto con recelo al interior del panismo, principalmente por los grupos identificados con la ultraderecha.
La inclusión del secretario de Infraestructura del gobierno del estado, sin duda obedece a que Gali Fayad representa una opción real y viable para retener la alcaldía poblana, muy a pesar de que algunos grupos lo consideran parte del panismo que encabeza el gobernador Rafael Moreno Valle.
Otro personaje vinculado a este grupo es el secretario de Salud, Jorge Aguilar Chedraui, que también fue considerado por la dirigencia municipal del PAN, por puntear en las preferencias.
Del otro bando tienen posibilidades de alcanzar la nominación el empresario Franco Rodríguez y el secretario de Economía, Pablo Rodríguez Regordosa.
Prácticamente fueron desplazados del grupo puntero Ana Teresa Aranda y Fernando Manzanilla quienes, a decir de Maldonado Balbanera, redujeron su actividad.
Sin embargo, nada está dicho y en los próximos meses habrá una intensa pugna de los grupos panistas para definir al candidato que los represente en la proceso electoral 2013.

En el PRI también hay cuatro aspirantes
En el tricolor la calentura política va en aumento. Tres aspirantes ya oficializaron su inquietud por convertirse en el aspirante priista que recupere la alcaldía poblana.
La lista la encabezan José Chedraui, Enrique Doger, y recientemente Víctor Manuel Giorgana. Sin duda, los tres tienen serias posibilidades, sin embargo esa ventaja se desvanece ante el nombre de Enrique Agüera, que tiene una buen imagen y capital político que le garantizan ganar la elección de 2013.
Para fortuna de los tres, el rector de la UAP aún no muestra interés por participar en política. Según sus declaraciones, Agüera Ibáñez busca terminar el rectorado más longevo de la máxima casa de estudios.
Sin embargo, solo bastaría una definición política del rector para que las preferencias estén del lado de Enrique Agüera, pues con su trabajo al frente de la UAP demostró capacidad para llevar a la institución a los primeros lugares de las universidades del país.
Los tiempos de definición se avecinan.
Estaremos pendientes.