Si un personaje trabaja a marchas forzadas para que el PRD vaya en coalición con el gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle Rosas, en la elección del 7 de julio, ése es Graco Ramírez, mandatario estatal de Morelos, quien se ha convertido en el interlocutor entre el morenovallismo y las corrientes del Sol Azteca.
Ramírez recibió mucho apoyo de parte del gobernador de Puebla y de su gente para ganar el gobierno de Morelos, por eso ahora es tiempo de la reciprocidad. De ahí que busque el aval del consejo nacional del PRD, aunque en Puebla se oficializó la famosa alianza.
Fue en la casa del fraccionamiento Tabachines, donde Graco recibía constantemente a la gente del gobernador, junto con los respectivos apoyos, por eso ahora que “Los Chuchos” juegan con el presidente Peña Nieto y con el gobernador Moreno Valle, el mandatario de Morelos se ha ofrecido para ser el puente con los grupos perredista y lograr esta fusión de fuerzas.
El gobernador Ramírez es uno de los principales apoyos que tiene Rafael Moreno Valle en su plan por convertirse en 2018 en candidato de un frente amplio de fuerzas políticas para disputarle al PRI la Presidencia de la República, desplazando incluso al propio Marcelo Ebrard, con quien originalmente el gobernador de Puebla había pactado ir de la mano. Por cierto, el exjefe de Gobierno del Distrito Federal es otra de las viudas que dejó a su paso la caída de la maestra Elba Esther Gordillo.
Graco es el nuevo operador morenovallista ante las tribus perredistas, hambrientas de dinero y apoyos políticos.
El gobernador de Puebla no se amilana ante los desaires del gobierno federal que encabeza el presidente Peña Nieto y sigue adelante con sus planes.
Cuentan que cuando Moreno Valle se enteró de que no vendría a la inauguración del Tianguis Turístico sólo alcanzó a exclamar: “Así es como me gusta (…) escenarios difíciles, veamos quién puede más”.
Y es que el mandatario estatal no es de los que se achican ante la adversidad, y sigue adelante con sus planes, sobre todo para mantener el control del Congreso local, ente que considera clave para mantener la gobernabilidad, concluir sin sobresaltos su gestión y seguir adelante con el asalto a Los Pinos en 2018.
¿Cómo van las cosas en la zona conurbada?
En donde también las cosas se ponen interesantes es en los municipios de la zona conurbada de la ciudad de Puebla, un área de influencia que, sumada a la capital, agrupa a 42 por ciento del padrón total que podrá participar en la elección del 7 de julio.
En San Andrés Cholula, Leo Paisano —hermano del expresidente municipal de este lugar, Guillermo Paisano Arías— es el favorito para alzarse con la candidatura, ya que cuenta con el respaldo del actual presidente municipal, Miguel Angel Huepa Pérez, y del gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, quien a su vez también le dio el visto bueno a su primo para que sea el candidato a la diputación federal por la recién creada demarcación.
Por San Pedro Cholula las cosas están por definirse: el diputado federal Julio Lorenzini, quien hasta hace unos días contaba con todo el apoyo del gobernador Moreno Valle, al parecer ha caído de la gracia del mandatario, quien le ordenó a su cuñado y secretario de Gobierno, Fernando Manzanilla, cancelar un desayuno y la jornada de lectura que tenía programada hace ocho días en la milenaria ciudad.
Ahora la nueva carta que se comienza a perfilar por el morenovalismo es la de Fabián Jiménez, hermano del actual delegado de Economía, Juan Pablo Jiménez Concha.
En Huejotzingo, el camino se ha abierto para que posiblemente Acción Nacional pueda recuperar la plaza, con su aspirante Alberto Espinosa Guevara, quien encabeza las encuestas en esta zona, aunque como partido el PRI tiene la ventaja.
El problema estriba en que dos priistas se disputan a muerte la candidatura y ninguno está dispuesto a ceder en sus intenciones: se trata de Baraquiel Saloma Linares y Carlos Morales Álvarez, quienes están prácticamente en un empate técnico y su disputa le abre el camino al panista Espinosa.
En Amozoc las cosas son más o menos similares ya que, a pesar de de que la presidenta municipal de este lugar, Rosa Elva de Ita, es calificada con un tres por parte de la población, la balcanización priista hace factible que Acción Nacional o la alianza morenovallista repita en este lugar, ya que la mejor carta del PRI, Lorena Aldaco Ruiz, es constantemente golpeada por el resto de los aspirantes —que son 10—, lo que facilita el trabajo al gobernador y su gente.
El factor Graco

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