De acuerdo con el “Estudio de costo-beneficio del primer corredor troncal de la Zona Metropolitana de la ciudad de Puebla”, elaborado por la firma Logística, Informática y Transporte SA de CV (Logit), entregado al Banco Nacional de Obras (Banobras) para el tercer año de funcionamiento de la línea 1 del metrobús, este sistema de transporte lograría las siguientes metas:
“Meta 1: Movilizar 34.9 millones de pasajeros anuales, lo cual resulta de multiplicar la demanda promedio diario de 107 mil 758 pasajeros por los 324 días promedio diarios anules de operación.
”Meta 2: Incrementar el índice de pasajeros por kilómetro IPK a un nivel superior de siete en el corredor.
”Meta 3: Reducir el nivel de emisiones de gases efecto invernadero 25 mil 875 toneladas anuales.
”Meta 4: Incrementar la seguridad del usuario al menos en 75 por ciento del índice de siniestralidad promedio que registra la troncal.
”Meta 5: Incrementar el nivel de calidad de servicio al usuario a través de indicadores de satisfacción definidos en: (i) puntualidad, (ii) regularidad y (iii) limpieza”.
Qué lejos está el sistema RUTA de lograr estos objetivos.
En el plan nunca estuvo presente el escenario del fracaso del sistema y mucho menos que el gobierno estatal le arrebatará a los concesionarios —con la complicidad de los diputados locales el pasado martes en una sesión fast track— y autorizara que el morenovallismo interviniera el sistema de la RUTA.
Ayer a primea hora, a través del Carreteras de Cuotas Puebla, el gobierno estatal se apoderó de la línea 1. Sin duda, la reforma a la Ley de Transporte es un “traje a la medida” para resolver el quebranto financiero del sistema RUTA, en su línea 1.
La ley, en especial los artículos 72 Bis y 73 Bis, concentran la preocupación estatal por el “rescate” de la línea 1 de la RUTA, ante la inminente operación de las líneas 2 y 3.
El artículo 72 Bis señala que la secretaría y Carreteras de Cuotas Puebla tendrán la atribución de rescatar las concesiones por causa de utilidad pública o de interés general.
Además, el mismo artículo señala que en la declaratoria de rescate se establecerán las bases generales que servirán para fijar el monto de la indemnización que haya de cubrirse al concesionario, en los términos fijados en el reglamento.
En su primer día de operaciones, el gobierno estatal resaltó que “la intervención no tendrá costo para el erario; se recuperará con la operación del servicio”.
La administración estatal no señaló si le otorgará la concesión a otra empresa.
La administración morenovallista tampoco informó cuánto pagará por la indemnización de los concesionarios de la línea 1.
Veremos en que para toda esta restructuración.
 
Daños colaterales
Ante la forma poco aseada del gobierno estatal para apoderarse de la línea 1 del sistema RUTA, se interpusieron cerca de 200 amparos antes juzgados federales.
Los concesionarios buscan protegerse ante la instalación de la línea 2 de la Red Urbana de Transporte Articulado (RUTA), que circulará en la 11 Norte-Sur y evitar correr la misma suerte que sus colegas de la línea 1. Los amparos buscan evitar que les quiten sus concesiones ante el cambio de derroteros, ya que sus unidades se convertirán en alimentadoras del metrobús.