1. Dicen en todo el mundo hispanoamericano, cuando alguna persona escandaliza sin razón de ser: “¿Para qué tantos brincos estando el suelo tan parejo?”.
2. La presidenta del Comité Directivo Estatal del PRI anunció a la prensa la necesidad de que el actual gobierno despidiera de su alto encargo al secretario estatal de nuestra seguridad personal, familiar y patrimonial, por razones conocidas: elevación de la inseguridad estatal a niveles insospechados, y excesos en diversos actos represivos destacando lo de Chalchihuapan.
2.1. También, sobre el mismo ciudadano afirmó públicamente la también congresista federal la necesidad de que las Procuradurías, en este caso la estatal y la federal, que dirige el señor Murillo Karam, iniciaran lo que cualquier “aboganche” de aldea como el que escribe conoce como la averiguación previa fase “A”. 
2.2. En concreto que se hiciera una denuncia de hechos con:
a) Los testigos del caso.
b) Anexando peritajes especializados.
c) Manuales de comportamiento represivo existentes desde hace milenios para las policías que ejercen la autoridad, los cuales fijan cuidadosamente el no exceso violatorio de garantías individuales de corte constitucional.
d) Seguramente para enriquecer este adobo, documentalmente se le agregarían notas de los medios masivos de comunicación, nacionales e internacionales, con las transcripciones de la social media (redes).
3. Todo este menaje el Ministerio Público después de un sesudo análisis lo consignaría ante un juez de lo criminal para que éste determinara la tipificación delictiva, en otras palabras, dictaminara la procedencia o improcedencia de la denuncia, esencialmente por exceso de sus funciones que pudieran atribuirle al responsable de la poblana seguridad.
4. La diputada federal por Ciudad Serdán antes llamada San Andrés Chalchicomula, no formalizó ante el MP su expresión, dejando sus palabras como una condena simple de carácter moral.
5. En la misma rueda de prensa la legisladora manifiesta que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (que tan cara nos cuesta a todos y cada uno de los mexicanos) recomendó una serie de actos gubernamentales de contrición para resarcir a los ojos de toda la nación los excesos de los actos represivos ejecutados en Chalchihuapan; solicitando moralmente que la inoperante comisión en todo caso envíe a la Suprema Corte de Justicia de la Nación toda la información de este caso para que ella intervenga.
6. Desafortunadamente para todos los estados de la república solamente la Suprema Corte de Justicia de la Nación intervendrá como investigadora de graves violaciones de derechos humanos (que muchos denominamos violaciones de garantías individuales), cuando un pueblo organizado, enardecido por las injusticias sufridas, dispuesto a todo lo demande. Éste no es el caso, pues la declaración de la fémina priista redúcese a una simple invocación a un ente antidemocrático capaz de enjuiciar a cualquier vecino mexicano, pero jamás hasta ahora a un detenedor del poder ganador en las urnas.
7. Ante estas demandas de simpleza verbal de la dirigente priista, diputados de la derecha con iracundia han lanzado una andanada de piedras verbales para defender según ellos la figura del Ejecutivo estatal, pues el inofensivo pronunciamiento no posee ningún campo específico, aunque convertido en “carnita” mediática, suple la ausencia de discusiones serias y polémicas congruentes, pues en el siglo XX el único debate nacional “fue entre dos titanes del pensamiento hispanoamericano: el teziuteco Vicente Lombardo Toledano, y el profundamente hispanista Alfonso Caso”.
8. Ideal sería para propiciar el camino presidencial a Rafael Moreno Valle Rosas que sus hombres de confianza organizaran foros públicos, universales y abiertos donde se discutieran “los caminos para el desarrollo”. Ante académicos, especialistas en áreas diversas, líderes de opinión y representantes del capital local, nacional e internacional, conoceríamos con rango esta forma de gobernar.
 
Nuestra casa
Respetable hasta este día es el hacer de la gobernación municipal angelopolitana.