1. Cuéntanme que en los primeros días de gobierno sexenal bartletiano el Ejecutivo estatal recibió a un amigo, el cual exaltó la honradez de un apadrinado (pariente suyo) para un encargo administrativo.
2.- El gobernador, ducho en esos menesteres, profundo conocedor del género humano gracias a la experiencia de sus múltiples encargos administrativos, sin dejar de gozar su “Pertagaz”, inquirió: “¿Y cuántos puestos ha tenido con presupuestos para su manejo?”.
El apadrinador contestó: “Ninguno”.
Sin expresar palabra alguna, el anfitrión dio por terminada la audiencia. El honrado recomendado no fue incorporado al servicio público sexenal por carecer de probanza sobre su moral.
3. Sale a colación lo anterior toda vez que Haiti y México tienen la misma posición de sus sociedades ante la corrupción: Todos los haitianos y los mexicanos la conocemos, pero nadie la ataca públicamente, esperando la oportunidad de practicarla algún día. Por cierto,rindo tributo al Dr. Elmo Olavarria Vargas, el cual, medio en broma, medio en serio, afirma que “es necesario implantar la democracia corruptora, el máximo de oportunidades de corrupción, para el máximo de mexicanos”.
4. Dejando la broma aparte, vuelvo a la tragedia nacional. El partido de acción nacional ejerció durante décadas una lucha infructuosa contra la corrupción gubernamental (sin tocar ni una hoja de la frondosidad corrompida-corruptora de los negocios privados); acompañando a esta frontalidad contra la obesidad administrativa de los gobiernos federal, provinciales y municipales.
4.1. Cuando llegó el PAN al máximo poder, que es la Presidencia de la República, con cientos de miles de trabajadores a su servicio, en lugar de limpiar los Establos de Augías, como Hércules, apóstoles de una nueva moral ciudadana, ahogaron a nuestra patria en corrupciones inconcebibles en otras sociedades más honestas que la nuestra.
4.2. Así fue como la Auditoría Superior de la Federación encontró el desvío de “66 mil millones de dólares” faltantes de comprobar, provenientes de la venta petrolera.
4.3. La explicación ofende: dizque se aplicaron al gasto corriente durante cuatro años foxistas y dos calderonistas.
4.4. Otra notable desviación es la adolescencia comprobatoria de 400 mil millones de pesos mexicanos, también generados por la renta petrolera, pues el oro negro alcanzó precios extraordinarios.
5. Culminan estos grandes asaltos panistas al tesoro nacional cuando crean 120 mil nuevas plazas de trabajo en la burocracia federal, donde todos y cada uno de los ingresados es miembro comprobado de ese partido blanquiazul.
6. Este año la prensa escrita y digital nos regala dos perlas más del océano de moralidad del panismo.
7. Una es que un líder panista —legislador, por cierto— haya sido acusado de cobrar el “diezmo” (10%) a presidentes municipales de su mismo agrupamiento, por fijar diversas asignaciones presupuestales. Esto es intrascendente por cuantía ante los ejemplos de Pemex. Es peccata minuta, pero es injusto el robo al tesoro público existiendo tanta miseria como la vemos en las calles.
7.1. La otra perla nos dice que la Estela de Luz, erigida en el DF, haya desvanecido cientos de millones de pesos en la obscuridad de la contrata privada realizada entre panistas del más alto rango.
7.2. Menciono también para el anecdotario ético y moral de estos asaltantes del poder a los simpatiquísimos hijos de Martha Sahagún, los cuales primero hicieron negocios inmobiliarios, y en Pemex; pero morralla es en comparación a lo escaso sabido de hechos como los de enunciados.
Ahora, en los umbrales de una elección federal, el PAN, contando con la complicidad de todos los partidos políticos existentes, incluyendo el del señor presidente, en lugar de exhibirlos como corruptos y corruptores, admiten el resarcimiento de su imagen institucional, admitiendo formalmente que el PAN proponga la creación de un nuevo cuerpo burocrático dizque para combatir la corrupción.
Ho Allah —ojalá—, que ante las circunstancias nacionales de este día, el Poder Legislativo se porte con seriedad ciudadana para impedir la creación de cuerpos inútiles nacidos de acuerdos cupulares entre cómplices, y no por necesidades de la sociedad nacional.
 
Nuestra casa
Increíble la muestra gastronómica de la hotelería de capital poblano. Fortalece nuestro principio identitario.