Quien recibió con gran agrado la propuesta del presidente Enrique Peña Nieto de impulsar el mando único fuel gobernador Moreno Valle. Recordemos que él fue uno de los principales promotores de dicha iniciativa en el sexenio de Felipe Calderón.
Incluso, por la tarde, a través de su departamento de Comunicación Social, “bombardeó”, especialmente en redes sociales, el beneplácito que le ocasionó el anuncio del presidente Peña.
Si no me cree, retomó una frase que engloba a la perfección lo anteriormente dicho.
“Celebro que el presidente haya tomado esa iniciativa, porque me parece que cuando se habla de temas de seguridad no podemos permitirnos que se presenten las diferencias ideológicas o partidarias para poder impulsar el desarrollo del país”, musitó en Palacio Nacional.
Hasta aquí la cita obligada.
Ahora veamos el caso Puebla.
De aplicarse el mando único, éste recaería en la figura del maltrecho secretario de Seguridad Pública, quien no es otro que Facundo Rosas, un personaje con un negro historial a cuestas.
El Señor de las Balas encontró en este personaje al remplazo idóneo ante la salida de Ardelio Vargas. Y es que estos ven en la represión la única forma de mantener el control.
Ayer, el presidente Peña mencionó de una depuración de los cuerpos policiacos comenzando desde los municipios; sin embargo, en Puebla tenemos un alto funcionario con una larga cola que le pisen.
Recordemos que el 12 de diciembre de 2012, un operativo fallido en la Autopista del Sol dejó dos normalistas de Ayotzinapa muertos. El incidente le costó el cargo a Facundo Rosas, quien era director de la Policía Federal; sin embargo, la CNDH lo exoneró y nuestro personaje continúo bajo en el sequito del secretario de Seguridad Pública en el sexenio de Felipe Calderón, Genero García Luna.
Pero la historia no acaba aquí. En noviembre de 2012, Edgar Valdés Villarreal, “La Barbie”, escribió una carta en donde vinculó al funcionario morenovallista con el crimen organizado.
Aunque de manera muy breve, se menciona el nombre de Facundo Rosas. Las palabras son contundentes al afirmar que en esa carta “La Barbie” lo señaló como uno de los que recibía dinero del crimen organizado.
“Genaro García Luna, titular de la Secretaría de Seguridad Pública federal (SSP), quien cuando menos desde el año 2002, primero en la AFI y luego en la PFP, me consta que ha recibido dinero de mí, del narcotráfico y la delincuencia organizada, al igual que un grupo selecto integrado por Armando Espinosa de Benito, quien trabajaba con la DEA y me pasaba información; Luis Cárdenas Palomino, Edgar Eusebio Millán Gómez, Francisco Javier Garza Palacios (PF Colombia), Igor Labastida Calderón, Facundo Rosas Rosas, Ramón Eduardo Pequeño García y Gerardo Garay Cadena, quienes también forman parte y reciben dinero de la delincuencia organizada y de mí”, señala textualmente la carta de “La Barbie”.
Y recientemente, ya instalado en Puebla, el pasado 9 de julio ordenó el desalojo violento en la autopista Puebla-Atlixco, el cual le costó la vida al niño José Luis Tehuatle y dejó una docena de heridos.
Con estos antecedentes, Facundo Rosas se perfila para tomar de manera oficial el control de los cuerpos de seguridad en el estado, en donde la represión será su estandarte.
Si no, al tiempo.