Después de cuatro años de gobierno, pocos, ya muy pocos dudan de que el morenovallismo es un gobierno autoritario e intolerante al que no le gustan ni los contrapesos ni los disensos.
En este tiempo, el morenovallismo se encargó de acallar y aplacar cualquier movimiento que se opusiera a los proyectos del grupo en el poder. Fabricación de delitos y cárcel fueron utilizados contra los líderes que osaron desafiar al morenovallismo.
La clase política de los partidos políticos fueron alineados a los designios del Ejecutivo a cañonazos. Y así el morenovallismo logró controlar el Congreso local y sacar sin ningún problema todas sus iniciativas de ley, incluyendo la “ley Bala” y la “ley del Despojo”.
Sin embargo, en la actual Legislatura local, dos diputados se han caracterizado por oponerse a las iniciativas del ejecutivo: la diputada del PVEM Geraldine González Cervantes y Julián Peña Hidalgo, legislador del partido Movimiento Ciudadano.
Y el miércoles pasado, en la sesión, el bloque morenovallistas en el Congreso local hostigó a los legisladores que se oponen a las iniciativas del Ejecutivo. En específico, arremetieron contra la diputada del PVEM.
Los diputados morenovallistas, por segunda semana consecutiva, atacaron, en el pleno del Congreso local, a la diputada del PVEM Geraldine González Cervantes, que, junto con Julián Peña Hidalgo, legislador del partido Movimiento Ciudadano, ha votado en contra de las iniciativas del Poder Ejecutivo.
Ayer, ambos legisladores votaron en contra del Presupuesto de Egresos del gobierno del estado, por 67 mil 689 millones 255 mil 648 pesos, que se ejercerá en el 2015. La mayoría de los legisladores —36— sufragaron a favor, incluida toda la bancada priista. Tras la votación, Cirilo Salas Hernández y Pablo Rodríguez Regordosa, ante la complacencia de la presidenta de la mesa directiva, que violó el artículo 146 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo, arremetieron contra la legisladora del PVEM.
La diputada Geraldine González Cervantes denunció un bloqueo a las iniciativas que ha presentado; además, cuestionó a la presidenta de la mesa directiva, la diputada Sara Chilaca Martínez, quien violó la Ley Orgánica del Poder Legislativo al permitir que hicieran observaciones al punto de acuerdo para otorgar un subsidio para el transporte a estudiantes de escasos recursos.
En la sesión del 26 de noviembre, la diputada del Partido Verde Geraldine González Cervantes criticó la actitud de los diputados locales que ignoraron su iniciativa de crear la Fiscalía General de Atención de Delitos Sexuales y contra la Integridad Física de las Mujeres, pese a que Puebla es un “foco rojo”.
En esa ocasión, indicó que no es posible que los diputados locales pidieran un ajuste en su dieta para ganar más de 140 mil pesos, esto en la propuesta de presupuesto que presentaron, siendo que sólo les interesa atender las iniciativas que manda el gobernador.
Manifestó que hubo un acto de discriminación hacia las mujeres durante la sesión del miércoles, ya que los diputados que permanecían en la sala le dieron la espalda.
Comentó que quienes están en la Comisión de Equidad de Género mejor revisaban los mensajes en sus teléfonos, y los diputados de Acción Nacional abandonaban la sala.
Ni tardos ni perezosos, los legisladores morenovallistas Cirilo Salas Hernández y Pablo Rodríguez Regordosa subieron a la tribuna para descalificar y desdeñar las iniciativas de la legisladora del PVEM. Señalaron que tiene “aspiraciones políticas”.
Salas Hernández presumió que es maestro y que las anteriores autoridades no se preocupaban por mejorar las condiciones de las escuelas.
Pablo Rodríguez indicó que los diputados de la actual Legislatura no votan con línea y siempre analizan las iniciativas antes de votar.
Ese es el estilo de gobernar de los hombres que prometieron cambios y, sobre todo, erradicar los viejos vicios del extinto sistema político.