Decibeles, es decir, medirán desde la calle el ruido que producen en los reventones; y si sobrepasan esa medida, los multarán. En serio. Y si no acatan la norma, los clausurarán. Los obligarán a que levanten paredes que eviten que el escándalo que producen continúe agrediendo a los habitantes de los alrededores… (¿Escuchó, señor C. Paisano?).
La medida la tomaron en el DF para evitar daño en los oídos de los ciudadanos, y por respeto a la ciudadanía... ¿Escucho, señor Paisano?
Claro que hacer algo parecido a esto es un sueño guajiro, porque en San Andrés Cholula los que “cuentan” son los antros, el pueblo vale un comino —aunque dicen que nosotros, el pueblo—, les dice como gastar sus impuestos… ¿A quienes les preguntaron?
Tengo la sensación, vaya, la sospecha, de que a veces creen que el pueblo es idiota. En fin, me queda claro que eso del respeto no va con la “polaca” ni con sus partidos… todo es cosa de poder, de lana.
Empezamos el 2015, a ver cómo les va a ir con las votaciones, me temo que van a recibir hartos votos nulos con los que el pueblo les reiterará que ya nos tienen hasta la madre.
A propósito de 2015, tengo un amigo que además de ser catador de venenos y de los vinos de la Rioja, y de hacer galletitas de Santa Clara y camotes de guayaba, mata toros y pinta; aunque no se qué pensar al respecto de la calidad de su pintura, porque lo nombraron, según me cuentan, el pintor del año, el pintor del 2015…, quizá porque pinta “bien pinche”.
A propósito de “bien pinche”, ¿qué tal te cayó el aumento de 2.50 en la gasolina, lector querido? No se a dónde nos quieren llevar, pero a dónde sea que quieran llevarnos, nos los vamos a llevar entre las patas, ¡seguro!
PD: Por si no nos vemos, a pesar de ser el “año del pintor”, te deseo lo mejor de la vida para ti y tu familia…
