El escándalo generado por la filtración de los nombres de influyentes y poderosos mexicanos incluidos en la llamada Lista Falciani tiene con el alma en un hilo a innumerables políticos y empresarios, quienes enviaron dinero mal habido a través de diversas concentradoras internacionales de divisas, las cuales depositaron millonarias cantidades de billetes verdes en Suiza.
La famosa Lista Falciani es un documento extraído por Hervé Falciani, que contiene los nombres de unos 130 mil potenciales evasores fiscales con cuentas no declaradas en la sucursal en Ginebra (Suiza) del banco británico HSBC.
El ahora célebre Hervé Falciani es un informático extrabajador del banco, que la filtró en el 2009 desde su puesto de trabajo.
La buena noticia para el grupo en el poder en Puebla es que esta lista fue extraída en el 2009, lo cual deja excluido al morenovallismo, ya que por obvias razones su sexenio no está incluido.
En la lista, que supera los mil nombres de mexicanos, difícilmente veremos a algún miembro del selecto grupo morenovallista, y es poco probable ver a algún marinista, dada la condición aldeana de la mayoría de los beneficiarios del anterior sexenio.
No me imagino al prófugo Javier García Ramírez depositando las comisiones de obra obtenidos durante los seis años del marinismo, enviando sus millones a Suiza.
Si en algún lado están, seguramente es en una cisterna o dentro de unos colchones, pero no en el HSBC de Suiza.
A diferencia del marinismo, los alcances y las ambiciones financieras del morenovallismo son muy distintas.
El hecho de ser egresados de universidades bostonianas o de haber pasado por bancos neoyorquinos, por más modestos que sean, les dio una visión distinta.
Para ellos Suiza no es una estrella de otra galaxia ni un planeta lejano. Suiza es un lugar común, en donde la élite financiera mundial hacía reposar su dinero.
De ahí que para el círculo morenovallista sea una muy mala noticia que el escándalo de lavado de dinero y fraude fiscal haya rebasado todas las fronteras y haya abierto investigaciones internacionales que romperán los candados de las casas bancarias en de Suiza, las que hasta hace poco eran consideradas como un paraísos fiscales para los grandes empresarios y políticos de todo el mundo.
Al abrirse estas nuevas líneas de investigación, la policía internacional ya contempla exigir nuevos datos sobre recientes inversiones, sumando nuevos nombres y apellidos, a los que ya se han ido revelando, como los de Jaime Camil Garza, Carlos Hank Rhon, Madrazo, Luis Téllez, Eugenio Ebrard y otros más.
En esa lógica, nombres de personajes cercanos al gobierno morenovallista podrían ser puestos en la mira, en virtud de nuevas investigaciones.
Evidentemente, personajes como Cabalán Macari, Roberto Moya, Eukid Castañón, Eduardo Tovilla, por citar algunos, difícilmente aparecerán en las listas.
Sin embargo, familiares y colaboradores de algunos de ellos pueden abrir una cloaca de proporciones incalculables.
Ahí está la clave.
De ahí que la Lista Falciani sea desde hoy un tormento en los pasillos de Casa Puebla.
Por algo será.
