Primero.- Los encargados de la Seguridad Pública y de la Persecución de Delitos de Veracruz, pudieron haber evitado el secuestro y asesinato del estudiante del Tecnológico de Monterrey Campus Puebla, Antonio Sebastián Préstamo Rivera, ocurrido en Puebla y Veracruz, pero sus "compromisos" o sus "negligencias", los llevaron a formar parte de otra de muchas tragedias –como espectadores–.
Le comento lo anterior porque la semana pasada la columnista Claudia Guerrero Martínez, del Portal Veracruzano "Plumas Libres" dejo entrever un caso de corrupción y de negligencia de autoridades veracruzanas, que facilitaron la expansión de una banda de secuestradores, la mayoría menores de edad, donde entre sus integrantes se encuentran: Rafael Barradas Hernández, su primo Edson Hernández Sangabriel, los únicos detenidos del caso, además de Ray Sebastián Chaves Garrido, el tercer de los sospechosos y quien hasta el momento sigue prófugo.
La columnista sostiene su información en reportes de ex elementos de la Policía Ministerial que sostienen que la Procuraduría General de Justicia de Veracruz pudo haber desmantelado la banda de secuestradores, antes de que estos maquinaran y llevarán a cabo el plagio de Sebastián Préstamo.
‎Según estos ex ministeriales Rafael Barradas y Ray Sebastián –el prófugo– planearon y ejecutaron el secuestro de un menor de edad, hijo de un empresario de Jalapa, esto fue el pasado 21 de enero. los plagiarios ingresaron a la casa de la mama de su víctima, llevaban pasamontañas y guantes, la amordazaron con cinta canela, el joven que iba a ser secuestrado logró escapar y regreso con elementos de la Secretaría de Seguridad Publica.
Para ese momento la mujer seguía amarrada, parte de los delincuentes ya habían escapado con valores y dinero de la víctima y solo se encontraba un menor de edad, Moisés Pardo Pinos, quien fue descubierto cuando se llevaba la ropa del que iba a ser secuestrado.
Pardo Pinos rindió su declaración y dio los nombres de todos los integrantes de la banda:
Rafael Barradas Hernández, hijo de un ex policía ministerial y actual empleado de un empleado del Poder Judicial de Veracruz; Edson Hernández Sangabriel, ambos detenidos, además de los prófugos Ray Sebastián Chaves Garrido, Gerardo Gersano, Christopher Reyes y Oliver Contreras Mendoza, hijo de un físico culturista en Cuernavaca y hermano de un marino de los Estados Unidos, además del mismo Moisés Pardo Pinos.
Y es que Moisés Pardo obtuvo casi de inmediato su libertad, cambiando solamente su declaración, sin que fueran investigados todos estos menores, sobre todo porque se dijo que la mayoría eran vendedores de cocaína y viciosos de la misma droga.
‎Se imagina usted si la procuraduría de Veracruz hubiera actuado con rectitud y prontitud, Sebastián Préstamo aun estaría vivo.
Segundo.- A poco más de un mes de que fuera  secuestrado y  asesinado el estudiante de preparatoria del Tec de Monterrey, Sebastián Préstamo Rivera, aún hay muchas preguntas que flotan en el aire y que las autoridades hasta el día de hoy no han sido capaces de responder?
1.- Qué fue realmente lo que pasó entre el 9 y el 11 de febrero del 2015?
A partir del 9 de febrero empezaron las llamadas telefónicas de los secuestradores a los padres de Sebastián Préstamo para exigir 15 millones de pesos  como rescate para regresarles con vida a su hijo, cantidad que aunque oficialmente no se ha dicho nada, sin dudarlo la familia reunió y entregó a la DGADAI, para que se hicieran cargo de las investigaciones y seguimiento del caso.
2.- Alguien duda que una familia de empresarios avecindada en un fraccionamiento de lujo como es La Vista, con capacidad económica para darle un auto con un valor comercial de unos  800 mil pesos a manera de regalo de cumpleaños, iba a escatimar en erogar 15 millones, que los secuestradores habían fijado como el precio de su vida?
Por supuesto que esa idea está completamente descartada.
El problema radica precisamente en eso, en que el monto fijado como rescate sí fue aportado por la familia, pero nunca llegó a manos de los secuestradores. Entonces vendría la siguiente pregunta.
3.- Dónde quedó la bolita?
Es decir, la única forma de poder resolver este misterio, sería la captura del tercer implicado RAY SEBASTIAN GOMEZ GARRIDO, quien al estar en este momento en calidad de prófugo o desparecido, es al que por el momento la ministerial podría culpar sin problemas de haberse quedado con el producto del rescate.
Por esa razón es que Gómez Garrido jamás será capturado, porque entonces todo el teatro se les vendría abajo, ya que confirmaría que ninguno de los tres implicados recibió dinero alguno.
En las oficinas de la DGADAI a cargo de Fernando Rosales Solís las cosas están que arden, se percibe un ambiente muy pesado, debido a que las presiones de la familia del  estudiante del Tec asesinado han venido arreciendo y saben que tarde o temprano la verdad saldrá a relucir y quien sabe hasta dónde salpicará, lo que es un hecho es que en este momento la DGADAI está bajo sospecha.

‎Nos vemos cuando nos veamos