1.- Somos un país capitalista de tercer orden o tercer mundo, como le acomode el concepto. Por ende los dueños del capital andan a la caza de negocios altamente redituables; sin la obligada espera de la recuperación de sus capitales.
1.1.- En el primer mundo hay inversiones que necesitan hasta quince años para recuperar lo invertido. En países atrasados hacendariamente como México, y agravada la situación por la corrupción nacional, la inversión (que ya incluye el obligado moche o diezmo), viene de retorno en no más de cinco años.
1.2.- E incluso probado está que en la gestión de servicios públicos como: iluminación, recolección de basura, dotación de agua potable y servicios de drenaje de aguas grises o negras, lo estipulado en supuestas licitaciones es una cantidad, pero la invertida es mínima, toda vez que los tres tipos de gobierno con dinero público han creado la infra y la estructura que gestionaran los beneficiados en este tipo de negocios servidos a la carta, o llave en mano.
2.- Otro aspecto más profundo, es la castración administrativa que sufren los gobiernos afectos a estos enredos, al negarse de plano a ejercer la gestión de servicios públicos consignados constitucionalmente, pues abdican de ejercer sus responsabilidades contraídas en los actos electorales; incluso estas conductas atrasan la evolución natural de una sociedad pues les niegan el acceso a los trabajadores para organizarse como mutualidades, cooperativas o sindicatos, matando de raíz el nacimiento de liderazgos o conducciones útiles para una sociedad emergente como la nacional.
3.- Los concesionarios llegan para ganar dinero, no para servir a las sociedades, aunque deseable es que los otorgantes del negocio les demandaran bajo reglas de productividad que suman eficacia con eficiencia, que obligadamente generaran a plazo cierto cuando menos tres culturas inexistentes en México y en Latinoamérica:
a).- La cultura del uso racional del agua, que comprende el uso inteligente de aguas claras y grises combinadas con los procesos descontaminantes.
b).- El uso racional de la energía eléctrica, con el impulso de energías alternativas.
c).- La clasificación de la basura para reciclar materiales; y crear composta para eliminar abonos cancerígenos, abarcando esencialmente el material orgánico producido en las medianas o grandes ciudades.
Sí, los gobiernos violan constitucionalmente sus obligaciones sin recibir sanciones: ¿por qué: el gestor del agua, de la basura, de la iluminación, de la seguridad pública o de la educación, debe declinar de su sagrado derecho de ganar dinero para servir a la sociedad?.
Nuestra casa
Con dinero o sin él, con una buena salud, se puede recorrer una gama de sitios históricos en esta bella ciudad nuestra.