Para el gobierno morenovallista es muy fácil deslindarse de las acusaciones de espionaje telefónico perpetrado en contra de diversos actores de la política.

Sin embargo, los expedientes publicados en 2015 por el portal wikileaks confirman que el gobierno de Puebla sí compró equipos de espionaje de alta tecnología y que estos fueron destinados al espionaje en contra de los enemigos del Señor de Los Cerros.

La información dada a conocer por el periódico Reforma se suma a las denuncias periodísticas de Intolerancia Diario, Proceso, LadoB y Fernando Maldonado, en las que se mostraron elementos formales que vinculan al gobierno del estado con el espionaje telefónico.

En un rueda de prensa, el vocero panista Javier Lozano desdeñó las denuncias, aseguró que no hay pruebas del espionaje y que Puebla no cuenta con esos equipos.

Para su mala fortuna, existen pruebas fehacientes de que el gobierno de Moreno Valle no sólo tenía los equipos para intervenir, sino que también compró  y contrató a la empresa italiana Hacking Team, a través de la israelita SYM, la compra y capacitación para incrustar un virus cibernético con capacidad de intervenir equipos de cómputo y teléfonos celulares.

Las pruebas derivadas de la información del portal wikileaks confirman que un empleado del gobierno del estado de nombre Celorio Mansi, tuvo comunicación vía mail con el proveedor Hacking Team en dos sentidos:

1. Para pedir que la empresa contratada enviara archivos infectados a diversos actores de la política a través de exploits, que no son otra cosa que correos electrónicos infectados de un virus, que al ser aceptados se internan al equipo receptor y se apoderan de la información de los equipos y pueden grabar cualquier conversación emitida por el equipo infectado.

2. Y para coordinar la capacitación de personal en el Hotel NH del centro histórico de la capital poblana.

Además, dentro de la revelación de wikileaks aparecen e-mails de Celorio Mansi con el proveedor mexicano SYM de Gadi Mokotov con copia para la italiana Haking Team hablando del proyecto de intervención telefónica y los productos adicionales.

Por otra parte, existe confirmación de la compra del grupo de Puebla del programa Galileo, que es un virus creado para violar la ley y grabar ilegalmente las llamadas y los datos de quienes abrían correos que contenían al virus Galileo.

Dentro de estos correos se documenta que se realizaron dos operaciones: la compra inicial y la renovación de licencias.

Y para rematar, existen e-mails de Celorio Mansi solicitando exploits (virus que se interna en los equipos para hackearlos y controlarlos) relacionados con Eukid Castañón y diversos temas de interés regional.

Otros exploits fueron creados con fines políticos hasta en las internas nacionales del PAN.

En esa campaña interna, se usaron exploits a través del e-mail de Miguel Abad del equipo de Manuel Oliva para espiar al equipo de Oliva y Cordero.

En ese entonces, en Contracara del 20 Julio 2015 publique la columna titulada: RMV, un espía de altos vuelos

Ahí describí como “Operadores morenovallistas intervinieron al equipo cercano de Ernesto Cordero, a través de un virus electrónico, justo el día de la elección por la dirigencia nacional del PAN. A través del Exploit Galileo, hackearon celulares y computadoras, por lo que sabían cada paso que daban.

Hoy se confirma que Moreno Valle es un espía de altos vuelos y debe quedarnos claro que quienes fuimos objeto del espionaje telefónico, no podemos pasar por alto el autoritarismo del gobernador y que debemos mostrar nuestra indignación predicando con el ejemplo.

A partir de esta semana presentaré una denuncia penal ante la Fiscalía para la Atención de Delitos contra Periodistas y aportaré las pruebas que vinculan al gobierno estatal con el espionaje.

Es tiempo de levantar la voz.

En próxima entregas les presentaré todos los documentos con las implicaciones del caso.

No se las pierdan.