No está usted para saberlo ni un servidor para comentárselo, pero la Fiscalía General del Estado (FGE), por lo menos de palabra, ha dado un plazo de 15 días para que se pueda echar a andar la maquinaria humana para atender las miles de denuncias que están “paradas” tras el cierre de las agencias del Ministerio Público no solo de Puebla, sino del área metropolitana que fueron cerradas tras la puesta en marcha del Nuevo Sistema de Justicia Penal, que “como El Borras”, inició en la entidad.

Y es que todas las personas que acuden a la Fiscalía General del Estado (FGE) para preguntar qué pasó con la denuncia que presentó, de plano les dicen que en esos momentos no los van a atender y que tendrán que regresar 15 días después para que puedan resolver ese conflicto.

Abogados litigantes a quienes se les ha preguntado cómo ven este nuevo sistema y qué piensan que va a pasar con las miles de denuncias que de un día para otro fueron enviadas al archivo bajo el argumento de “Al archivo por inactividad procesal o ausencia del interés jurídico”, comentaron que es la misma Fiscalía la que se hace daño sola y pone en evidencia su intereses en procurar justicia, por una sola razón.

Muchos de los delitos que fueron enviados al “archivo muerto”, son de los que se siguen de oficio y no por querella, como el robo en todas sus características, incluyendo los a mano armada, de casa-habitación, de vehículos, de comercios, a transeúntes, cuenta-habientes, etcétera, además de las lesiones, principalmente en agravio de mujeres y otros delitos.

De no agilizarse el reordenamiento de estos miles de expedientes, Puebla se estaría convirtiendo en un paraíso delictivo.

Imagine el lector cuántos y cuántos delitos estarían sin ser esclarecidos, sería la impunidad en todo su esplendor.

Y le pregunto: ¿En las denuncias por el delito de fraude, de las que más se presentan en el estado, quién va a ser el ganón de la Fiscalía? ¿Quién desde el interior va a operar para que aparezcan o se pierdan en las cientos de cajas que del C-5 van ahora para las instalaciones de lo que era la celegación Centro del Ministerio Público?

Y es que aunado a todo el desastre generado por el cambio jurídico, se encuentra la apatía del gobierno del estado, que se ha negado a colocar anuncios, contratar comerciales en radio y televisión, no para informar del nuevo sistema, sino qué van a hacer todos los que denunciaron delitos y quedaron en la orfandad.

De los juzgados penales luego le comento, porque ya debe saber que de un tajo desaparecieron el Juzgado Noveno de lo Penal y todos sus procesos están saltando de un juzgado a otro.

La FGE con carne de gallina en “El Triángulo Dorado”

La tarde del viernes, en la zona que comprende “El Triángulo Dorado”, se registraron otros dos casos de ejecución por arma de fuego.

Iván y Alexis, de 20 y 22 años de edad, respectivamente, fueron asesinados con armas de fuego cuando se encontraban en la población de San Miguel Xaltepec, en el municipio de Palmar de Bravo, de manera específica en el kilómetro 180 de la autopista Puebla-Orizaba.

Un grupo de sujetos armados los sorprendió y les disparó en varias ocasiones, hay dos móviles, el primero es que les robaron sus motocicletas, el segundo fue un “ajuste de cuentas” entre integrantes de la banda de chupaductos que en los municipios de Palmar de Bravo, Quecholac, Acatzingo, Tepeaca y Tecamachalco, se disputan la plaza para el robo de hidrocarburos.

Lo cierto es que la zona que le comento se ha convertido en la más peligrosa de Puebla y del país, y este gobierno de Puebla, conjuntamente con su Fiscalía, ni han tomado cartas en el asunto, ni han solicitado la presencia de grupos especiales como la Secretaría de Marina e incluso la misma Policía Federal (Gendarmería), además de más personal del Ejército.

Y es que lo más preocupante, para este gobierno, es que ya no se sigan explotando los ductos de Pemex, que les da más ganancias que el narcotráfico y otros delitos.

“Lo bueno ya está por terminar”.

Nos vemos cuando nos veamos.