Los seres humanos sobrevivimos en una maraña mental monumental. Nos es casi imposible creer en el poder de nuestra mente. Por ejemplo, antes de iniciar cualquier cosa, aparentemente difícil de realizar, decimos: “Uy! no, eso no se puede hacer” o, de plano aseguramos que es imposible de llevar a cabo. Es obvio que si intento enfrentarme a “eso” con tal actitud, vencidos de antemano, será imposible lograr lo que sea.
Sin embargo, existen infinidad de casos en los que determinadas personas han vencido la adversidad, casi de forma imposible; porque no es nada fácil enfrentarse a una sociedad y a una comunidad “científica” que jura que, esto o aquello, es imposible de realizar. ¿Por qué?, porque “científicamente” no se puede. O porque la mayoría de la gente no cree poder hacerlo.
Sin embargo, gastamos miles de pesos en aparatos para bajar de peso que nunca usamos. Compramos libros de superación personal, libros para curar “males”, para mejorar nuestra superación y cuidado personal, o la decoración del hogar; pero, jamás, los leemos o nos tomamos la molestia de analizarlos….Es como si por el simple hecho de poseer tales libros se fuese a realizar “el milagro” de obtener aquello por lo que los compramos…Ese sí es un pensamiento mágico.
La magia no existe, la magia se logra trabajando, trabajando hasta lograr creer en uno mismo y en el poder del pensamiento positivo, lo cual es una lucha a brazo partido.