Una carta firmada por una agrupación fantasmal Poblanos por la seguridad AC cuyo presunto responsable de la publicación (sic) se autonombra Lic. Salvador Arévalo increpó al candidato de la coalición Juntos Haremos Historia en Puebla, Luis Miguel Barbosa Huerta por presuntamente haber anticipado que el nombramiento del eventual titular de Seguridad Pública no será poblano.
Sin autoría clara, entre los conocedores del ámbito policial se sabe que las líneas que descalifican al abanderado que tiene más ventaja entre los tres competidores, según diversas encuestas publicadas recientemente, vino del estado de Morelos, lo que aviva la especie de que los pisotones de callos comenzaron a calar hondo en las campañas.
El panfleto está publicado en algunas cuentas de Facebook manejadas con perfiles de dudosa autoría y con una clara postura anti López Obrador, lo que ofrece una faceta de la estrategia bastante evidente y deficiente.
Las razones de esas líneas tienen un contexto específico en la campaña extraordinaria que viven los poblanos para elegir a quien sucederá a Martha Erika Alonso Hidalgo, fallecida el 24 de diciembre pasado.
Primero fue el Tribunal Superior de Justicia, luego la Secretaría de Seguridad Pública y ayer todo el sistema, frente a uno de los gremios más golpeados por el régimen del extinto Rafael Moreno Valle, el de la Unión Popular de Vendedores Ambulantes 28 de Octubre, que lidera Rubén Sarabia Simitrio, preso político del exmandatario panista.
Barbosa Huerta ha endurecido el discurso contra quienes en el pasado han medrado al amparo del cargo público para obtener ganancias millonarias y que nadie, desde las contralorías, Comisión Inspectora y Fiscalía General del Estado pudo ver a tiempo.
‘Se han hecho multimillonarios mientras la gente trabaja todos los días para obtener lo necesario para vivir, hay gente que se ha enriquecido de manera desmedida y lo digo con conocimiento de causa’, dijo ante los integrantes de un gremio que se ha ganado el pan en la calle, literal, a base de golpes con otras organizaciones o las persecuciones de regímenes priistas y panistas.
‘Créanme que cada vez estoy más sorprendido de cómo en Puebla y en los diferentes segmentos de la administración pública hay corrupción hasta el tuétano, así es que vamos a liberar de corrupción…’, dijo.
‘Para nosotros es una cuestión histórica’ dijo el abogado de la familia, Tonatiuh Sarabia, hijo del dirigente de la 28 de Octubre sobre la visita de un candidato al mercado Miguel Hidalgo y Costilla, como ocurrió ayer a mediodía, cuando los adversarios del morenista participaban en un foro universitario en la Universidad Iberoamericana.
La estrategia de Barbosa Huerta tiene una clara intención de colocar a ‘la mafia del poder a la poblana’ en el banquillo de los privilegiados para ganar el voto de los olvidados, perseguidos o menospreciados del poder que detentó el alter ego de la clase política que gobernó Puebla en los últimos ocho años.
Barbosa Huerta tendrá una dura tarea si es que el vaticinio de las encuestadoras se cumple y obtiene el triunfo. No habrá celdas suficientes para poner a la sombra al cúmulo de personajes cuyos abusos y latrocinios les permitió tener vidas de oropel.
