Los maestrantes y todo el público que abarrotó la Maestranza disfrutaron borrachera de buen torear, en la foto el de La Puebla, José Antonio Morante ejecutando de manera vistosa el quite del “BÚ”, así llamado por semejar un búho con alas abiertas, evocando la época de oro del toreo con Joselito, considerado el más artista de los artistas, hoy, solamente él puede y le lucen bien ese tipo de desplantes; quite al toro de Jandilla después del Puyazo. (FOTOS 1 y 2) El de la Puebla del Rio ha dejado prueba del enorme bagaje cultural que posee y su admiración por los toreros clásicos.
Ni la menor duda cabe de que Morante tiene esa extraña y mágica virtud del poder conectar con los tendidos. Virtud que sólo Dios da, y el que la tiene, la tiene y el que no... no hay forma de obtenerla. Morante es ya poseedor de un arte tangible, es por tanto un Patrimonio del arte universal, estudioso de Joselito el Gallo.
Un día antes, en esa misma Plaza, el público de pie, aplaudiendo en un muy emotivo e impactante homenaje, la ovación estruendosa a los restos del toro “Aperador“ proveniente de la ganadería debutante en esa Plaza de “Santiago Domecq” en el “Arrastre Lento”, premio otorgado a la bravura y nobleza del Toro.
Publicamos la hermosa y emotiva fotografía del homenaje a los restos del toro, como una muestra de la enorme tradición y costumbres que encierra la Fiesta Brava. La ganadería que recibe el reconocimiento al mejor encierro de la Feria es la de “Fuente Ymbro”.
Si, cuando los toreros andan mal o se limitan a cumplir a secas, las crónicas de su actuación se limitan a decir: “silencio” en tal toro; en Sevilla ocurre y ha ocurrido al revés, silencio absoluto en los tendidos ante el toreo de Pablo Aguado, vestido de “Gran Poder” y Oro, el torero que el mundo del toro esperaba, 20 naturales a media altura; con Aguado parece haber renacido el clásico toreo de la Escuela Sevillana en su manifestación más pura y valga lo reiterativo; más natural del toreo. Con esta fotografía impactante y que dice mucho de Javier Carabias reproducimos un texto del cronista que maneja el buen decir Rafael Peralta: “El Maestro Emilio Muñoz miró al callejón donde estaba José Tomás le dijo <
Como una evidencia de que este triunfo de Aguado no es nada casual; debe decirse que un solo día después, por lesión en una mano de Roca Rey fue a ocupar su puesto, saliendo nuevamente a hombros por el corte de 2 orejas 2, esta vez en Valladolid. Espoleando a Manzanares y a mismo Morante. Triunfo logrado basándose en un toreo al natural. Faenas de absoluta naturalidad sin retorcimientos, sin alharacas, toreo causal de verdadera emoción. Y rápidamente se notó el “efecto Aguado” pues el lleno fue absoluto. Rematamos con la sentencia del Matador Antoñete: “El toreo bueno es el que te queda en el paladar, el que llega al corazón y te encoje el estomago”.
También en México, al cierre de la Feria Nacional de San Marcos en Aguascalientes Morante sobresale, al ser dados a conocer los triunfadores con el Premio a la mejor faena, la realizada al toro “Saber Estar” de las dehesas de Teófilo Gómez y como Triunfador absoluto queda Alberto López Simón. Recibiendo también ambos el trofeo del Cristo Roto. Y, como Toro de la Feria, se reconoce a “Amor Infinito” de San Miguel de Mimiahuapan toro indultado por Arturo Saldivar.