Este viernes Andrés Manuel López Obrador realizará su tercera visita como presidente de México a Puebla con una particularidad: el enojo social metropolitano ya se hizo sentir en las urnas.
Tanto en Texmelucan como en Atlixco se tienen previstas manifestaciones por sectores importantes. En San Martín, los reclamos de los ambulantes y representantes del tianguis más grande de México se harán escuchar.
Lo mismo exigirán resultados ante el aumento de la inseguridad, que por el reordenamiento comercial.
En el segundo punto, durante la tarde, en Atlixco, la queja será de los transportistas que se quedaron muy dolidos luego que se informó que el aumento al pasaje que tanto han peleado, no se concretará en los próximos días.
A ello habrá que sumarle que en Tehuacán, Felipe Patjane, quien llegó al palacio municipal cobijado por las siglas de Morena, tiene de cabeza el municipio y olvidó por completo el principio de austeridad que tanto pregona AMLO.
Los tehuacaneros, con justa razón, exigen resultados en materia de seguridad mientras que el feliz y enamorado alcalde se da tiempo para rentar un helicóptero y proponerle matrimonio a una funcionaria municipal.
En este clima político y social, arribará López Obrador a una entidad que fue clave para su triunfo electoral.
Sus operadores, ¿tendrán medido el impacto de estas manifestaciones?, ¿habrán calculado hasta dónde podría llegar el descontento social?, ¿será capaz AMLO de reconocer que sus gobiernos han quedado a deber?
Veremos y diremos.
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Los genios de la movilidad
Recientemente le dimos cuenta en Intolerancia Diario de las nuevas ocurrencias en el Ayuntamiento capitalino en material de movilidad vial.
La aprobación del famoso 1 X 1 en las calles del primer cuadro será un verdadero calvario que, le adelanto, causará más problemas que soluciones viales.
Si bien existen poblaciones o comunidades en donde se puede implementar la medida para agilizar el tránsito, nuestras autoridades deberían darse cuenta que no es lo mismo aplicar el 1 X 1 en Chignahuapan, que en plena capital.
Los regidores de Puebla capital están a tiempo de evitar esta catástrofe vial; el balón está en su cancha porque, para aprobar las reformas, se requiere del Cabildo.
Avisados están.