Gran controversia ha causado la selección de los seis aspirantes a la presidencia de la Comisión de los Derechos Humanos (CDH) de Puebla.

Los elegidos de entre 25 son:

  • 1.- José Félix Cerezo Vélez
  • 2.- Eusebio Arnulfo Cordero Méndez
  • 3.- Rubén Alberto Curiel Tejeda
  • 4.- María Elena Guerrero Flores
  • 5.- Omar Martínez Báez
  • 6.- Santos Valladares

La controversia o lo que hizo ruido fue la selección de algunos personajes que tienen fuertes vínculos con el pasado morenovallista, ese que ahora tanto se busca eliminar.

A estos personajes ahora se les llama el clan de Badillo.

Sin embargo, ante este clan, hay aún optimismo en el mundo de los derechos humanos.

Se habla de que hay un perfil o una línea más idónea, quien será el elegido de los elegidos.

Aquí analizaremos los perfiles.

El clan

Dos de los seis elegidos fueron muy mal vistos.

El clan de Badillo.

El número 4 de la lista y única mujer, está muy fuertemente vinculada al morenovallismo y con el ex presidente de la CDH, Adolfo López Badillo.

Incluso abogados y especialistas en derechos humanos, la acusaron en su momento de tener trabajando en la institución a su hija Karen Madahi de la Rosa Guerrero.

La número 4, en aquellos tiempos negros del morenovallismo, fue nada menos que la directora de Derechos Humanos de la Procuraduría General de Justicia.

Algo muy cuestionable, sobre todo si recordamos que fueron los tiempos de persecución y presos políticos.

Ahora dice ante medios de comunicación que buscará recuperar la credibilidad del organismo.

El chiste se cuenta solo.

En medio de esas declaraciones, quienes la conocen afirman que se hizo muy amiga no solo del señor López, sino de Omar Martínez Báez, actual presidente interino.

De premio por su labor, fue nombrada posteriormente como directora General de Derechos Humanos de la Secretaría General de Gobierno, ya en tiempos de Tony Gali.

Con experiencia sí, dicen los que saben, pero en su actuar muy cuestionado.

El quinto en la lista es nada menos el actual presidente interino de la CDH.

Durante ocho años, fue el brazo derecho del señor López en los tiempos más negros del organismo.

Este personaje fue el que más ruido causó de la lista.

Sobre todo porque ex trabajadoras de la CDH acusaron entonces al ombudsman  López Badillo de haber violentado sus derechos recurriendo al acoso laboral, y Martínez Báez, fue incluido en las acusaciones.

Ahora ambos están entre los finalistas.

Ver para creer.

El favorito y los demás

En los corrillos no solo del Congreso, sino del mismo gobierno estatal y hasta en el mundo de los derechos humanos, ven como favorito al número 1 de la lista.

El egresado de Derecho de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), es director general de la segunda visitaduría general Comisión Nacional de los Derechos Humanos, desde 2015.

Por su actual cargo, experiencia en derechos humanos y vínculos con la 4T, es el favorito para llegar a la CDH.

El número 2 de la lista, es nada menos que el ex defensor derechos universitarios de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP).

Del académico se dice que podría ser el caballo negro de la carrera a la CDH.

El tercero en la lista, es el coordinador de la Maestría de Derechos Humanos de la Universidad Iberoamericana Puebla.

El doctor en Derecho con tres maestrías también es un serio favorito a llegar al cargo, sobre todo porque la institución en la que trabaja, siempre fue un fuerte crítico de la violación de derechos humanos en tiempos del morenovallismo.

Algunos dicen que ese es su fuerte, pero otros afirman que esa misma es su debilidad, al ser siempre critico de los sistemas.

Sin embargo, no deja de ser un segundo favorito.

El sexto y último de la lista, hay poco que decir es licenciado en derecho por la Universidad de San Luis Potosí.

Él político de antaño, en 2006 intentó ya llegar a la CDH, pero no consiguió en ese tiempo su carta de antecedentes no penales actualizada y por eso quedó fuera.

Su panorama parece gris, sobre todo por los vínculos con el ex gobernador interno Guillermo Pacheco Pulido, lo que podría marcarlo.

Las propuestas serán presentadas ante el Pleno del Congreso, para que se elija un perfil por mayoría de votos que ocupará el cargo a partir del 7 de noviembre de 2019 y concluirá en 2024.

Ya les contaremos.