El impactó que generó el asesinato de cuatro personas, dos de ellos estudiantes colombianos de la UPAEP, un alumno de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla y un conductor de Uber; rebasó la esfera local. A las condolencias y el repudió por la ola de violencia que emitieron ambas casas de estudio, se sumarán sin duda, reacciones nacionales e incluso reclamos internacionales.
Quizá por ello la respuesta de las autoridades, específicamente de la Fiscalía General del Estado fue como marca la ley: “expedita”.
Antes de que se cumplieran 12 horas del hallazgo de los cuatro cuerpos en un predio de la colonia Los Tanques, de la junta auxiliar de Santa Ana Xalmimilulco, la dependencia ofreció una rueda de prensaen la que además de la primera reconstrucción de los hechos y la identificación de las víctimas, anunció la detención de tres posibles responsables del multihomicidio e incluso adelantó que ya se realizaban cateos para tratar de encontrar más pruebas.
Sin duda una inusual celeridad en la investigación.
¿Habríamos visto ese apremio, ese interés, si el encargado de despacho Gilberto Higuera no estuviera a horas de ser ratificado por siete años más en el puesto de fiscal general?
La duda es pertinente porque hasta antes de este lunes, lo común no era que el titular de la FGE saliera a dar la cara ante los muchos casos donde se cometen delitos de alto impacto y que simplemente no son resueltos con la misma premura.
Anunciar detenidos, informar de los avances e incluso realizar las diligencias, no son, por desgracia, parte de lo que habitualmente informa la dependencia, por el contrario, la Fiscalía se identifica más con eso que coloquialmente llamamos tortuguismo.
La rueda de prensa que encabezó Gilberto Higuera, acompañado del secretario de gobernación, David Méndez, se dio 48 horas antes de que el congreso elija quién será el titular de la FGE por los próximos siete años.
Deseo que no se repitan cosas tan atroces como esta noticia, pero y si volviera a suceder un hecho de tal impacto cuando Higuera Bernal haya sido avalado por los diputados locales, ¿saldrá con la misma celeridad a dar la cara, será ya una política permanente de la fiscalía?
¿Por qué sí resultó eficiente Gilberto cuando restan horas para que los diputados, como todo indica, lo ratifiquen en el cargo por siete años más?
Gilberto Higuera ya demostró, en un solo día la eficiencia que puede tener, una práctica que contrasta con todas las omisiones de los últimos 16 meses.
Y precisamente por la falta de aseo, celeridad y eficiencia de la fiscalía, una duda más se asoma. ¿Encontrar a tres presuntos responsables en cuestión de minutos obedece realmente a una investigación fundada o veremos nuevamente el uso de chivos expiatorios para justificar su permanencia en el cargo?
Estas preguntas y otras más surgen precisamente porque durante años hemos denunciado cómo la fiscalía se ha caracterizado por pésimas prácticas y que la investigación de los delitos, es una de las 20 cosas que menos les importan.
Una madre colombiana y el GPS
Durante la madrugada de este martes, Angélica Serpa, madre de José Antonio Parada, voló a México. Antes de abordar el avión concedió una entrevista a Semana donde reveló que fue ella quien le solicitó a compañeros de su hijo que lo fueran a buscar luego de que el estudiante de medicina de la UPAEP no respondía sus llamadas desde la noche del domingo.
El GPS del celular, que permanecía con José Antonio, fue lo que permitió localizar, sin vida, al joven y a las otras tres personas.
La mujer también reiteró que las autoridades nada han hecho por informarle sobre la situación: “Con nosotros no se ha comunicado nadie, tan solo el amigo de mi hijo. Estamos en el aeropuerto y vamos a coger el vuelo para allá. No sabemos qué pasó".
Sus declaraciones reiteran que la capacidad de investigación de la Fiscalía es nula. Tristemente, la información proporcionada por la madre y gracias a ese celular, fue que se logró encontrar el cuerpo de su hijo, pero esos esfuerzos fueron utilizados para justificar la supuesta eficiencia y la elección de un Fiscal.