Concluye el Segundo Período de Sesiones del Segundo año Legislativo del Congreso de Puebla, que comprendió del 15 de enero al 15 de marzo, inmersos en una legislatura que vive —por lo visto—, las mismas arbitrariedades que otros Poderes Legislativos del país e incluso que en la Cámara de Diputados.
Ya Porfirio Muñoz Ledo y otras/os legisladores federales nos lo han hecho saber, visibilizando también el “trato diferenciado”, la censura, iniciativas congeladas y debates acotados -dijeron- Y tal y como ha sucedido en otros tiempos, las Iniciativas que sí se resuelven rápidamente, son las que envía el Ejecutivo estatal.
Esto no tendría nada de extraño, escuchamos ya en algunos legisladores de MORENA en el Congreso de Puebla “para eso somos mayoría” lo que sí es extraño es que hoy vivimos dicen un “nuevo régimen” el de la 4T, que critica reiteradamente al “régimen anterior” por sus abusos en el ejercicio del poder, y que hoy comete los mismos, o hasta mayores atropellos a procedimientos que dijeron nunca más iban a cometerse, que nunca más “nada por encima de la ley”.
Que si esto mismo se hacía en otros tiempos. Seguramente, pero no que todo es diferente en este “nuevo régimen de la 4T” ¿Entonces qué pasa?
Poco a poco nos vamos dando cuenta, no solo al interior del Congreso, sino en el resto de las instituciones que el ejercicio de los gobiernos emanados de esa coalición formada por MORENA no solo está siendo una decepción, están siendo un verdadero peligro como se comentó en alguna época.
Lo comento también porque después de esa unión de mujeres diversas que vimos en foros, conferencias, pronunciamientos, decálogos, visibilizaron las violencias al interior de las familias, la inseguridad, los bajos salarios, empleos sin prestaciones, abusos laborales, acoso, hostigamiento, deficiencias en sistemas de salud, partos mal atendidos y un largo etcétera que sufren las mujeres. Después de las diversas movilizaciones de mujeres del 7 y 8 de marzo que levantaron la voz hartas de la violencia y la impunidad. Después de esa gran muestra de reclamo en silencio que vivimos el 9 de Marzo, que tuvo una respuesta estremecedora; una de las exigencias es justamente que los Congresos aprueben las reformas que materialicen los reclamos de la agenda pendiente de mujeres.
Por eso en el “nuevo régimen” este Congreso no puede congelar Iniciativas que van dirigidas directa o indirectamente a atender dichos reclamos, tampoco deben cerrarse al debate de temas trascendentales que tocan derechos humanos de las mujeres.
Tampoco en este “nuevo régimen” se debe permitir que en el Poder Judicial se juzgue sin perspectiva de género, y como bien se ha escrito, no atiendan las recomendaciones, tesis protocolos, queremos que se cumplan las leyes.
En este “nuevo régimen” en el Poder Ejecutivo les toca rediseñar políticas públicas para atender y superar marginación, desigualdad laboral, educativa, en salud, pobreza y política que viven mujeres y niñas.
A la sociedad en su conjunto hacerse corresponsable en esta lucha que es contra una violencia sistémica que permitimos que se naturalizara.
Los hombres deberán asumir su responsabilidad como generadores de violencias, trabajar en ellas y detener su machismo, queremos respeto.
En unos días seguramente se paralizarán la mayoría de las actividades diarias, derivado del brote de COVID19 confío que ese período nos sirva de reflexión y sea el inicio de un cambio en todas y todos.
Porque por encima de este dice ser un “nuevo régimen” nosotras, las mujeres #DespuésDelParoNoParamos.